Ésta es la cuarta versión larga de lo que quiero que ustedes
todos entiendan (antes de estas versiones largas hubo 8 versiones
más cortas, la primera de esas versiones cortas la escribí en agosto de 1999). Y hoy por hoy esta versión ya está un poco
vieja (lo más actual que hoy
tengo es el ensayo que escribí en octubre de 2014: EL CAMBIO VERDADERO Y SUS
PROBLEMAS, pero el problema de ese ensayo es que no explica detalladamente todo
lo que quiero hacer entender), pero todavía
es la explicación más estructurada de mis ideas, aunque algunas partes ya estén
superadas.
Pero muy pronto me pondré a escribir la quinta versión, espero.
UNA EXPLICACIÓN DE LAS COSAS
(Es necesario arreglar a la humanidad, pero el asunto es mucho más
grande, de eso trata esta explicación)
ÍNDICE
INTRODUCCIÓN
CAPÍTULO 1 EL PROBLEMA (EL NUDO) DE ESTA
EXPLICACIÓN
CAPÍTULO 2 ALGUNAS
DE LAS PRUEBAS CON LAS QUE SOSTENGO ESTA EXPLICACIÓN
La mala suerte: las
medicinas
La mala suerte: Nagasaki
La ignorancia: los
extraterrestres
La ignorancia: los mormones
El sonambulismo: Adán y Eva
CAPÍTULO 3
MI ESQUEMA DE LAS COSAS
1 La palabra cosas
2 La eternidad de las cosas
3 Los procesos (modos de ser) de las cosas
4 Los nichos que hay en las cosas
5 Culpas y méritos de las cosas
6 La conexión de las cosas
(donde las cosas son en los cerebros de tipo humano)
6.1 Lo primero y lo segundo
6.1.1 Lo primero (o sea, todas las cosas)
6.1.2 Lo segundo (los cerebros de tipo humano)
6.1.2.1 Política
6.1.2.1.1 Derecha e izquierda
6.1.2.1.1.1 Los derechistas
6.1.2.1.1.2 Los izquierdistas
6.1.2.1.2 Democracia
6.1.2.1.3 Libertad
6.1.2.1.4 Revolución
6.1.2.2 Religión
6.1.2.2.1 Ateísmo
6.1.2.2.2 El bien y el mal
6.1.2.2.2.1 El bien
6.1.2.2.2.2 El mal
6.1.2.3 Filosofía
6.1.2.3.1 El ser
6.1.2.4 Ciencia
6.1.2.4.1 La materia
6.1.2.4.2 El universo
6.1.2.4.3 La vida
7 Las cosas podrían ser de 3 tipos de cosas o
de 4 tipos de cosas
7.1 3 tipos de cosas (cosas de tipo piedra, cosas de tipo perro, cosas de tipo
humano)
7.1.1 Cosas de tipo piedra
7.1.2 Cosas de tipo perro
7.1.3 Cosas de tipo humano
7.2 4 tipos de cosas (cosas de tipo piedra, cosas de tipo perro, cosas de tipo
ustedes, cosas de tipo yo)
7.2.1 Cosas de tipo piedra
7.2.2 Cosas de tipo perro
7.2.3 Cosas de tipo ustedes: los dioseros y
los no dioseros
7.2.3.1 Los dioseros: religiosos, brujos,
adivinos, miradores de ovnis, filósofos idealistas, “superación personal”
7.2.3.1.1 Los religiosos
(Dios, dioses, diablo, diablos, espíritus)
7.2.3.1.2 Los brujos
7.2.3.1.3 Los adivinos
(adivinaciones, videntes, astrología, tarot)
7.2.3.1.4 Los miradores de ovnis
7.2.3.1.5 Los filósofos idealistas
7.2.3.1.6 La “superación personal”
7.2.3.2 Los no dioseros: científicos, filósofos
materialistas, revolucionarios materialistas
7.2.3.2.1 Los científicos
7.2.3.2.2 Los filósofos materialistas
7.2.3.2.3 Los revolucionarios materialistas
7.2.4 Cosas de tipo yo
8 Mundos que hay en las cosas
8.1 Mundo en que son las cosas de tipo piedra
8.2 Mundo en que son las cosas de tipo perro
8.3 Mundo en que son las cosas de tipo
ustedes
8.4 Mundo en que son las cosas de tipo yo
9 Las cosas podrían ser sólo de 2 cosas: de
(lo) Dios, o de
(lo) no Dios
9.1 Lo Dios (lo espiritual)
9.2 Lo no Dios (lo no espiritual)
9.3 Pero lo Dios es sólo ignorancia
9.4 Pero lo no Dios llega hasta la muerte
colectiva y planeada de todas las humanidades
CONCLUSIÓN
INTRODUCCIÓN
Y solamente quería arreglar a la
humanidad, pero terminé hasta esta explicación.
Y quiero arreglar a la humanidad, pero
el asunto de los problemas de la humanidad no es tan sencillo, porque, ¿qué
somos nosotros los seres humanos?, ¿y qué es todo?, hasta estas preguntas llega
el querer arreglar a la humanidad, porque son muchos los elementos que hay en
nuestros problemas, porque está la terrible sociedad que tenemos, y están
ustedes, que no han podido arreglar, o que ni siquiera se dan cuenta de que
habría que arreglar.
Hoy hay mucho daño, hay pobreza, hay
hambre, hay prostitución, hay maldad (hay cosas muy viles, hay asesinatos, hay
secuestros, hay violaciones, de mujeres y de niños, hay depravación, y por qué
los hay, por qué hay seres humanos tan malos. Y lo que se ha hecho hasta hoy no
funciona, porque vivimos como en una farsa, farsa nuestros gobiernos, farsa
nuestra sociedad), hay estafa, hay mentira,
hay poder, hay robo, hay corrupción, hay irresponsabilidad, hay suicidas, hay
enfermedades (y hoy hay medicinas que antes no
teníamos, o sea que ha habido mucha muerte injusta, y eso debería decirnos
algo, por cosas como ésa yo llegué hasta esta explicación), hay enfermedades absurdas (por
el alcohol y por el tabaco y por las demás drogas, y hay muertes causadas por
borrachos o por drogados manejando automóviles),
hay tortura, hay terrorismo, hay disturbios en muchos países, no hay trabajo (y el que hay está con salarios de hambre, y después de los
40 años de edad es difícil encontrar trabajo),
hay incluso el tema de la fealdad (y todo
tendría que ser atendido, porque si queremos justicia, igualdad, felicidad, no
podemos ignorar ninguna causa de problema. Los seres humanos somos sólo una
combinación de genes, somos azar, cada ser humano es sólo una posibilidad en
millones, pero cuando somos, necesitamos ser felices, es lo único que podría
justificar a la vida).
Y tendríamos que arreglar todos los
problemas, tendríamos que hacer lo más que se pudiera por solucionarlos, o por
evitarlos. Tendríamos que llegar hasta la clonación (pero esto llevaría
muchísimos años), para que todos fueran
iguales (no sólo económicamente sino) en cara y cuerpo (claro,
una versión masculina y otra femenina), y en
tamaños, y en condiciones, para que no hubiera complicaciones: mutaciones,
síndromes de Down, enanos, débiles, homosexuales (y la homosexualidad es una cosa más de la naturaleza, así como lo es la
heterosexualidad, y si la heterosexualidad es la forma normal de la naturaleza
en niveles de la animalidad superior, es porque significa la continuidad de la
vida, sólo eso, y por eso la mayoría de los humanos sale “normal”), ni enfermedades.
Lo que muestro en esta explicación
responde a cómo son las cosas, y ahí nosotros los humanos somos sólo un modo de
ser de las cosas, todo lo nuestro se explica dentro de un modo de ser de las
cosas.
En esta explicación yo les digo que los
seres humanos somos sólo una cosa más. Pero ahí empiezan nuestros más graves
problemas, porque ni siquiera en la mejor sociedad que pudiéramos crear
podríamos ser, pero podríamos ser, podríamos intentarlo.
Y no va a ser fácil que me entiendan,
porque si ustedes entendieran (porque si ustedes entendieran ya habrían entendido, y no
tendrían la sociedad actual, una sociedad como de tontos, o de locos, o de
ciegos) no habría necesidad de esta
explicación. Pero por eso voy a tratar primero el problema del entendimiento,
un problema cuyo resultado es la vida como la vivimos, la sociedad que tenemos,
una sociedad con muchas cosas buenas, pero también con muchos problemas,
principalmente la ignorancia y la maldad.
CAPÍTULO 1
EL PROBLEMA (EL NUDO) DE ESTA
EXPLICACIÓN
Esta explicación no va a ser entendida
fácilmente, pero el problema es el mismo de por qué tenemos la sociedad que
tenemos, es el mismo de por qué ustedes no han podido entender las cosas (cómo son las cosas, qué
somos los humanos).
Y la humanidad no siempre ha tenido la
misma cantidad de conocimiento, pero hoy ya tenemos mucho conocimiento, y sin
embargo ustedes siguen sin ver, aun los que de ustedes ven más, entienden más.
Pero si no entienden es porque en
ustedes hay barreras. Pero así son las cosas.
Todo lo nuestro llega hasta la
estructura de las cosas, hasta lo que somos nosotros (nosotros somos pensamiento,
entendimiento, capacidad de conocimiento), hasta
lo que son las cosas, hasta cómo son las cosas. Y las cosas son solas (nadie las creó), y son a
través de nosotros, es decir, nosotros las vemos, nosotros las juzgamos,
nosotros las enredamos, en nosotros se enredan, en nuestro conocimiento, en
nuestra ignorancia.
Pero vamos al asunto del entender,
porque si no, no avanzamos, y se trata de que ustedes entiendan, porque se
trata de hacer algo (lo que se pueda, todo lo que se pueda) por la humanidad, por nosotros, por nuestra vida, por
nuestro destino, por nuestra felicidad.
Y arreglar a la humanidad sería lo más
obvio que tendríamos que hacer, pero ustedes casi no lo ven, o no lo ven, o
están impotentes, porque lo que tenemos es una sociedad terrible.
Hay un problema en nuestra sociedad
terrible, y hay un problema en nuestro entendimiento, pero son partes de lo
mismo, y por eso llegué hasta esta explicación.
¿Qué es lo bueno, qué es lo malo, qué
es lo justo, qué es lo injusto?, y, ¿es
necesario arreglar a nuestro mundo humano?
Hay un problema en las mentiras, en
saber si son o no son mentiras. Hay un problema en los asesinatos, en saber si
son justos o injustos. Hay un problema en saber si lo que hizo Hitler estuvo
bien o no, hasta esos sinsentidos llega el preguntarnos acerca de nuestras
opiniones de la verdad y la mentira, o de la belleza y la fealdad.
Hay un problema en saber quién tiene la
razón, o en dónde hay más razón. Pero sí hay datos para nuestros juicios de,
qué es este mundo, qué es el humano, cuáles son los problemas humanos, hay que
arreglar o no la vida de los humanos.
Para juzgar se tiene que tener desde
dónde se juzga, por qué se dice lo que se dice, porque si no, nuestras
opiniones son parciales, como todas las demás, sólo lo que creemos, sólo lo que
ignoramos.
Y yo pienso que tendríamos que arreglar
a la sociedad humana, pero, por qué estamos en lo de hoy, con la terrible
sociedad de hoy, y por qué estamos impotentes. Y si hay cosas que están mal,
por qué estamos en bien y mal, si es que podemos juzgar que tenemos bien y mal.
Y por qué estamos en ignorancia, en fraude, en estafa, en mentira, si es que
podemos juzgar (darnos cuenta de) eso.
Pero el asunto no es tan sencillo, ahí entra en juego todo lo que pensamos
nosotros, y lo que es todo, lo sepamos o no.
Por eso es mi explicación, por lo que
pensamos, por lo que sabemos. Yo pienso que es necesario arreglar a la
humanidad, pero no todos piensan así, pero por qué piensan así, y por qué
pensamos.
Y algunos ven al diablo, y otros ven
ignorancia, pero yo veo todo un orden de cosas, y quién tiene la razón, ahí
está el problema.
CAPÍTULO 2 ALGUNAS
DE LAS PRUEBAS CON LAS QUE SOSTENGO ESTA EXPLICACIÓN
Y son muchos los ejemplos que puedo dar
para respaldar la explicación que tengo acerca de las cosas, pero pienso que
los menos controversiales son los siguientes:
La mala suerte: las
medicinas
Si siempre hubiéramos tenido medicinas
(pero medicinas efectivas, no medicinas
“alternativas”, medicinas alternativas que hemos tenido siempre, pero que no
pueden curar casi nada, medicinas alternativas que no pudieron evitar los
millones de muertes por peste bubónica o por tuberculosis) no hubieran tenido que morir tantísimos millones de seres
humanos.
Pero los humanos somos sólo lo que
somos, somos sólo unos animales más, sólo que con un cerebro más desarrollado,
pero a ese cerebro más desarrollado le toma algún tiempo poder darse cuenta de
todo lo que puede darse cuenta.
Cómo podíamos saber que para poder con
la bacteria que causa la peste bubónica había que utilizar alguna tetraciclina
o que para poder con lo que causa la tuberculosis había que utilizar
Isoniacida, Rifampicina y Pirazonamida.
Cómo podíamos saber cosas como ésas,
imagínense a los perros o a las moscas (o a ustedes mismos a la edad de 6 meses) sabiendo eso, imagínense que los perros o las moscas fueran
capaces de poder obtener esos conocimientos, pues desde seres como ésos venimos
nosotros, desde por allá venimos, por eso hemos tenido tanta ignorancia, por
problemas de origen, porque las cosas son naturales (porque no hay un Dios creando al hombre tal cual hoy es. Y
la Biblia dice que el hombre fue hecho a “imagen y semejanza” de Dios, pero no
la mujer, pero el cerebro de esa imagen y semejanza ignoraba tanto, no sabía
cosas como: que la lepra no es una maldición de Dios, que la lepra puede ser
curada con Dapsona y Rifampicina, que la bacteria Mycobacterium leprae, que
causa la lepra, tiene mucho de semejante con el animal Homo sapiens, o sea, con
nosotros, los humanos del planeta Tierra), este
cerebro y su cuerpo (pero en el principio es
más importante el cuerpo que el cerebro, porque en cuerpos primates fue donde
pudo desarrollarse más el cerebro, fue por donde la vida terrícola llegó hasta
humano) salieron de la naturaleza, y fueron desarrollándose
casi a la par, se desarrolló la postura erecta, se desarrolló la belleza, se
desarrolló la resistencia a las enfermedades, pero no toda la belleza, y no
toda la resistencia a las enfermedades, porque empezó a intervenir cada vez más
el cerebro de tipo humano que alteró cosas como eso de la resistencia a las
enfermedades, porque ya no seguimos muriendo como moscas, y sobreviviendo sólo
los mejor adaptados, empezamos ya a curar a los candidatos de la naturaleza a
la muerte, empezamos a alterar cursos naturales en donde sobrevive sólo lo que
sobrevive, lo más adaptado.
La mala suerte: Nagasaki
Había 2 ciudades japonesas candidatas
para ser la ciudad en donde iba a ser lanzada la segunda bomba atómica, y la
que se llevó el premio fue Nagasaki, gracias al clima, en Kokura
(que era el objetivo principal) había 70% de nubosidad, así que los aviones se fueron hacia
Nagasaki, hacia los pobres habitantes de Nagasaki, que tuvieron que morir o ser
afectados sólo por cuestiones del clima, y quién da el clima, qué acaso no se
mueve ni la hoja de un árbol si no es por la voluntad de Dios (en el capítulo 45, versículo 7 del libro de Isaías de la
Biblia dice que Dios es el que hace todo: luz, tinieblas, paz, adversidad), pero los japoneses también tenían cuentos, creían que sus
dioses iban a ayudarlos (ya los habían ayudado
en el pasado, como cuando los mongoles quisieron invadirlos, bueno, eso creían
ellos, también creían que eran una nación divina), pero qué decepción se dieron, fueron vencidos en una guerra que creían
que iban a ganar, porque así debía ser, porque sus dioses eran los originales,
los verdaderos, pero no eran, pero los que creen en dioses piensan que sus
dioses son los verdaderos, y son los verdaderos mientras no se los desmiente la
realidad, sólo con la realidad pueden ser desmentidos los dioses humanos.
La ignorancia: los
extraterrestres
Lo
menos que puedo decirles a ésos que creen en los cuentos de los extraterrestres
o a ésos que hacen negocio con los cuentos de los extraterrestres es que los
extraterrestres no han venido a visitar el planeta Tierra, ni están viniendo,
ni van a venir, porque los extraterrestres (es decir, los otros humanos, los otros seres de cerebro de
tipo humano, las otras cosas de cerebro de tipo humano que hay o ha habido o va
a haber en otros planetas de nuestra galaxia) son
como nosotros, y antes de que lleven las tan normales cegueras humanas (ignorancia, injusticia, conquista, comercio, exploración,
proselitismo religioso, turismo) al espacio
interestelar, los alcanza (les abre los ojos,
les detiene su natural carrera de inconsciencia) una explicación como ésta, y por mucho que esa explicación tarde en
poder darse va a haber tiempo, porque los viajes interestelares no son tan
fáciles de realizar, para que nosotros hubiéramos podido ir a alguna de las
estrellas más cercanas todavía nos iba a tomar muchísimos años, ¿saben a qué
distancia está la estrella más cercana a nosotros (aparte de nuestro Sol, claro está)? A más de 4 años luz, ¿saben cuánto es eso en kilómetros?
Más de 40 billones (un 4 con 13 ceros), ¿saben cuánto tardaríamos en recorrer 40 billones de
kilómetros en una nave espacial a la máxima velocidad que hasta hoy hemos
alcanzado con nuestras sondas (sondas que son
mucho más sencillas que una nave espacial)?
Más de 400 millones de horas, es decir, más de 16 millones de días, es decir,
más de 46 000 años.
La ignorancia: los mormones
Los que creen en Dios tienen muchos
ejemplos increíbles de ignorancia, o de tontería (no sé cómo decirlo, no quiero ofender), y voy a dar un ejemplo:
Los mormones (la religión mormona fue fundada en Estados Unidos en 1830 por
Joseph Smith) creen en muchas barbaridades,
pero la principal es que los indios del continente americano son judíos
(en el Libro de Mormón se narra algo de la supuesta
historia de esos judíos, entre ello que Jesucristo estuvo unos días en el
continente americano poco después de su muerte y que ahí comunicó la plenitud
del evangelio eterno, y esa plenitud del evangelio eterno está también en ese
libro), y que llegaron en barcos, en 3
distintas ocasiones, una en tiempos de la Torre de Babel (y según los creyentes en la Biblia lo de la Torre de Babel
fue allá por el año 2269 antes de Cristo. Y por si hiciera falta aclaro que no
hubo tal cosa como la Torre de Babel en donde según el cuento fueron creados
todos los distintos idiomas de los humanos, para esa fecha Imhotep, Urukagina
de Lagash y Sargón de Accad ya habían vivido, e Imhotep había hablado en
egipcio, Urukagina había hablado en sumerio y Sargón había hablado en acadio, y
todavía faltaban más de 2 000 años para que empezara a formarse el idioma que
estoy utilizando. Y ni hubo un Diluvio Universal, y ni existió un humano
llamado Matusalén que vivió 969 años, y ni existió un tal primer hombre de
nombre Adán, que fue creado según muchos allá por el año 4026 antes de Cristo,
y el hecho de que fechemos tomando como referencia a alguien a quien apodaron
Cristo no significa nada, es sólo una de las huellas de cómo fue formándose
nuestro mundo humano de hoy), otra allá por el
año 600 antes de Cristo y la otra en el año 588 antes de Cristo, y que si los
indios tienen esas caras y esa piel oscura es por una maldición de Dios (que de blancos y sumamente bellos los volvió de piel oscura
a casi la mitad de ellos, para que no fueran atractivos a los que siguieron
siendo blancos y sumamente bellos, pero con el tiempo los blancos y sumamente
bellos fueron exterminados por los de la piel oscura y que por eso cuando los
europeos “descubrieron” América ya sólo encontraron gente de piel oscura. Pero
ésos que encontraron los europeos no son los del cuento de los mormones, el
origen de los indios del continente americano está en Asia, más algunos
náufragos polinesios y tal vez uno que otro naufrago europeo o africano), que los volvió así para que fueran repugnantes. Y los
mormones creen que todo lo anterior es verdad, todo eso viene en el Libro de
Mormón, un libro que según ellos le fue dado a Joseph Smith por medio de un
mensajero de Dios (ese mensajero le enseñó
donde estaban unas planchas de oro en las que estaba escrita una historia de
los antiguos habitantes del continente americano, y Joseph Smith tradujo al
idioma inglés esa historia por medio de 2 piedras ensambladas en aros de plata
preparadas por el mismísimo Dios). Y pobre
Joseph Smith, cómo él hubiera podido imaginar que sus absurdidades (cuentos, fantasías) iban a
servirme para poder demostrar la ignorancia o tontería que conlleva en sí toda
creencia en eso que llamamos Dios. Y todas las religiones pueden ser
desnudadas, pero una de las más fáciles de desnudar es la de los mormones, pero
también pueden ser desnudadas todas las religiones que toman la Biblia como
palabra auténtica de Dios (la Biblia es fantasiosa
y abunda en contradicciones, fue armada en distintas épocas, desde diferentes
puntos de vista, y tiene añadidos sobre añadidos).
Y con ejemplos como el de los mormones
tengo que mostrar lo raros (como
sonámbulos, como hipnotizados) que están
ustedes, ustedes todos, tanto los que creen en cosas como las de los mormones,
como los que no creen en ninguna cosa como ésa, pero que no pueden enfrentarse
a un mundo humano dominado por creencias como las de los mormones (y por vicios, y por violencia, y por injusticia). Pero nosotros los humanos somos sólo cosas, no hay culpas
ni méritos.
El sonambulismo: Adán y Eva
Y
voy a dar una prueba más de la incoherencia del mundo normal de ustedes todos.
El cuento de Adán y Eva es un buen
ejemplo del mundo increíble de ustedes, en donde unos de ustedes dicen una cosa
y otros de ustedes dicen otra (y de un lado están muchos de ustedes, y del otro lado están
pocos de ustedes, y de un lado están los más ignorantes de ustedes, y del otro
lado están los menos ignorantes de ustedes, y de un lado están todos los que
creen en Dios o en cosas como ésa, por ejemplo el tarot, o los fantasmas, y del
otro lado están los que ven el mundo desde ciencia o desde filosofía
materialista). Y mientras tanto todos seguimos
en una tontería terrible, en ejemplos como el de Adán y Eva es donde se ve la
inoperancia del conocimiento de ustedes (que no
se le hace mucho caso al conocimiento, y a los que no creen en el cuento de
Adán y Eva parece que no les importa que la mayoría de ustedes siga creyendo en
cuentos, han de pensar que en nada modifica al mundo el hecho de que la mayoría
de los humanos crea en cosas que no son. Y están todas las demás mentiras que
ustedes tienen, con las que conviven, que los moldean, que les forjan la vida,
y está toda la historia de los humanos, pero parece que ustedes todos están
tontos, pero no es que estén tontos, están sólo en una etapa de los seres de
cerebro de tipo humano), porque algo de la
ignorancia en que está la mayoría de ustedes puede ser comprobada (que los seres humanos no somos creación de ningún Dios,
sino que venimos de la naturaleza, que somos naturaleza, sólo que un poco
diferente), pero no pasa nada, el mundo de
ustedes (el mundo normal de ustedes todos) sigue como si nada, un mundo con tantos daños que tienen
causas, entre ellas la ignorancia, pero la ignorancia de ustedes y la
impotencia de ustedes tiene su explicación en las cosas.
CAPÍTULO 3 MI
ESQUEMA DE LAS COSAS
Voy a mostrar cómo son las cosas, y los
humanos somos una cosa más de esas cosas.
Voy a mostrar cómo son las cosas, como
es todo eso que los seres humanos llamamos naturaleza, o mundo, o realidad, o ser,
o universo (o la Creación).
Voy a mostrar las cosas, su eternidad,
sus procesos, sus nichos, su conexión, sus tipos, sus maneras y sus 2
explicaciones posibles.
Y hay mucho de las cosas que no puede
verse (principalmente sus fondos), pero eso que no puede verse puede saberse, porque los
límites y puntos determinantes de las cosas sí se ven, y eso permite
atraparlas, saberlas, saber que no tienen misterios, saber que los seres que
son como nosotros son la cosa más compleja de las cosas, saber que en los
cerebros de los seres que son como nosotros es en donde las cosas son en
enredos.
1 La palabra cosas
Utilizo la palabra cosas para referirme
a todo lo que hay aquí, en este lugar en que somos los seres humanos, y este
lugar es muchísimo más que el planeta Tierra, o que el Sistema Solar
(nuestro planeta Tierra gira alrededor del Sol, el Sol
es una estrella, y el Sol gira alrededor del centro de la Vía Láctea. El
Sistema Solar tiene 8 planetas, y tiene planetas enanos, como Plutón, y tiene
asteroides, y tiene cometas. Y nosotros hemos puesto los nombres, nosotros
ponemos nombres), o que la galaxia Vía Láctea
(la Vía Láctea es la galaxia donde se encuentra
nuestro Sol, y nuestra galaxia tiene más de 100 000 millones de estrellas), o que el universo actual (en
el universo actual hay, más o menos, 100 000 millones de galaxias), este lugar es la eternidad.
Y para referirme a este lugar en que
somos los seres humanos no quise utilizar la palabra universo
(que utiliza la ciencia), porque nuestro universo actual podría ser sólo una parte de la
totalidad de las cosas. Y tampoco quise utilizar la palabra ser (que utiliza la filosofía) porque
esa palabra se presta a confusiones (y las
palabras realidad y mundo también podrían ser confusas, porque hay una realidad
independientemente de nosotros los humanos, pero cuando hay humanos es como si
hubiera otra realidad, la que se hace en los cerebros de tipo humano. Y lo
mismo sucede con la palabra mundo, o con la palabra vida, muchos creen que la
vida lo abarca todo, no que todo esté vivo, sino que la realidad es desde la
vida, por eso Dios es un Dios vivo, porque todo es a partir de la vida, desde
la realidad de la vida, desde la realidad que ve un cerebro vivo cuando no
entiende las cosas).
Por eso utilizo más la palabra cosas
para nombrar a todo (a la
totalidad de las cosas), pero no puedo evitar
utilizar también las palabras ser o universo, o las palabras mundo o realidad.
2 La eternidad de las cosas
Hoy las cosas son, y eso las hace
eternas (y aun si las cosas
fueran mágicas, también serían eternas, el ser sería arbitrario,
contradictorio, en donde todo sería posible. Pero así no es este mundo nuestro
de todos los días, aquí el único arbitrario y contradictorio es el humano, y
así puede ser ese humano porque las cosas no pueden impedírselo, sólo porque
las cosas no pueden ejercer justicia, el humano puede hacer injusticia, pero
aun la injusticia humana termina siendo detenida, porque la inteligencia que es
capaz de hacer injusticia, también puede entender las cosas, y al entender las
cosas va a tener que dejar de hacer injusticia),
porque hoy las cosas son, y no se ve nada ni nadie que las haya echado a andar,
y hoy nosotros somos parte de esto, de esta rueda.
3 Los procesos (modos de ser) de las cosas
Las cosas tienen modos de ser, y las
cosas siguen los modos de ser mejores (para ellas, para cosas naturales que no tienen idea, para
cosas naturales que no son de idea, para cosas naturales que son sólo lo que
son, lo que pueden ser, para cosas naturales ciegas, para cosas naturales sin
prisas y sin metas), y aunque las cosas tengan
desviaciones (accidentes), se siguen yendo por lo mejor que hay (las mejores alternativas, dentro de movimientos naturales,
solos, posibles) en esas desviaciones,
trabajan con lo que tienen a la mano, y al final, lo que es, es porque pudo
ser. Las cosas tienen modos de ser que les funcionan más, la mayor parte de lo
que es, es porque ha aguantado las pruebas de ser, la mayor parte de lo que es,
es sobreviviente, asistimos a un orden de cosas sobreviviente (aunque la mayor parte de las cosas no tengan vida), y por eso casi todo parece perfecto, y por eso hay muchos
que piensan en un “diseñador inteligente”, o sea, un “Dios” (un diseñador inteligente que no se diseñó a sí mismo,
porque según las creencias él ha sido siempre, es eterno), pero las cosas no son perfectas, tienen mucha
terribilidad natural, y los humanos tienen mucha tontería: ignorancia, vicios,
violencia, vileza, injusticia, desigualdad.
4 Los nichos que hay en las cosas
Y las cosas se estacionan en donde se
acomodan mejor, y aun en esos estacionamientos siguen moviéndose, pero muy
lentamente, tan lentamente que a veces no alcanzan el siguiente nicho, o no
pueden alcanzarlo fácilmente (como
es el caso de ustedes todos, ustedes están reproduciendo, representando,
siendo, sólo lo que los seres humanos son en esa etapa).
Y lo que somos los seres humanos es un
nicho que hay en las cosas, y todos esos seres (otras humanidades en otros planetas, en los innumerables
planetas de la eternidad) que sean (si es que son, si es que llegan a ser, la naturaleza no
tiene ningún problema si sus lugares son ocupados o no) como nosotros, más o menos se parecerán a nosotros en el
aspecto físico (y para que en las cosas haya
seres como nosotros, primero tiene que haber vida, el fenómeno de la vida, y en
esa vida tiene que haber animales parecidos a los primates, o sea, todos esos
animales que ustedes, genérica y despectivamente, llaman “changos”, si hubiera
sólo vaquitas, borreguitos, pececitos, entonces tal vez su Dios podría tener
más oportunidad de ser, aunque nosotros también defecáramos, como las vaquitas.
Pero humanos, changos, vaquitas, borreguitos, pececitos y todos los demás
animales y las plantas y los hongos y las bacterias y los virus venimos de una
vida que empezó hace, más o menos, 3 800 millones de años, y la vida empezó
siendo muchísimo menos que lo que hoy son las bacterias, y de ahí descendemos
nosotros, así que no crean que nosotros descendemos sólo del “mono”, nosotros,
y los “monos”, venimos de mucho más lejos, porque también descendemos de unos
peces que un día, hace como 400 millones de años, colonizaron la tierra seca, y
de esos peces se originaron dinosaurios, y gallinas, y cerdos, y ratas, y “monos”,
y monos humanos), pero serán (han sido, atrás de nosotros hubo eternidad, ya hubo la
eternidad, y delante de nosotros sigue la eternidad, y en una eternidad no hay ni
primera ni última vez, nunca hubo algo como una primera humanidad, y nunca
habrá una última humanidad, siempre habrá cosas, y, posibilidad de que haya,
humanidades) iguales en todo lo demás, en sus
pensamientos, en sus pasiones, en sus ideas de Dios, en su filosofía, en su
ciencia, en su política. Y tal vez no siempre haya algo parecido a la vaca o a
la gallina, pero habrá otros animales (o
plantas) que ni imaginamos (pero el mundo como nosotros lo vemos, se ve así sólo desde
cerebros de tipo humano).
5 Culpas y méritos de las cosas
En las cosas nadie (las estrellas, las piedras, las moscas, los humanos) puede decir que se ha creado solo (todas las cosas son de procesos, dentro de procesos, aun
las cosas mismas), nadie puede decir que se ha
creado a sí mismo (nadie puede decir que es
mérito suyo el ser fuerte o grande o bello o inteligente), y por eso nadie es culpable de ser lo que es (de ser hombre o mujer o gallina, de ser débil o pequeño o
feo o poco inteligente. Y dónde está el Dios de la igualdad, dónde está el Dios
de la felicidad, porque, por qué permite el dolor, el problema, por qué es
indiferente al dolor, al problema. Pero las creencias en Dios sólo han ajustado
ese Dios al mundo, sólo han tratado de hacer coincidir a la idea de Dios con el
mundo natural, pero no han podido, a Dios pueden hacerlo coincidir sólo con la
ignorancia, aunque sea la mejor ignorancia: la de buena fe, la de mejor anhelo,
la de buena voluntad, la de amor), simplemente
nos fue dado el ser, con maneras, con formas, con cuerpos, con caras, con
capacidades, con desigualdades.
6 La conexión de las cosas
(donde las cosas son en los cerebros de tipo humano)
Las cosas hacen un círculo cada vez que en
ellas hay seres como nosotros, cosas con pensamiento (seres capaces de penetrar
las cosas, seres capaces de tener ideas de las cosas, seres capaces de
preguntarse acerca de las cosas, seres capaces de tener ilusiones, aquí, en las
cosas, en unas cosas que no son así, en unas cosas que ni siquiera pueden
reírse de las ilusiones vanas de los humanos, de las ilusiones de esas cosas
con figura y capacidad humanas que son los humanos), porque el pensamiento del perro no llega a tanto, no da
para tanto (más que para ladrar, y para casi
amarte si le das comida, pero no para guardarte rencor si no le das de comer, o
si lo tienes amarrado y tiene que soportar el sol o la lluvia).
6.1 Lo primero y lo segundo
Las cosas tienen 2 “grupos”
fundamentales: ellas mismas (o
sea, todo), y seres como nosotros (que somos parte de las cosas). Y a través de seres como nosotros (seres
como los humanos del planeta Tierra) surgen en
las cosas las ideas (de la cosas), las preguntas (por las
cosas), las ilusiones (acerca de las cosas), a
través de seres como nosotros es casi como si surgieran las cosas, unas cosas
que son, haya en ellas seres como los humanos o no.
6.1.1 Lo primero (o sea, todas las cosas)
Las cosas son, y siempre serán
(y han sido), aunque
no sean como son hoy, aunque no haya universo como el de hoy. Y hoy nosotros
estamos siendo parte de un despliegue de las cosas que permite que haya seres
(como nosotros, si hoy nosotros sabemos de nosotros es
porque hoy somos nosotros, es porque hoy hay un nosotros, cosas como nosotros,
un nosotros que no nos pertenece sólo a nosotros, los de hoy del planeta
Tierra, un nosotros que ya hubo incontables veces antes de que hubiera planeta
Tierra y un nosotros que seguirá habiendo incontables veces más después de que
ya no haya planeta Tierra o después de que nosotros ya no seamos) que son capaces de ver (con
ojos superiores a los de los perros, unos ojos que ven más que los ojos de
perro, unos ojos que ven hasta lo que no es, hasta lo que no puede ser, unos
ojos que llegan hasta el engaño) las cosas.
Pero no siempre las cosas son como son hoy, pero puede saberse que hay (que existe, que es posible) este
momento de las cosas, este momento en que las cosas (a través de seres como nosotros) se asoman a sí mismas, y este momento, aunque sea rarísimo,
se ha dado innumerables veces en las cosas, y seguirá dándose innumerables
veces más, porque en la eternidad, todo, aun lo más raro, se hace innumerable, e
innumerable es lo que no tiene medida, fin.
6.1.2 Lo segundo (los cerebros de tipo humano)
Las cosas (todo, seres como nosotros incluidos) son lo primero, y seres como nosotros son lo segundo, seres
como nosotros son el otro elemento de las cosas, aunque ese elemento de las
cosas sea parte de las cosas, pero ese elemento es un poco diferente a todo lo
demás y por eso se convierte en algo único de las cosas, porque a través de él
es como si las cosas (la naturaleza, el ser) adquirieran presencia, a través de él es como si las cosas
llegaran a saber de sí.
Los cerebros de tipo humano son los ojos más profundos que tienen las
cosas.
Nosotros los humanos somos nuestra
capacidad, somos lo que somos porque somos lo que somos, y somos lo que somos
porque así se es en esta cosa de las cosas, en estos zapatos de las cosas.
Y en los cerebros de tipo humano va a
haber siempre política, religión, filosofía, ciencia.
6.1.2.1 Política
Política es manejo, es dirección, es
guía, es gobierno, ya sea a nivel personal o a nivel colectivo.
Los humanos debimos haber tenido
siempre el mejor manejo de nuestros asuntos, ya fuera a nivel personal o a
nivel colectivo, pero no ha sido así, con nuestras vidas personales hemos hecho
casi siempre lo que hemos querido, nos hemos hasta suicidado, rápidamente, o
con alcohol o tabaco o más drogas, y en nuestra vida colectiva hemos sido
esclavos o siervos o súbditos o ciudadanos (de repúblicas de farsa, de democracias de farsa).
La política (a nivel colectivo) debería
ser el buscar ser felices, el buscar estar saciados, todos. Si los humanos no
fuéramos lo que somos (si los humanos no
fuéramos sólo unas cosas más de las cosas, de unas cosas que no permiten
sociedad humana, sino sólo sociedades de hormigas, o sociedades como de locos,
como la de ustedes hoy), tratar de tener la
mejor vida posible (pero para todos) debería ser nuestro único objetivo.
6.1.2.1.1 Derecha e izquierda
Y ustedes tienen ideas de cómo debería
ser la sociedad humana, ideas de tipos de sociedad humana, y esas ideas
políticas son desde lo que se cree que es el mundo, y esas creencias de mundo
son lo que hacen que haya ideas políticas de izquierda e ideas políticas de
derecha. Y algún nombre tenía que dárseles (tendrá que dárseles, en todas las demás experiencias humanas
de la eternidad. Aquí en el planeta Tierra lo más probable es que adquirieron
esos nombres por los lugares que ocupaban los revolucionarios franceses en sus
asambleas, y los más radicales siempre se sentaban del lado izquierdo, no sé
por qué. Pero también puede ser porque como la mayor parte de los humanos
terrícolas somos diestros, es decir, no somos zurdos, físicamente, el ser zurdo
no siempre ha sido bien visto, ya sea en las manos, o en las ideas políticas,
pues a los de las ideas políticas de izquierda se les da mucho el no creer en
el respetable Dios, o el no creer en los administradores terrenales, ya sean,
los administradores del buen Dios, o los administradores de los asuntos de
todos, de las vidas de todos, de lo único que tenemos) a las 2 únicas posibilidades políticas.
6.1.2.1.1.1 Los derechistas
Y ser derechista es tan fácil,
simplemente no hagas nada, ni siquiera pienses, para ser derechista no se
requiere mucho pensamiento, porque se es derechista (o inclinado al derechismo) desde que
se nace, uno nace derechista (y cree en Dios,
y cree en los “Reyes Magos”, y cree en los aparecidos, y cree en la astrología)
y poco a poco va saliéndose de eso, pero la mayoría de los humanos
nunca se sale de eso, nunca puede salirse de eso.
Y ojalá todo fuera tan sencillo como
denunciar a la derecha, ojalá nuestros males humanos estuvieran sólo en cosas
como Dios, o injusticia, o ignorancia, o derecha, pero el problema es que
nuestros males humanos van mucho más allá de eso, pero si ni siquiera eres
izquierdista (si lo que pudiste
captar, en la oscuridad de las cosas, no te alcanzó para hacerte a la izquierda)
quiere decir que estás muy lejos de la realidad, pero
el problema es que la mayor parte de los humanos está muy lejos de la realidad,
y por eso la derecha predomina, por eso ha predominado siempre, y por eso
estamos en el mundo humano en que estamos (pero
son cosas de las cosas, nunca olviden que nosotros los humanos somos sólo
cosas, cualquier cosa que seamos es por las cosas, es de las cosas, así como
somos nosotros los humanos del planeta Tierra así son todos los humanos, los
humanos del planeta Tierra somos sólo una función, somos sólo algo que hay para
ser), por eso estamos en la sociedad humana en
que estamos, y en esa sociedad hay dioses, y conocimiento científico, y
filosofía, e injusticia y maldad.
6.1.2.1.1.2 Los izquierdistas
Entre más se está hacia ideas de querer
hacer una sociedad para el beneficio de todos, más hacia izquierda se está. Y
las no creencias en Dios (o
en dioses, o en diablos, o en espíritus, o en fantasmas, o en astrología, o en
tarot) también tienden más hacia izquierda que
hacia derecha. Y las ideas de bien (real,
auténtico) tienden también más hacia izquierda
que hacia derecha.
Ser de izquierda es sólo un nivel de
ser en las cosas, pero las cosas van mucho más allá de izquierda, pero si estás
en izquierda, en algún grado de izquierda, ya quiere decir algo (y el votar por un partido
político de izquierda, o que se diga de izquierda, casi no dice nada, porque la
izquierda es mucho más que eso), las ideas
políticas de izquierda llegan hasta el sacrificio, por los demás, no por los
intereses personales, no por un Dios al que creas que estás sirviendo, muchos
izquierdistas saben que sus vidas personales son lo único que tienen, y sin
embargo las arriesgan, por los demás, y en la juventud es fácil ser generoso,
es fácil no pensar en toda una vida que uno podría vivir, pero para qué, para
qué vivirla, por qué vivirla, cómo vivirla.
Y yo fui izquierdista, y después llegué
hasta las cosas. Y fui izquierdista en la oscuridad de las cosas, en unas cosas
que no tienen instrucciones, y si tú eres izquierdista, quiere decir que tú
alcanzas a darte cuenta de algo (tu nivel de izquierdismo estará acorde a tu nivel de
entendimiento), quiere decir que tú tienes
algo de conocimiento, el suficiente para al menos estar en izquierda. El ser
izquierdista o no simplemente está pintándote de cuerpo entero, está revelando
lo que eres, está revelando lo que hay en tu entendimiento, y yo fui
izquierdista, pero es que no puede evitarse caer en izquierda, si es que
piensas un poquito.
Y
si los humanos no fuéramos lo que somos, yo seguiría siendo izquierdista (e izquierdista de la más
extrema izquierda, de ésa que ya no puede sino terminar de frente con las
cosas, de ésa que ya no puede sino ir a estrellarse contra las cosas, con la
realidad de humanos, perros y piedras, como terminé yo), como lo fui hasta que me di cuenta de que las cosas
humanas iban más allá de las medidas humanas, más allá de lo que cree, piensa o
imagina el entendimiento humano, un entendimiento humano que es el que altera
las cosas, un entendimiento humano donde se alteran las cosas, se alteran con
ideas (de Dios, de ciencia, de filosofía, de
política), se alteran con engaños (de Dios), se alteran con
ignorancia (con Dios, con ciencia, con
filosofía, con política).
6.1.2.1.2 Democracia
Democracia quiere decir gobierno del pueblo,
y también quiere decir gobierno de la mayoría, y también quiere decir poner las
cosas de la sociedad humana al alcance de todos (o sea, democratizar la sociedad, que haya igualdad de
condiciones para todos).
Pero el problema es que está gobernando
la democracia, el problema es que está gobernando la mayoría, la tontería peor
en que está la mayoría de la población humana, y por eso tenemos democracia,
porque si la mayoría no estuviera tan tonta no estaríamos en eso que llaman
democracia, estaríamos en igualdad, estaríamos en una mejor humanidad
(si es que estuviéramos), sin fronteras, con un solo idioma, sin carencias, sin pobres, sin
vicios, sin ignorancia, sin violencia, sin dinero, sin armas, sin ejércitos,
sin policías, sin guardias de seguridad, sin rejas en las casas, sin cárceles,
sin mentira, sin maldad, sin daño, estaríamos en el mejor de los mundos con el
que siempre soñaron los mejores humanos, que no han creído en farsas como la
democracia (porque veían sus fallas y
falsedades, una democracia que en el mejor de los casos es ignorancia y en el
peor de los casos es farsa), pero tampoco han
creído en reyes, en amos.
Democracia no debería ser sólo votar,
sino que democracia debería ser votar en información, en educación, en
conocimiento, pero si estuviéramos en todo eso no estaríamos en democracia,
sino que estaríamos en cordura, pero si estuviéramos en cordura ya nos
habríamos dado cuenta de las cosas.
Pero el problema no está en la
democracia, el problema está en lo que somos los humanos, y ahí nada es cosa
nuestra, sino que somos sólo lo que las cosas nos permiten, y dentro de lo que
las cosas nos permiten (nos han
permitido hoy aquí, entonces nos permiten. Pero no es que nos permitan, las
cosas no son alguien, simplemente que, lo que es, es de las posibilidades de
las cosas, entra dentro de lo posible, de lo que hay) está eso que hemos llamado democracia, esos juegos
democráticos, una de las tantas cosas que los humanos creen, porque pueden
creer.
6.1.2.1.3 Libertad
Y la libertad es tan dependiente de lo
que es el mundo, y la libertad es tan dependiente del entendimiento humano, de
si el entendimiento humano sabe o no sabe lo que es el mundo, y a ustedes su
entendimiento los hace aspirar a cosas que no pueden sostenerse en la realidad
de las cosas. Un humano que es sólo lo que es, pero que en ustedes está a medio
camino, por eso puede pensar y creer en términos como democracia o libertad,
términos que al final se le convierten en farsas.
Pero la humanidad viene de épocas más
negras, de épocas en que la democracia (o la
república) ya significaba un pequeño alivio,
y los humanos siempre hubiéramos podido aspirar a algo mejor, pero el problema
es que los humanos somos sólo cosas, y estamos sujetos a los procesos de las
cosas que son como nosotros, estamos sujetos a cómo son las cosas que son como
nosotros, y entonces las humanidades siempre van a estar condenadas a ser lo
que hemos sido nosotros, como hemos sido nosotros, a creer en dioses, a llegar
a conocimientos (filosóficos y científicos)
estrechos, a tener tiranías, a tener democracia, a
tener unas mayorías muy ignorantes, y a tener un ustedes (como hoy ustedes, ustedes todos) en ignorancia y maldad.
El problema es que en nosotros mandan los
procesos de las cosas (ellos nos
traen, ellos nos dan, ellos nos quitan) y en
esos procesos se da todo lo de nosotros (todo
lo que hay para nosotros), los bienes y los
males (lo que consideramos bueno o malo), los temores: los dioses; la necesidad de explicaciones:
los dioses, la filosofía, la ciencia; la injusticia: las ideas de justicia; la
infelicidad: las ideas de felicidad; las tiranías: las ideas de libertad, las
ideas de democracia; los reyes: las ideas de república; la desigualdad: las
ideas de igualdad.
Y ha habido épocas menos libres que hoy
(pero también hubo una época en que no había vacunas, ni
automóviles, ni teléfonos, hay una cosa llamada progreso, pero también hay una
cosa llamada realidad, y a la realidad pertenece el humano y su progreso, y sus
creencias y sus ignorancias), pero eso no
significa nada, porque en el ser no hay libertad, nosotros no somos libres, en
el ser hay cosas, que si son piedras, se están quietas, que si son perros, pues
se mueven y ladran, y mueren.
El problema de las cosas es que son
sólo cosas, cosas que son bajo los ritmos de las cosas, cosas en las que cuando
se da o hay algo es porque es posible, es porque entra dentro de las
posibilidades, pero otro problema de las cosas es que en las cosas se idean
conceptos (los idean ésos que
pueden idear conceptos así: los seres como nosotros, los perros no llegan a
tanto) que no pueden ser, como ése de la
libertad (o como ése de Dios), el problema de las cosas es que son sólo cosas, y el
problema de ustedes es que ignoran lo que son las cosas.
Aquí en las cosas no hay libertad,
porque las cosas no son así (las
cosas no son el lugar ideal para los conceptos humanos, para los sueños
humanos, para las aspiraciones humanas, para las aspiraciones de un
entendimiento en irrealidad), hay el concepto
de la libertad en un entendimiento humano que está a la mitad, hay el concepto
de la libertad en un entendimiento que no entiende totalmente al mundo, un
entendimiento que no sabe en qué lugar está (en
qué mundo está, en qué realidad está, en qué ser está), un entendimiento que no se sabe a sí mismo.
Aquí, en este lugar
(en el único lugar que hay para ser, en el único lugar
en que se es, en el único lugar que es), no se
puede ser en libertad, porque aquí no es lugar para eso, aquí los humanos somos
sólo de procesos de las cosas (como lo son las
moscas, como lo es la vida, como lo son las piedras, como lo son las estrellas), y si hoy estamos donde estamos (si hemos podido lo que hemos podido, si tenemos el mundo
que tenemos, si vivimos la vida como la vivimos, si vivimos la vida que
vivimos, si tenemos que aguantar la vida como es, como es bajo la tontería
natural e inevitable, mientras no pueda ser evitada) es porque en las cosas hay nichos, en donde las cosas se
estacionan, y en ese estacionamiento ustedes han creído que existe eso de la
libertad, y eso de la democracia, y eso de Dios, pero aquí (en el único lugar que hay para ser), nosotros somos sólo cosas y esas cosas humanas son lo que
son porque son de entendimiento de capacidad humana, y ustedes son lo que son
porque son ese entendimiento como a la mitad.
Y es tan difícil ser en cordura,
aplicar cordura, querer meter en cordura a seres muy inconscientes, acaso creen
que las “sex shops”, o los “tables dance”, o la pornografía, infantil o no, están
bien. No puede permitirse que el ser humano haga todo lo que quiera hacer, y en
el caso de la pornografía infantil es donde se ve más todo lo desequilibrados
que están algunos de ustedes, pero qué es eso de la prostitución de las
mujeres, en tables dance o no, cómo justificarlo, sino sólo en una humanidad de
tontería en donde hay que trabajar, aunque sea en trabajos tontos, es por eso
que qué bueno que ya puedo con todo lo de ustedes, porque si no, tendría que
estar sujeto a ustedes, a toda la tontería de ustedes, a todas las opiniones de
ustedes, a toda la ignorancia de ustedes, a toda la tontería de la que ustedes
son capaces, qué bueno que, al no haber Dios, al menos sí tenemos rienda, y esa
rienda son las cosas, porque si las cosas no nos pusieran en nuestro lugar, qué
difícil sería tratar de contener al humano, ponerle límites a su “libertad”, a
lo que él cree que es la libertad, qué difícil sería poder contener todo lo que
el humano puede ser, quiere ser, cree que puede ser.
6.1.2.1.4 Revolución
Y las revoluciones son tan complicadas
que siempre terminan tragándose todo, aun los mejores propósitos.
Y si respeto mucho la palabra revolucionario
es porque revolucionarios han sido la mayoría de los mejores hombres (y mujeres, algunas mujeres,
no han sido muchas) que ha tenido la
humanidad, que tendrá cualquier humanidad, porque revolucionarios fueron muchos
humanos que se aventaron a las hogueras que les tenían preparadas el egoísmo
humano y el embrutecimiento humano, es decir, la ignorancia humana, es decir,
las cosas.
Antes yo me admiraba de que, a pesar de
los tantos revolucionarios muertos, la perra (la dura realidad humana,
tan necesitada de redención) volvía a tener
perritos (niñitos que al crecer se hacían
revolucionarios). Y luego supe por qué era
esto, porque la cordura no puede ser evitada, y la cordura producía
revolucionarios, y de esa cordura salí yo, y los procesos me hicieron avanzar
más allá de la revolución, revolución que en el caso de que las cosas no fueran
lo que son, sería lo que tendría que ser la humanidad, pero las cosas son sólo
lo que son y en ella no hay ningún lugar para una humanidad, así fuera la mejor
humanidad que pudiéramos crear, y por supuesto que esa humanidad no se
parecería a la que hoy tenemos, porque en esa humanidad no habría dinero, ni
trabajo inútil, ni habría necesidades, más que las inevitables.
Y hoy sé que las cosas son tajantes,
hoy sé que se puede sólo lo que las cosas permiten, hoy sé que ustedes jamás
pueden llegar por sí solos a entender las cosas, pero lo que me produjo a mí sé
que no está muy alejado de ustedes, porque yo también empecé desde cero (cuando nací), y luego, cuando crecí, me di cuenta de que había que
hacer algo por la humanidad, pero luego vi que había más datos en el humano y
en las demás cosas, y terminé hasta donde estoy hoy, y me admira que ningún
revolucionario hubiera podido hacer una revolución que hubiera ido muy lejos, y
a pesar de que hoy ya sé el porqué (porque el
asunto no está sólo en darse cuenta de la injusticia, sino en darse cuenta de
toda la tontería humana, así fue cómo yo me desfase de ustedes, de ustedes
todos), todavía me sigue admirando que ustedes
jamás pudieran meterse (a través de la sed de
arreglar a la humanidad que han tenido algunos de ustedes) en la espiral que lleva (que
termina llevando) hasta el entendimiento de
las cosas.
Pero eran raros los revolucionarios más
o menos completos (la mayoría de los revolucionarios no tenía muy claras las
cosas), y esos poquísimos revolucionarios más
o menos completos no maduraron lo suficiente como para dejar las bases mínimas
de una revolución indestructible (una
revolución que poco a poco hubiera traspasado y traspasado niveles de
profundización de los asuntos humanos para desde ahí llegar hasta los asuntos
de todas las cosas) y mucho menos como para
meterse en caminos que llegan hasta donde alguien (de ustedes, de entre ustedes) se convierte en uno como yo.
Porque yo que he recorrido toda la ruta
sé todo lo que fui mirando en mi caminar, sé del enredo, sé de la confusión, sé
de la soledad, sé de la desesperación, sé de la frustración, y sé que pude
haberme interrumpido en muchos momentos (por las circunstancias y
por los apremiantes problemas humanos), y sé
que trataba de cuidarme (de cuidar lo que
pensaba que yo representaba), pero cómo podía
saber que todo lo que yo veía iba a llegar hasta lo que estoy diciéndoles, cómo
podía imaginar que iba a terminar diciéndoles algo como esto, cómo podía imaginar
que algo así pudiera ser, cómo podía imaginar que las cosas fueran lo que estoy
diciéndoles, mostrándoles, si yo vengo de lo mismo que ustedes, un cachorrito
de humano más, que un día nació, y aprendió la vida de los humanos, y de los
humanos actualmente, porque si a mí no me hubieran enseñado la vida que ustedes
todos viven actualmente, yo jamás hubiera visto la tontería de ustedes, y jamás
hubiera llegado a entender las cosas (si a mí
me hubieran abandonado al nacer, y hubiera sobrevivido, y hubiera tenido que
vivir solo, completamente solo, y hubiera podido sobrevivir, yo no hablaría
ningún lenguaje, yo iría al baño como cualquier perro, y no me limpiaría el
ano, y andaría desnudo, y casi no sabría nada, sabría que hay que comer y beber
agua, porque me daría hambre y sed. Si los humanos no aprendiéramos la vida en
comunidad no sabríamos la vida, seríamos humanos, tendríamos nuestras
capacidades, pero si no nos enseñaran a desarrollarlas no seríamos conscientes
de ellas. Y si yo hubiera nacido hace 10 000 ó hace un millón de años, jamás
hubiera entendido qué era todo esto, aunque hubiera vivido en comunidad).
6.1.2.2 Religión
Algunos de los que creen en Dios dicen
que lo suyo no es religión, que lo suyo es una relación personal con Dios, y
dan por hecho que con esas palabras lo dicen todo, que ya no queda nada más por
decir. Dan por hecho que Dios es Dios, el único, el verdadero, el creador de
todo, el Creador.
Pero ese Dios y todo el fenómeno
religioso caen dentro de lo mismo, dentro de las cosas que no tienen más fundamento
que una profunda ignorancia, y dentro de esas cosas caen también las creencias
en fantasmas, y las creencias en brujerías, y las creencias en la astrología, y
las creencias en el tarot, y las creencias en platillos voladores.
Religión es pensar que estamos en un
lugar (la Creación) regido por lo divino, religión es pensar que somos parte de lo
divino (o de un mundo espiritual, como
es el caso de los budistas), y lo divino se
refiere a Dios, y Dios se refiere a un Creador, y Dios se refiere a un espíritu
con voluntad, pero voluntad la tienen sólo la mayor parte de los animales,
incluido el humano (el creador de Dios), Dios es sólo un humano o un perro llevado a gigantismo,
pero Gigante que es capaz de ser sin comer, Gigante que es capaz de moverse sin
miembros, Gigante que es capaz de ir a dondequiera, Gigante que lo sabe todo,
Gigante que lo puede todo, Gigante eterno, Gigante sin padres, Gigante que es
más que las cosas, Gigante que es más allá de las cosas. Pero más allá de las
cosas hay sólo lo que no puede haber, lo que no puede ser, lo que no es, lo que
no puede haber, de acuerdo a lo que hay hoy.
Y hoy nosotros estamos asistiendo al
punto más alto de lo que es, de lo que puede ser, de lo que puede haber: hoy
nosotros estamos asistiendo a lo que se ve desde el cerebro de tipo humano, y a
las complicaciones de ese cerebro.
Y yo estoy atreviéndome a decir las
cosas, a marcar las cosas, porque hoy las cosas pueden verse, pueden marcarse,
pueden saberse, a través del único punto confuso que tienen las cosas, a través
del tener idea de las cosas, a través de ser en las cosas en idea, en
pensamiento, en entendimiento, en razonamiento.
6.1.2.2.1 Ateísmo
Generalmente se dice que ateo es todo
aquél que no cree en Dios. Pero más bien la definición debía ser, ateo es todo
aquél que no cree en eso que los que creen en eso llaman Dios.
Y de entrada las palabras están mal
empleadas, porque las cosas no son de creer o no creer, las cosas que son, son,
independientemente de si las creamos o no.
Y si me ocupo de esta palabra es por la
carga que representa, pero no todo el que se dice ateo (o al que le dicen ateo) sabe
exactamente qué significa eso. Para negar a Dios hay que saber por qué no hay
Dios, por qué no puede haberlo, hay que tener una idea de las cosas, de lo que
son las cosas, de lo que muestran las cosas. Porque podría haber Dios, pero se
vería en las cosas, no podríamos negarlo. Pero para afirmar que no hay Dios, en
esta oscuridad de las cosas, hay que saber, y ninguno de ustedes sabe mucho,
las cosas.
A los primeros cristianos también se
les llamó ateos (y no me queda muy
claro por qué, tal vez porque no adoraban a los verdaderos dioses, a los dioses
romanos, a los verdaderos dioses, de los romanos).
La palabra ateo es una palabra
inventada, por ésos que creen en algo que no existe más que en su ignorancia.
¿Y cómo se les dice a aquéllos que no
creen en el Yeti (“el abominable
hombre de las nieves”)?, ¿o cómo se les dice a
aquéllos que (ya) no creen en los Reyes Magos (los
Reyes Magos son 3 seres espirituales que, según el cuento, les traen regalos a
los niños cada 6 de enero)?, hasta ese punto
de absurdidad llega la palabra ateo.
6.1.2.2.2 El bien y el mal
El
concepto Dios tiene algunos problemas. Y el problema principal de Dios es que
no lo hay, fuera como fuera, pero al menos las cosas tendrían sentido, aunque
fuera un sentido caótico, aunque ese Dios fuera aun más infantil que el que
está pintado en la mayor parte de las religiones. Pero si hubiera Dios, debería
ser un padre amoroso, con nada de estupidez humana, con nada de actitudes
humanas infantiles, debería ser un padre de bien, de justicia, de felicidad,
sin infierno, sin cielos infantiles, sino con un Cielo (aquí en la Tierra, hoy,
siempre, un Cielo para la vida, no para la muerte, no para la nada) en donde no hubiera sufrimiento, en donde todos tuviéramos
alimento (o no necesidad de alimento), y amor (o no necesidad de
amor), y sexualidad plena (o no necesidad de sexualidad), y no cansancio, y ningún dolor, e igualdad, y no tantas diferencias
causantes de dolor (causantes de problema, causantes
de daño) como las que tenemos los seres
humanos producto de una naturaleza con un sentido de justicia como ése del
cuento de que el Sol sale para todos (para
tanta desigualdad, un Sol que brilla sobre tanta desigualdad), tanto para justos como para injustos, tanto para fuertes
como para débiles, tanto para victimarios como para víctimas (tanto para halcones como para palomas, tanto para hombres
como para pollos, tanto para dinosaurios carnívoros como para dinosaurios
herbívoros, tanto para dinosaurios grandes como para dinosaurios chicos, tanto
para meteoritos como para dinosaurios. Y lo más probable es que la desaparición
de los dinosaurios se debió a la caída de un meteorito, grande, como de 10
kilómetros de diámetro, hace, más o menos, 65 millones de años. Y aún ahora
podrían un meteorito grande y nuestro planeta coincidir en sus órbitas, pero antes
era más frecuente, y hace 4 500 millones de años era frecuentísimo. El planeta
Tierra se formó hace, más o menos, 4 600 millones de años, y el Sol se formó
hace, más o menos, 4 650 millones de años. Los escombros que hay allá “arriba”
ya se han estabilizado un poco), tanto para
bien armados como para menos armados, o para inermes, tanto para bellos como
para feos, tanto para blancos como para negros, tanto para altos como para
chaparros, tanto para sanos, completos, plenos, como para enfermos, ciegos,
sordos, inválidos, con miembros atrofiados, con cerebros atrofiados.
Y voy a hablar del bien y del mal (pero en la naturaleza no
hay bien ni mal, la naturaleza no sabe de eso, la naturaleza no sabe de nada)
porque generalmente a Dios se le asocia con el bien,
pero Dios y bien no equivalen, la mayor parte de los que creen en Dios creen en
un Dios arbitrario, infantil, casi malo, absurdo (tal vez haya o haya habido alguna idea de Dios no tan absurda como las
que predominan actualmente, pero la idea de Dios ya es, de por sí, absurda, por
eso los shakers surgieron, y casi enseguida se condenaron a sí mismos, se
condenaron a la extinción, porque Ann Lee, la dirigente de los shakers,
entendió, por una “revelación”, que el pecado original fue el del sexo, y
entonces las relaciones sexuales se les volvieron pecado, y si no se
reproducían, pues se condenaban a sí mismos, a no ser más, y a que no se les
unieran muchos, porque, quién va a renunciar voluntariamente al sexo, sólo los
curas o los monjes que sí han demostrado con sus hechos el amor a su Dios,
porque los curas y monjes que no respetan el voto del celibato, sea con mujer,
hombre o niño, no pueden echarle la culpa a un diablo inexistente, sino que
demuestran con sus hechos lo poco que creen en lo que dicen que creen).
6.1.2.2.2.1 El bien
En
las cosas no hay bien ni mal, no hay intención de causar bien o mal, pero hay
daño. Y si las cosas lo permitieran, si las cosas fueran diferentes (pero las cosas son lo que
son, las cosas son sólo lo que son, y en ellas no hay lugar para los seres que
son como nosotros), los seres que son como
nosotros tratarían de crearse un pedacito de Cielo en esta Tierra, tratarían de
hacer la justicia, la igualdad, la felicidad, tratarían de hacer de esta vida
la mejor vida posible, tratarían de evitar lo más que se pudiera al daño, la
injusticia, la desigualdad, la infelicidad, tratarían de corregir a la
naturaleza, se meterían con el cuerpo humano, para hacerlo mejor, lo mejor,
igual en todos (tendríamos que ser puras
copias, clones, en 2 tipos de clones, hombre y mujer), hasta allá (hasta la más
completa igualdad, hasta la más completa justicia, justicia es no hacer
injusticia, no provocar injusticia, no darle ningún pie a la injusticia, donde
la injusticia pueda agarrarse) tendríamos que
ir si se pudiera permanecer en este lugar, mientras el universo lo permitiera,
mientras no pasaran los 2 000 millones de años posibles de albergar vida que le
quedan a nuestro planeta (pero desde mucho
antes nuestro planeta Tierra será afectado por un Sol que no es una creatura de
un Dios, sino que sigue su evolución estelar, dentro de 1 000 millones de años
el Sol irradiará más calor, y eso hará que los océanos terrestres se calienten
más y más, cada vez más, hasta que hiervan y se evaporen. Pero mucho antes de
que el Sol empiece a afectarnos de esa manera, los ciclos de la Tierra ya nos
habrán afectado, con eras de hielo y con calentamientos globales mucho peores
que el calentamiento causado por las muy dañinas, pero muy pequeñas, hormigas
humanas, eras de hielo y calentamientos globales que hacen que la superficie
habitable del planeta se vea muy reducida, a las zonas ecuatoriales, o a las
zonas más altas, según sea el caso, en las eras de hielo el planeta abunda en
hielo, y en los calentamientos globales casi no hay hielo y los niveles de los
océanos suben, y esos periodos duran miles de años, así ha pasado en el pasado) o los 10 000 ó 30 000 millones de años posibles de albergar
vida que le quedan a nuestro universo actual.
6.1.2.2.2.2 El mal
En las cosas los únicos que producen
daño deliberado (pero somos sólo cosas) son
los seres que son como los humanos, y aun muchos de ésos que dicen creer en
Dios han producido mucho daño, muchos han asesinado en nombre de Dios, y otros
(como los Testigos de Jehová) no asesinan, no son (tan) violentos, pero los Testigos de Jehová al vivir en su mundo
de Dios, tienen que hacer lo que ellos creen que es mandato de Dios, y hasta se
alejan de sus familiares (pero no es un simple
alejamiento, es un apartarse, es un no importarles la suerte de esos
familiares, así sean unos padres ancianos, conozco a una anciana de más de 80
años que ha sido abandonada por sus 2 únicos hijos, los 2 son Testigos de
Jehová, y no les importa que su madre ya no pueda valerse por sí sola) si no son como ellos, y eso también produce daño,
sacrifican a sus familiares “inicuos” (la
anciana es cuestión es una “inicua” católica),
y los sacrifican esclavizados por una creencia que seguirá defraudando, porque
han sido muchos los que han muerto esperando ese fin del mundo del que se habla
(confusamente, en los evangelios de la Biblia. Pero en
algunas de las Cartas de Pablo se puede ver que él pensaba que el fin del mundo
iba a ocurrir en su tiempo, allá por el año 60) en
el Nuevo Testamento de la Biblia, desde hace casi 2 000 años muchos cristianos
han muerto esperando algo que está sólo en sus cuentos. Y los Testigos de
Jehová creen que de un momento a otro empezará la “gran tribulación”, que
culminará con el Armagedón: la guerra de Dios, la guerra final, y en ella serán
destruidos el diablo y los “inicuos”, y entonces la Tierra será un paraíso por
siempre jamás (y en donde la felicidad será
estar adorando eternamente a un Dios que requiere, que necesita, ser adorado,
un Dios Padre que más bien parece un Dios Niño, alrededor del trono en que está
sentado el Dios en el que creen los Testigos de Jehová hay 4 entes que eternamente
se la pasan diciendo una recitación elogiosa a Dios, y hay 24 sujetos, con
coronas de oro, cuya única misión es estar “adorando” a Dios, es lo único que
hacen, una y otra vez se postran ante Dios y lo saludan con sus coronas cada
vez que los 4 entes dicen su recitación, y estos 24 sujetos tienen también su
respectiva recitación elogiosa a Dios, y la dicen cada vez que se postran, todo
eso está en el capítulo 4 del libro de Apocalipsis, de la Biblia, este libro
también es conocido como Revelación. También en ese capítulo 4 dice que sobre
el trono de Dios hay un arcoíris, y que en el Cielo hay día y noche, ¿pues en
dónde está ese “cielo” que se parece tanto a la Tierra?, pero es que para el
escritor del Apocalipsis, el mundo era sólo la Tierra, el Cielo era de la
Tierra, y no conocía cómo era eso del arcoíris, él sólo quería que el trono de
Dios se viera majestuoso, y le puso un arcoíris),
y los Testigos de Jehová esperan todo eso, pero como no llega, lo justifican
diciendo que Dios sigue dándonos tiempo, para unirnos a ellos, para que no
seamos destruidos, pero los Testigos de Jehová tienen un sentido del tiempo muy
torcido, como cuando dicen que Dios no se olvida de los pobres, sólo porque en
un salmo (del libro de los Salmos, de la
Biblia), escrito hace, por lo menos, 2 500
años, se habla de que Dios no se olvida de los pobres, o sea, que algún día,
Dios le hará justicia a los pobres, y para ese Dios 2 500 años tal vez no sean
nada, pero para miles de millones de humanos la pobreza ha sido muy real, los
ha matado, o les ha disminuido la vida (su
única y pequeña oportunidad para ser no ha sido bonita). Y si hablamos de creencias en fines de mundo ahí está ésa
de que el mundo iba a acabarse el 21 de diciembre de 2012 (eso decían ciertos cuenteros que se apoyaban en cálculos y
mitología de los antiguos mayas. Pero otros de esos cuenteros ya se habían
amarrado el dedo antes de que esa fecha pasara como cualquiera otra y decían
que el mundo no se acabaría, sino que lo que habría sería un cambio de
conciencia y que todos íbamos a volvernos más espirituales), pero no se acabó, y sin embargo surgirá otra creencia
como ésa, y otra, y otras más. Y a nuestro planeta Tierra lo acabará el Sol
algún día (lo hará inhabitable, lo calentará,
lo achicharrará, lo fundirá), y a nuestro Sol
lo acabarán los años (nuestro Sol terminará su
ciclo como una enana negra, pero antes habrá sido una gigante roja, y habrá
sido más de 80 veces más grande que hoy, y después de su etapa de gigante roja
será una enana blanca, y será más o menos del tamaño que hoy tiene el planeta
Tierra, pero todavía brillará mucho, y cuando sea una enana negra ya no
brillará. Y el Sol hoy es más de 100 veces más grande que la Tierra), y nuestra galaxia también será acabada por los años (pero mucho antes de eso, dentro de unos 3 000 millones de
años, nuestra galaxia chocará con otra galaxia, con Andrómeda, y se mezclará
con ella. Y cómo es que se sabe eso del choque de nuestra galaxia con
Andrómeda, pues por observaciones y predicciones de una ciencia que puede hacer
cosas como ésa, pero que no es capaz de entender cosas más importantes, como la
injusticia humana, o que, al no haber Dios, las cosas no tienen ningún sentido,
y que por eso los seres humanos no tenemos sentido. Y los que son como yo nacen
en un mundo ya con mucha información, pero desorganizada, caótica, y tienen que
darle un orden a tanto, se ven obligados a tener que hacerlo), y nuestro universo actual también será acabado por los
años (nuestro universo seguirá su evolución, su
ser. Cuando los creacionistas, es decir, los que creen que este lugar en donde
vivimos fue creación de un Dios, se refieren a la evolución, creen que la única
evolución con la que tienen que lidiar es con la “teoría” de la evolución de la
vida, pero, aquí, en la realidad, todo evoluciona, todo se mueve. Y los Testigos
de Jehová dicen que la Tierra será por siempre, porque así dice en la Biblia,
pero ellos qué van a poder imaginar todo lo compleja que es la realidad, si ni
siquiera los que manejan la realidad desde conocimiento científico tienen una
idea de la realidad, los que más se han acercado a la realidad son los
filósofos materialistas que han optado por la revolución), posiblemente todo lo del universo actual sea despedazado
a partículas elementales, partículas elementales que son más allá que las
moléculas, más allá que los átomos, más allá que las partículas subatómicas.
Llenaría
hojas y hojas hablando del daño provocado por el humano (y tal vez algunos de
ustedes digan que también hay bondad humana y que también se llenarían hojas y
hojas hablando de la bondad humana. Pero las cosas no tienen sentido, y eso
deja a la bondad y a la felicidad como nada, y al daño provocado por el humano
lo deja sólo como terribilidad sobre terribilidad. Y las cosas no tienen
sentido porque no hay Dios, sólo algo como Dios le hubiera dado sentido a las
cosas, pero Dios es sólo imaginación de los humanos, Dios es características
humanas de inteligencia aumentadas hasta el infinito y puestas al mando de las
cosas), o de las cosas que siempre causarán
daño en seres que son como nosotros, y daño de más mientras no podamos evitarlo
(como por ejemplo, tanto muerto que la humanidad no
pudo evitar, porque aún no había vacunas, porque el ser humano no había
avanzado tanto como para saber de las vacunas, y en dónde queda un Dios cuando
lo sometemos a juicio, a análisis, cuando el humano depende del humano, y no de
Dios o diablo, cuando para defendernos de los microbios sólo contamos con
nosotros mismos, con el conocimiento que podemos adquirir después de tanta
oscuridad, después de tanta muerte, después de tanto Dios, después de tanta
creencia en dioses que no pueden protegernos de los microbios ni de nada, y la
mayoría de las creencias en Dios no toman en cuenta a los demás animales, pero
los humanos también se han ocupado un poco de los animales, también para ellos
ha habido vacunas, para que no les dé rabia, o parvovirus, en el caso de los
perros, o para las vacas, o para las aves de corral, aunque en ese caso es para
beneficio nuestro, no para el de ellos, porque los protegemos de las
enfermedades, pero porque son para comérnoslos).
Y
tengo que hacer señalamientos, para ponerlos a pensar a ustedes, para empezar a
sacarlos a ustedes todos de sus creencias (dogmas, credos) o de sus consideraciones (observaciones,
reflexiones, argumentos, razones), como esas
creencias de que viven en un mundo de Dios (aunque
cada quien de los que creen en determinado Dios crea que su Dios es el bueno y
llame infieles a los que no son musulmanes, o inicuos a los que no son Testigos
de Jehová, o herejes a los que no son católicos, o adoradores de ídolos, como
los protestantes llaman a los católicos), o
como esa creencia de que viven en un universo que la ciencia algún día
entenderá, o como esas creencias de que la verdad está en el marxismo (el marxismo es el conjunto de las ideas de Carlos Marx y de
sus discípulos. Carlos Marx fue un filósofo alemán. Y dentro de la historia
humana del planeta Tierra el marxismo no es cualquier cosa, ha sido algo muy fundamental). Tengo que señalar algunos ejemplos de la tontería humana
que muchos de ustedes no conocen y que, los que conocen un poco, no asimilan,
porque, si a mí la vida me puso en pie de guerra fue porque no pude soportar
tanta tontería humana (tontería humana aunada a
una terribilidad natural de las cosas, terribilidad natural contra la que no se
puede mucho), y traté de encontrar el mejor
arreglo posible (cómo hacer una mejor
humanidad, con justicia, con igualdad, con felicidad; cómo poder domar al humano,
hacerlo bueno, justo), y luego me di cuenta
que los seres que son como los seres humanos no alcanzamos redención (aquí, en las cosas, nadie ni nada puede ser rescatado,
liberado, las cosas tienen un orden establecido, fijo). Me di cuenta de mi país, pero también empecé a darme
cuenta de la humanidad, pero también empecé a darme cuenta de un todo. Me
bastaron 17 años de vida para que la condición humana me sublevara, vi la
pobreza de mi país, vi cómo era la gente de mi país, de mi familia, vi las
atrocidades (pero las atrocidades no son lo que
nos condena, lo que condena es la falta de sentido de las cosas, la falta de
algo como Dios, las atrocidades son sólo una gota más en un vaso que ya está
derramado. Y los “optimistas” no se enfocan en lo negativo, sino en lo
“positivo” de las cosas, se van por las florecitas y el amor y la buena
voluntad, y no le dan importancia a los muertos, al mal de más, a esas vacunas
que dependen de nosotros, de que el ser humano “descubra” más al mundo) que se habían cometido y se cometían en mi país y en los
demás países (como los millones de muertos que
causó Hitler o tantos otros carniceros menores),
y después empecé a saber más y más (y más
urgente se hacía en mí la necesidad de hacer algo, de arreglarlos, y de
terminar de entender cómo era todo esto, tanto daño natural y tanto daño
humano. Y la como tontería que veía en ustedes todos fue lo que hizo la gran
diferencia, a ustedes todos los veía perdidos, estacionados en necedades, cada
uno de ustedes en alguna particular necedad).
6.1.2.3 Filosofía
Y
los humanos llegamos a filosofía (a entender las cosas desde lo general, desde el ser, desde
la realidad, desde la verdad), pero no es
ningún mérito nuestro, nos es connatural.
Pero cuando los humanos llegamos a
filosofía el mundo humano es ya más o menos como hoy: relativo, contradictorio,
trágico, y en (la filosofía de) Heráclito
de Éfeso (Heráclito vivió hace más de 2 500
años) quedó reflejado algo de eso.
Y la filosofía es también manejada fuera
de lo que académicamente es filosofía, fuera del amor por la sabiduría, fuera
de la admiración, fuera de una ciencia general, fuera de principios y finales
de las cosas, y empieza a tomarse como filosofía hasta los particulares
pensamientos, imaginaciones, de cada quien, aun de los niños.
Pero
filosofía es sólo lo que son ustedes (lo que somos los humanos en la etapa ustedes,
o sea, en la etapa en la que están ustedes, ustedes todos. Y lo que nos hace
ser lo que somos es nuestro entendimiento, nuestros ojos, nuestra conciencia,
pero tengo que aclarar que antes de los 4 ó 5 años de edad los seres humanos
somos casi como perros, en el sentido de sólo ser, porque se es, pero no
tenemos las más mínimas explicaciones del ser) llevado
hasta su máxima capacidad, a lo que ustedes han utilizado para tratar de
entender las cosas le han llamado filosofía (y
el nombre lo tomaron según de cuando una vez alguien le preguntó al filósofo
Pitágoras cómo se llamaba eso a lo que él se dedicaba, y él contestó filosofía,
una palabra que en griego significa, más o menos, amor a la sabiduría, y ese
nombre se le quedó a esa actividad con que algunos griegos antiguos trataban de
entender las cosas, y no pudieron, y tampoco han podido los que han continuado
esa actividad hasta nuestros días, o sea que por falta de ganas no ha sido, y
es increíble que ustedes no hayan podido ver los elementos de las cosas cuando
más o menos se está buscando entender las cosas, es increíble lo ciegos que
están ustedes, aun los poquitos de ustedes que en verdad trataron de entender
las cosas, de entender qué es todo esto en donde somos los seres humanos, qué
es todo esto, nosotros incluidos. Sólo quiere decir que, cuando con la
filosofía, ustedes empezaron a tratar de entender las cosas, hace más de 2 500
años, ya las cosas los habían metido a ustedes todos en el mundo ustedes, un
mundo de cuya normalidad hoy ustedes todos siguen participando, ya sea que
crean en ignorancias como Dios o el tarot, o ya sea que no estén en tanta
ignorancia como para creer en Dios o en el tarot, y hoy ésos de ustedes que no
están en tanta ignorancia sólo pueden irse hacia a ciencia o hacia filosofía
materialista para tratar de entender algo de las cosas, y la filosofía ya está
tan devaluada que para señalar que se está en una filosofía más o menos real
hay que especificarla llamándola materialista, para indicar que se está tomando
al mundo como no espiritual, como de no de Dios ni de cosas como el tarot), y algún nombre tenía que tener eso (cuando al conocimiento no pudieron simplemente llamarlo
conocimiento), y el nombre es lo de menos,
pero la filosofía llega hasta un punto y se estanca, y es desplazada por la
ciencia, por ese conocimiento que conocemos como ciencia y que también será
siempre cuando en las cosas haya seres como nosotros.
Y yo empecé por lo “político”, y luego
terminé en lo “filosófico”, pero no es así, sino que lo que somos los seres
humanos (pensamiento, conocimiento, entendimiento, razonamiento)
en mí se fue en su forma más lógica, lo “político” y
lo “filosófico” (y lo “religioso” y lo
“científico”) es sólo lo que somos los
humanos, pero en su forma torcida, retorcida, atrofiada.
Y tengo que dejar muy claros los
conceptos, tengo que establecer las divisiones exactas que hay en las cosas,
porque lo que yo hablo podría decirse que también es filosofía (y durante muchísimos años yo anduve
tratando de acomodar todo lo que yo veía, tratando de darle un orden a todas
las cosas, cómo eran todas las cosas, anduve tratando de atrapar las cosas,
para así poder con todo lo que ustedes decían de las cosas, ya fuera que
hablaran desde religión, o desde filosofía, o desde ciencia. Y ahora ya sé las
cosas, ya he acomodado todos los datos que las cosas tienen, principalmente lo
que más afecta a los seres que son como los seres humanos. Por eso puedo decir
las cosas, y por eso puedo afirmar que eso que ustedes llaman filosofía se
queda muy corto en su análisis de las cosas, pero lo que ustedes son y lo que
yo soy es sólo algo de lo que son las cosas, lo que nosotros somos está dentro
del orden de las cosas, ya les dije que en las cosas no hay méritos ni culpas,
sino que sólo se es lo que se es).
Quisiera decirles que lo que yo hago
también es filosofía, pero lo que yo estoy diciéndoles es que ustedes no saben
las cosas, y que por sí solos no pueden llegar a las cosas, ni siquiera con eso
que llaman filosofía, pero también estoy diciéndoles que así son las cosas y que
nosotros los humanos somos parte de las cosas, de los modos de las cosas, que
nosotros los humanos somos sólo como son los humanos de las cosas, las partes
humanas de las cosas, las cosas con capacidades humanas, la parte de las cosas
que tiene capacidades que llamamos humanas: pensar las cosas, ser en las cosas
con pensamiento, pero también engañarse con las cosas, ver las cosas desde Dios
o desde ciencia o desde filosofía.
6.1.2.3.1 El ser
El Ser es palabra “filosófica”,
abstracta, de supuestos, la ciencia no investiga al Ser, la ciencia investiga al
universo, el Ser no puede probarse, medirse, y el Ser es más allá del ser
humano o del ser vivo, el Ser es la totalidad, el Ser es lo que es (el Ser es lo que hay), y algunos “filósofos” han llegado hasta el absurdo de hablar
del No Ser, de lo que no es, en cosas así se pierde la filosofía y termina no
llegando a nada, y termina arrollada por la ciencia, por el conocimiento
científico. Pero el conocimiento debería ser sólo conocimiento, no conocimiento
científico (no conocimiento especializado), no conocimiento filosófico (no conocimiento que se pierde en abstracciones demasiado abstractas), el conocimiento debió ser siempre real, darse cuenta de
lo real, darse cuenta de lo que se tiene frente a las narices. Pero el problema
es que el conocimiento se adquiere a ciegas, como pasa con los demás animales,
y se adquiere conocimiento de lo que es comida, y de lo que es agua, y poco a
poco se van traspasando niveles y se adquiere conocimiento de lo que son los
utensilios, y lo que es el fuego, y se siguen traspasando niveles y vienen las
creencias en espíritus, y la agricultura, y las ciudades, y las creencias en dioses,
en varios dioses, y viene la escritura, y la creencia en Dios, en un solo Dios,
y viene eso que conocemos como filosofía, y no fue “inventada” para enfrentarse
a los dioses, pero se mete con los dioses, porque trata de entender qué es el
mundo, pero no llega a nada, y viene eso que conocemos como ciencia, pero
cuando surge la ciencia el humano está ya tan acostumbrado a su mundo que la
realidad ya no es tratada de entender, sino sólo algunas cosas de la realidad,
y viene la filosofía materialista que utilizando el conocimiento humano hasta
ahí acumulado vuelve a tratar de llegar a la verdad de las cosas, pero no
puede, lo más a lo que llega es a la idea de una revolución social para
construir una mejor humanidad.
Y yo nací y empecé a ver los engaños
humanos (los engaños de los Reyes Magos, y a los 7 años de edad
empecé a cuestionarme a los Reyes Magos, y la conclusión a la que llegué fue que
no existían. Pero es que los Reyes Magos son tan obvios, tan injustos, tan
atados a los recursos de los padres, tan ignorantes de si los niños se portan
bien o mal, a los Reyes Magos los vi a través de sus injusticias, a través de
sus cegueras, a través de la realidad que los negaba. Y después Dios también
fue reprobado por la realidad, tampoco Dios pasó la prueba de la realidad), y empecé a ver la injusticia humana (empecé a ver que la pobreza de la gente tenía causas), y me di cuenta de cómo era que venían los niños al mundo
(hasta los 14 años de edad yo creí que Dios era el
responsable de que los padres tuvieran hijos, y no el sexo, y no la violación,
ni siquiera sabía que había violaciones. Yo creía que Dios les daba hijos a las
parejas que él veía que se amaban, yo creía que los niños eran producto del
amor, del amor de Dios, del amor de los padres, no simple sexo, no simple
relación sexual, no simplemente un pene en una vagina, un espermatozoide en un
óvulo, igual que en muchos de los demás animales), y empecé a darme cuenta también de un universo al que no se le veía
Dios, y un día ya sólo vi tontería humana y terribilidad en todas las cosas, y
luego llevé la tontería humana hasta sentirme único, aun y con todo lo que no
sabía, aun y con todo lo que no entendía, aun así me sentí único, a todos
ustedes los sentía en un lado: que no sabían, que tampoco sabían, y después, la
consecuencia lógica fue quedarme yo solo con todo lo que veía, y no es que yo
no fuera tonto (o ignorante), sino que vi la tontería humana, aun la mía, y empecé con
esos datos: con tontería (en todos los humanos)
y con terribilidad (en
todas las cosas), pero cómo ocultarles que me
sentí único (y tal vez me sentí único por mi
historia escolar, porque se me quedó muy grabado que hubo siempre una gran diferencia
entre mis demás compañeros y yo, desde mi primer año de escuela, cuando yo no
sabía que este mundo era de diferencias, y al final de ese año mi boleta estaba
llena de dieces), y ahora ya sé por qué me
sentí único, y también sé que ese sentirme único fue lo que me hizo seguir a
entre tanto que apenas vislumbraba, pero que no me dejaba en paz, tanto que no
sabía, pero que cada vez iba entendiendo más, acomodándose más, tanto que tenía
que terminar, para poder arreglar a la humanidad, para poder cambiar a la
humanidad, para poder con la humanidad, para poder con todo, pero para poder
con la humanidad.
6.1.2.4 Ciencia
Y la religión es un monstruo de más de mil
cabezas. Y casi cualquiera se cree filósofo. Pero la ciencia no debía dar lugar
a confusiones (y sin embargo tiene confusión, por eso muchos
religiosos dicen que la ciencia y Dios no se contradicen).
Porque
hay sólo una ciencia, porque casi cualquier hipótesis puede someterse al método
científico, y ahí sólo pasa lo que pasa toda prueba, pero hay hipótesis que no
admiten examen, como Dios, o como los pegasos, pero eso no significa que Dios o
que los pegasos existan, al contrario, pero la ciencia al no decir algo contundente
acerca de Dios, o acerca de los pegasos, los deja en el limbo, y como piedra de
tropiezo, para los pobres de espíritu.
La
ciencia no se mete con Dios (pero algunos científicos
sí han hablado un poco contra Dios, algunos científicos que van un poco más
allá de la común ciencia), la ciencia le
permite a Dios seguir siendo, pero la ciencia es parte de una tontería general
que admite no sólo a Dios, sino a la injusticia, y a la ciencia, a ese tipo de
conocimiento que es capaz de llegar a muchas cosas, pero que no es capaz de
darse cuenta de cosas más obvias, como la invalidez de Dios, no porque Dios no
pueda ser sometido a examen, sino porque Dios tiene muchísimas contrapruebas
indirectas, y algunas increíblemente tan fáciles de demostrar, como ese cuento
mormón de que los indios del continente americano son judíos convertidos en
indios por una maldición de Dios.
Porque
ustedes (todos) viven en una normalidad de ignorancia en donde hasta
lo más disparatado es respetado, tolerado (y
eso no está bien, pero el alcohol es tolerado, aunque se sepa todo lo dañino
que es, y ahora ya han empezado a tolerar a la marihuana, pero porque no
pueden, porque vivimos en una sociedad de enfermos en donde casi cualquiera se
envicia y en donde las cosas no se hacen bien, si los encargados de aplicar las
leyes son unos pobres tontos más, proclives al vicio, o a la corrupción, o a la
ineficiencia, o a opiniones, en donde cada uno tiene su “opinión”, pero resulta
que todo lo que somos es desde donde pensamos, desde donde entendemos, desde
nuestro conocimiento, desde nuestra ignorancia, pero resulta que ninguno de
ustedes entiende a la realidad, al bien, a los problemas humanos), la mentira es tolerada, la irresponsabilidad es tolerada,
y en donde nadie se atreve a levantar la voz para señalar todo lo que está mal
(y lo que está mal no es sólo una que otra cosita,
sino que está mal todo, empezando con Dios, y con la irresponsabilidad general,
y con la corrupción pública y privada, que es lo mismo, y con una sociedad
enviciada, y con la tontería de eso que llaman democracia), pero porque ustedes viven en una ignorancia general
(y la ciencia vive en su torre de ignorancia, y la
ciencia es sólo el ejemplo de cómo el conocimiento de ustedes se adapta a una
sociedad de ignorancia, de por qué el conocimiento de ustedes puede convivir
con la ignorancia. La ciencia no cuestiona a la sociedad, dice que ése no es su
papel, y con ello está aprobando, al callar. Y casi todos los científicos están
bien metidos en sus campos de investigación, han venido a convertirse en unos
locos más que están con su tema, mientras la humanidad sigue derrumbándose, el
problema es que el conocimiento se incapacita al volverse científico, al
utilizar el método científico, el conocimiento que ustedes tienen es de la
ignorancia, es el conocimiento adecuado para la ignorancia en que están ustedes
todos), y como ni aun denunciando a Dios se
llega a algo, pues ya todo ha encontrado su lugar (en la ignorancia general en que están ustedes todos, por
eso es que no va a ser fácil lograr que ustedes entiendan las cosas), como ya casi todo se ha probado y nada de lo de ustedes
hace mucha diferencia, pues todo sigue más o menos igual, como hay problemas
más urgentes (como la diaria sobrevivencia), pero no se dan cuenta de que todo es parte de un mismo
problema (o sea, la pobre vida que la mayoría
de ustedes tiene), como el mundo de ustedes
está tan confuso y tan establecido (tan
enraizado, en la ignorancia), como los
experimentos (como la Unión de Repúblicas
Socialistas Soviéticas: la URSS, la antigua URSS, la pobre URSS) fallan, y como venimos de pasados más autoritarios y con
más carencias, y como la ignorancia general se transforma (pero más o menos sigue igual, en una normalidad), como lo más que pueden aspirar ustedes es a hacer mejores
sociedades de justicia, pero como lo más lejos que podían llegar ustedes por sí
solos ya ha pasado, el poco conocimiento de ustedes llevado hasta justicia, la
filosofía materialista llevada hasta justicia, eso que a casi todos ustedes les
pasó de noche y que ni aun los poquitos de ustedes que andaban en eso (queriendo arreglar al mundo, tratando de mandar a dioses y
a amos al basurero de la historia) se dieron
cuenta, pero de todas formas, el máximo alcance de ustedes no llegaba a nada,
porque era muy tenue (y porque el humano es una
bestia muy compleja), pero por ahí más o menos
yo llegué a las cosas, que sólo podíamos optar por el bien (pero que quién sabe si el bien sería suficiente).
Pero,
cómo se pasa de un mundo normal (porque sólo sería
cuestión de que su conocimiento empezara a denunciar, pero desde dónde va a
denunciar, porque no basta denunciar a la mentira o al alcohol o a los malos
gobiernos, habría que denunciar todo, aun a las cosas, o sea todo, incluidos
nosotros mismos, y ubicar al bien, que sólo el bien nos podría salvar, que sólo
por el bien podíamos optar) en que se acepta
tanta tontería, toda la tontería, a sospechar que hay algo raro, pero luego, no
saber qué es lo que sigue, y cómo no perderse entre tanta oscuridad, entre
tanta normalidad, si yo poco a poco y penosamente fui ubicando, escalando, por
eso es que no es fácil que cualquiera de ustedes, de la noche a la mañana, se
meta en la senda que lleva al entendimiento de las cosas, ustedes todos están
muy lejos, por eso es que va a ser difícil que ustedes entiendan, pero yo tengo
que señalar por dónde, y entre más señale más fácil será que uno u otro de
ustedes empiece a entender, a meterse en el camino que lleva a entender.
Hace 4 500 millones de años la Luna estaba más
de 10 veces más cerca al planeta Tierra, y poco a poco ha ido alejándose, o sea
que es simple coincidencia que durante algunos miles de años el tamaño de la
Luna vista desde la Tierra sea más o menos igual (pero
no igual, la Tierra y la Luna tienen movimientos elípticos, el Sol, la Tierra y
la Luna no siempre están a la misma distancia, y en donde esto se precia más es
en el tamaño de la Luna, acuérdense de que hay eclipses totales de Sol y
eclipses anulares de Sol: en los eclipses totales la Luna tapa completamente al
Sol, y en los eclipses anulares queda como un anillo de Sol) al tamaño del Sol visto desde la Tierra (y la diferencia de circunferencias entre el Sol y la Luna
es de más o menos 400 veces), como ocurre
actualmente, pero cada vez más su tamaño aparente irá siendo más pequeño que el
del Sol, porque continuará alejándose, porque gana movimiento angular, o alguna
cosa como ésa (y si menciono esto de los
tamaños aparentes es por ésos que creen que en el mundo las cosas están
planeadas asombrosamente, pero cuando les dices cosas como ésta no te creen, y
en la Biblia dice que en el principio Dios flotaba sobre las aguas, sobre las
aguas de la Tierra, de una Tierra en oscuridad, de una Tierra en noche, y que
parte de esas aguas Dios las subió al “cielo”, porque, de dónde creen que para
los antiguos salía la lluvia, y que luego hizo la luz, y a la luz le llamó día,
y que luego hizo al Sol y a la Luna y a las estrellas. O sea que el planeta
Tierra es anterior al Sol y a las estrellas, o sea que primero hizo a la luz y
luego al Sol y a las estrellas, o sea que el día y la noche son anteriores al
Sol, o sea que el Sol y la Luna y las estrellas están debajo de las aguas del
cielo. Lo único en lo que acierta la Biblia es en que la Luna es posterior a la
Tierra. La ciencia dice que lo más probable es que la Luna haya surgido del
choque de un cuerpo celeste, como del tamaño del planeta Marte, contra la
Tierra, hace como 4 500 millones de años, y que la mayor cantidad de ese cuerpo
fue integrado al cuerpo de la Tierra, y que el resto es lo que actualmente es
la Luna, y un cuerpo del tamaño de Marte es más o menos el 15 % del volumen de
la Tierra actual, y la Luna es más o menos el 2 % del volumen de la Tierra
actual, y esta información es de la ciencia, pero no por eso la ciencia es algo
asombroso, la ciencia es sólo un conocimiento fundamentado, pero desviado, en
el sentido de que la ciencia está como ciega ante los problemas más grandes que
tiene la humanidad, problemas que sólo por medio de conocimiento es como pueden
ser vistos, y todas las humanidades tendrán este tipo de conocimiento
aparentemente tan asombroso, pero tan ciego).
La ciencia no se da cuenta de que está
trabajando sobre un universo fallido (sobre un orden de cosas innecesario, inútil,
de más), que su trabajo de boyscouts ya está de más, una
ciencia igual de perdida que ésos que se refugian (su vida, sus
ilusiones, y si son más intelectuales, sus esperanzas, sus dudas, sus
preguntas, sus respuestas) en Dios, en eso que llaman Dios, o en cosas
parecidas a eso que llaman Dios, es decir, cosas misteriosas, mágicas, de fe.
Llega un momento en que el entendimiento (de
ustedes) se va por otro lado, se olvida de
tratar de entender (porque no puede) lo general (o sea, todo), y se va a lo particular (a
conocimientos parciales, porque, aunque la ciencia se ocupa del universo, el
universo podría ser sólo una parte de las cosas),
al conocimiento de precisión, y ese tipo de conocimiento florece, y da muchos
frutos, pero es un camino cerrado, para entender todo, cómo es todo. Pero la
filosofía y la ciencia son el entendimiento de ustedes llevado a su máximo
(y la ciencia y la filosofía son 2 tipos de
conocimiento, pero en lo que se refiere a entendimiento de la totalidad de las
cosas, la filosofía es superior a la ciencia, y en lo que se refiere a
entendimientos parciales, la ciencia es superior a la filosofía).
6.1.2.4.1 La materia
La ciencia también estudia la materia,
la ciencia trata de saber de qué está hecho el universo, y el problema de
ustedes no es todo lo que saben (todo lo que han investigado, todo lo bueno que han traído
con la investigación científica), el problema
de ustedes es todo lo que no saben, el problema de nosotros es que sólo somos cosas
y que estamos al garete de las cosas, el problema de nosotros es que somos sólo
lo que las cosas nos hacen ser, y el problema de las cosas es que son unas
cosas pequeñas, y de ellas somos, pero tenemos que saber qué somos, a qué nos
enfrentamos, en qué estamos.
Y
lo que yo estoy mostrándoles es cómo son las cosas, y cómo son los humanos de
las cosas, quiero que vean que los humanos siempre serán (y han sido) igual, como nosotros, como ustedes, como yo, como los de
Dios, como los de ciencia, como los de filosofía, qué no ven (pero para qué pregunto, si precisamente hoy son lo que son
porque no ven, porque no pueden ver, pero tengo que lograr que empiecen a ver,
que puedan empezar a ver) hasta dónde llegan
las respuestas que no consideran que en las cosas haya Dios (las cosas son de algún modo, ya sea que sean de Dios, o que
no sean de Dios, el ser humano salió de alguna parte, de alguna forma es todo
lo humano y todo lo demás, todo tiene que tener una explicación), y lo que yo quiero que ustedes entiendan es cómo son las
cosas al no tener Dios, al no ser de Dios las cosas se quedan sólo como cosas
(sin ningún sentido),
como procesos, como nichos (como lugares en las
cosas, como piedras, como perros, como ustedes, como yo), nosotros nos quedamos sólo como lo que se es en estos
zapatos (de tipo humano), este ser humano (este ser
en humano) que todos los humanos que han sido
(más allá de este planeta Tierra) ya lo han sido, ya han estado en dioses inexistentes, y en
conocimiento filosófico, y en conocimiento científico.
En
las cosas hay materia (y energía, y materia oscura, y energía oscura), pero la materia no es lo importante de las cosas, lo
importante de las cosas es su condición (por
eso el conocimiento real no puede ser científico, sino más parecido a eso que
ustedes llaman filosofía, pero una filosofía que en ustedes vino sólo a
calentar un lugar, a marcar un lugar, a señalar un lugar de las cosas, pero que
ahí se quedó, sentada, incapaz de seguir por ese camino. Y si así ocurrió en
ustedes así ocurre siempre en el ustedes de las cosas, en el ustedes del
nosotros de las cosas, en el ustedes de las cosas humanas que hay en las cosas), lo importante de las cosas es: si las cosas son
materiales (una palabra que no se refiere
directamente a la materia, sino al espíritu, una palabra que más que hablar de la
materia niega al espíritu, a espíritu), o si
son espirituales. Lo importante de las cosas es: si tienen creador o no. Lo
importante de las cosas es: si son de creación, si son de voluntad, si son de
inteligencia, o si no son de eso, sino que se parecen más a las piedras que a
los humanos.
Y aunque la ciencia no
habla de materialidad o de espiritualidad, la ciencia actúa dentro de
materialidad, la ciencia no actúa dentro de espiritualidad, dentro de
espiritualidad las cosas son irregulares, caprichosas, mágicas, sin orden; y si
la ciencia pudo ser fue porque el mundo no era caprichoso, el mundo era
investigable, pero el mundo no requiere tanta concreción, el mundo no requiere
tanta investigación, sino que el mundo requiere sólo conocimiento, conocimiento
global, no conocimientos particulares, especiales.
6.1.2.4.2 El universo
Los
que creen en Dios llegan hasta el extremo de llevar su entendimiento a medias (y eso, los más
intelectuales de Dios, los que tratan de amalgamar a Dios con lo que ellos creen
que es la ciencia, y por eso dicen que hay científicos que también son
creyentes en Dios, y hasta citan eso de Einstein de que Dios no juega a los
dados, claro que lo citan fuera del contexto en que lo dijo Einstein, pero es
que ellos están acostumbrados a ver las cosas así, por eso manejan la Biblia a
su antojo y dicen que en algunas partes Dios habla en sentido literal y en
otras partes habla en sentido figurado, y Dios habla, porque ellos dicen que la
Biblia es la palabra de Dios, aun lo más absurdo, aun lo más fácil de demostrar
que no es cierto) hasta el punto de decir que
todo lo que existe es perfecto, y que por eso es (la prueba de que es la) obra de un
diseñador inteligente (y otra vez: le dan a
Dios características de inteligencia, características que ellos creen que son
sólo humanas, pero características que son más de la vida en general que del
humano en particular, características de la vida que en el humano están sólo
más desarrolladas, más visibles, hasta para ellos que casi no ven), y creen que con repetir algo de lo que ha investigado la
ciencia, pueden apoyar a su Dios, y entonces hablan de la fuerza de gravedad y
de la fuerza fuerte y de la fuerza débil y de la carga eléctrica del protón, y
dicen que si el universo no fuera así, nosotros no existiríamos (porque el universo no sería como es, el universo sería
diferente, y la vida no hubiera podido ser, y nosotros no hubiéramos podido ser), pero que Dios hizo de tal forma las cosas para que
nosotros fuéramos.
Pero las cosas no son así, las cosas son
más que el universo actual, porque parece ser que el universo actual no
terminará en un big crunch (un universo que tal vez sí empezó con un big bang, hace
como 13 800 millones de daños), sino que se
diluirá, y un universo de big bang y de big crunch (big quiere decir grande, bang quiere decir ruido muy fuerte,
crunch quiere decir aplastar, exprimir. Big bang generalmente se traduce como
gran explosión, y big crunch como gran contracción. Los términos son del inglés
porque la investigación científica más avanzada se hace principalmente en los
países de habla inglesa) hasta podría haber
dado la posibilidad de que pudiera ser único, lo único, que ser y universo
fueran lo mismo, que las cosas y el universo fueran lo mismo, y entonces las
cosas (o el ser) serían oscilantes, irían de explosiones a contracciones, eternamente.
El
asunto de las cosas no está en el universo (aunque el universo actual y
las cosas fueran lo mismo), el asunto de las
cosas está en su materialidad (en su no
espiritualidad, en que las cosas no son de espíritus, de dioses, de Dios), el asunto de las cosas está en que son materiales.
El
asunto de las cosas no está en la ciencia, sino en algo más parecido a la
filosofía, y digo más parecido a la filosofía porque con la filosofía ustedes
tampoco pueden llegar a entender lo que son las cosas, porque la filosofía se
hace muy extraña, y lo mío no es filosofía, porque si lo mío fuera filosofía
querría decir que ustedes (los pocos de ustedes que manejan filosofía) están en el camino correcto y que algún día hubieran
llegado a entender las cosas. Y la mayoría de ustedes ni siquiera entiende qué
es ciencia y qué es filosofía, qué es conocimiento científico y qué es
conocimiento filosófico, la mayoría de ustedes no entiende mucho, para creer en
dioses o en tarot no se requiere mucho entendimiento. Y yo estoy mostrándoles
unas cosas que ustedes no han podido entender, unas cosas ante las que ustedes
todos están equivocados, errados, ya sea que las consideren desde sus dioses o
desde su conocimiento científico o filosófico, y algunos de ustedes sí pueden
darse cuenta de que los dioses están errados (que
los dioses en que cree la mayoría de los humanos son de error, de ignorancia), pero no se dan cuenta de que el conocimiento también está
errado (que tiene error, ignorancia), y el conocimiento principal que defenderán será el
conocimiento científico, porque el conocimiento filosófico está ya casi
olvidado (apabullado por una ciencia que ha
tomado el mando, una ciencia que sabe muchas cosas, una ciencia que puede
hablar de la vida y del universo, pero una ciencia que no puede hablar de la
justicia que tanto necesitan los humanos, ni de las conclusiones materiales de
las cosas, de las cosas vistas desde materialidad, desde sin Dios).
Y
puede ser que el universo actual no sea lo único que hay, sino que puede ser
que haya más universos (universos con otras leyes físicas, universos que no hicieran
posible la vida, y con ello, que no hicieran posible al humano, y con ello, que
no hicieran posible al pensamiento como el del humano, y por ello que no
hicieran posibles a los dioses humanos, ni a la ciencia, ni a la filosofía), y más cosas (pero la
certeza es que Dios no es, los dioses no son, la certeza es que no hay cosas
más grandes o problemáticas que los humanos, los monstruos más grandes de las
cosas son los que crea el pensamiento del humano). Pero las cosas pueden ser conocidas indirectamente, por sus elementos,
por sus hechos, por cómo son, por a través de qué son, a través del pensamiento,
y a través de la tontería (o sonambulismo, o
hipnosis, o parálisis, o límites) en que están
ustedes todos, y a través de los dioses en que cree la mayoría de ustedes. Y
las cosas pueden verse también a través de que la humanidad no tiene méritos de
ser, las cosas son las que producen vida y perros y humanidades y dioses y
ciencia y filosofía y una explicación como la mía, las cosas producen todo, o
más bien, en las cosas se produce todo, todo lo que es, todo lo único posible.
Las
cosas pueden ser vistas a través de la tontería (o como tontería, o como
sonambulismo, o como hipnosis, o como parálisis, o como límites) en que están ustedes todos (porque
eso en que están ustedes todos fue algo de lo que me hizo ver las cosas, fue
algo de lo que me hizo empezar a ver hacia las cosas, y me hizo meter ese dato
en las cosas: el dato ustedes, el dato la tontería de ustedes todos, toda la
tontería que admitía, que permitía, su conocimiento, ese conocimiento que creen
intachable, pero que podía convivir con creencias absurdas como la de Dios, y
que también podía convivir con la injusticia. Y un conocimiento que llevaba
incluso a la soberbia, a la soberbia en medio de la mugre humana, como la
soberbia de esos creyentes en Dios que pueden hablar de Dios en medio de tanta
mugre humana, una mugre humana que según ellos es parte del plan de Dios, una
mugre perteneciente a un diablo, o incluso a nosotros mismos, culpa nuestra,
por ser soberbios, por no amar a Dios, por no poder resistir al diablo, pero un
diablo al que Dios deja ser, para probar a los humanos, para seguir probando a
los humanos, unos cuantos miles de años más, pero Dios puede darse esos lujos,
porque dicen que para Dios, mil años son como un día), tanto los creyentes en dioses, como los que ven las cosas
desde conocimiento (científico o filosófico), conocimiento que no es que no sea conocimiento, sino que
está torcido, está incapaz, para entender, para entender qué es esto (este lugar, esta cosa, este todo, todo), conocimiento que está incapaz para entender la injusticia,
la desigualdad, conocimiento que está incapaz para entender los datos que está
mostrando (evidenciando, desnudando,
condenando) la injusticia (de los humanos) y todo lo
demás que se alcanza a ver de las cosas.
6.1.2.4.3 La vida
Y
la vida surge de la materia, de alguna de las muchísimas combinaciones de la
materia, ¿y qué es la materia, y de dónde salió la materia? Y las respuestas no
son fáciles, y por eso ustedes todos fueron metiéndose en lo que hoy son (la humanidad viene desde un mundo como el
que viven los perros, como el que perciben los perros. Pero yo nací y empecé a
ver, datos, cuando yo nací ya había muchos datos, pero no siempre fue así. Y en
algún lugar, entre el mundo humano de casi perro y el mundo que yo ya conocí,
el humano se tuerce. Pero ahora tenemos que batallar con como son las cosas,
con lo que al humano le hacen las cosas, con este bache de las cosas, con las
capacidades humanas atoradas a medio camino. Unos perros que no tienen casi
nada de entendimiento, y unos como ustedes con un entendimiento increíble,
trabado), por eso
es que hoy hay un mundo ustedes en donde hasta los menos ignorantes de ustedes
están como ciegos ante las cosas, como sonámbulos, por eso no se dan cuenta de
en qué cosas viven, por eso casi ni siquiera se dan cuenta de que hay que
arreglar a la humanidad, y por eso cuando uno de ustedes se diera cuenta de
todo eso iba a llegar hasta el fondo de las cosas, ése de ustedes iba a darse
cuenta de la terribilidad de las cosas y de la como tontería de ustedes todos,
tontería de la que ninguno de ustedes tiene la culpa, pero que el resultado es
un mundo humano regido por la ignorancia y por la maldad. Y una ciencia y una
filosofía que no podían callar a las ignorancias de Dios y que por eso las
ignorancias de Dios seguían dominado al mundo humano, aunque no todos los
humanos creyeran en esas ignorancias de Dios, pero esos pocos que no creían en
Dios no tenían respuestas contundentes, y se había llegado a un empate, a la
porquería de mundo en que hoy ustedes todos viven y que ven como normal. Y Dios
iba a tener que surgir, inevitablemente, porque los seres que son como nosotros
vienen desde mundos como los de los perros en donde no sabemos casi nada de
nada.
Y
además de ser un fenómeno físico (un fenómeno material, un fenómeno natural), o un estado, o una condición, la vida es también un
concepto, una idea, y por eso se cree que la vida es algo especial, algo
diferente a todo lo demás, a las demás cosas sin vida, a las demás cosas que ni
siquiera pueden alcanzar la categoría de muertas, por eso se llega a creer que
ser vida es más que ser piedra o que ser estrella, se llega a creer que ser
vida es como ser en otro nivel (en un nivel
especial, en un nivel en donde las cosas tienen sentido, en un nivel en donde
las cosas tienen que tener un sentido), pero
la vida es sólo una forma de ser de las cosas (la
vida es de unas cosas que no necesitan vida para ser, unas cosas de las que la
vida es sólo una partecita, y efímera, como una estrella, como un universo), la vida es sólo algo que se produce en las cosas (a partir de unas cosas sin vida, de unas cosas que están
más allá de vida y muerte, de unas cosas que no necesitan vida para ser. Y
hasta dónde la ciencia ha mirado, la única vida que hay está aquí en el planeta
Tierra, y aún dentro de nuestro planeta los seres vivos son muy poco en
relación a todo lo demás del planeta. Y no es que todo lo que no sea vida esté
muerto, sino que la mayor parte de las cosas no es en términos de vida y muerte.
Pero tiene que haber más vida, actualmente, o que ya fue en el pasado, o que va
a ser en el futuro, porque aquí hay vida, porque nosotros somos vida, porque
las moscas están vivas, y ni nosotros y ni las moscas somos seres especiales,
es sólo que la vida no es fácil de producirse, pero es posible). Y el espíritu sale de la vida, lo produce la vida, el
espíritu es del pensamiento que se da en la vida, y ese pensamiento dota a las
cosas de conceptos de vida, de espíritu, de necesidad de ser, de que las cosas
son para algo, e incluso, de que las cosas son por algo, por alguien.
Si
nos vamos a las explicaciones en donde interviene Dios, las cosas y la vida y
los humanos se explican en Dios (pero Dios depende de los humanos, y los humanos dependen de
la vida, y la vida depende de las cosas), pero
Dios es sólo en la ignorancia humana. El problema de Dios es que está sólo en
la ignorancia, y en la ignorancia de los más ignorantes. Y entonces, a Dios
puede derrotársele sólo en el conocimiento, con conocimiento, pero no es tan
fácil adquirir conocimiento, pero sí es posible, Dios no es tan fácil de
derrotar, de hacer ver su inexistencia, pero sí es posible. Y digo que no es
tan fácil adquirir conocimiento, porque si lo fuera, habría más personas que no
creyeran en Dios, pero esas personas que no consideraran que hay Dios, se
preocuparían más por este mundo, por hacer mejor este mundo. No es tan fácil
adquirir conocimiento, por eso los pocos de ustedes que llegan a algo de conocimiento
lo hacen en una forma muy mecánica, muy de remedo, por eso pueden llegar sólo a
una ciencia que es conocimiento desviado, o a una filosofía materialista que es
conocimiento muy corto.
Y
la vida tiene su muerte, la vida acaba en la muerte, y la vida es tan casi nada
que puede acabarse casi en cualquier momento (con una simple bala), y no queda nada, de la vida, de lo que
fue vida, y aunque goces o sufras, todo queda en nada, y aunque para morir
sufras casi hasta lo indecible (que hayas sido torturado por muchas horas, o días), aunque tengas la peor muerte, al final
ni te acordarás de nada, ni de tu vida, ni de lo que sufriste en tu vida, ni de
lo que sufriste en tu muerte, será simplemente un ya no despertar, te duermes y
jamás despiertas, dejas de sentir, dejas de saber de ti, tan nada que es la
vida, porque no queda nada, porque cuando mueres se acaba todo, es como si no
hubieras sido, como si nunca hubieras sido, como si no fuera nada.
7 Las
cosas podrían ser de 3 tipos de cosas o de 4 tipos de cosas
En las cosas hay muchos tipos de cosas,
pero las cosas más diferentes entre sí son las cosas que tienen vida y las
cosas que no tienen vida. Y de las cosas que tienen vida no todas son iguales,
pero lo más diferente entre las cosas que tienen vida somos nosotros. Y
entonces, en las cosas pueden verse 3 formas muy diferentes de cosas: cosas que
no tienen vida, cosas que tienen vida, pero de los animales (de lo que nosotros llamamos
animales, pero nosotros también somos animales. No somos una creación especial,
somos más a imagen y semejanza de los demás animales que de cualquier otra cosa)
hacia abajo, y nosotros. Pero ahí no termina todo, porque
en cuanto a entendimiento de las cosas, ustedes (todos)
están igual que toda la demás vida, que todas
las demás cosas: sin saber, están en una como tontería increíble.
Y entonces, en las cosas yo veo 4 tipos
de cosas, y podrían ser sólo 3 los tipos de cosas, pero los procesos (que siguen las cosas, los
procesos que hacen posibles las cosas) no lo
permiten, no lo han permitido aquí en nuestro momento (en el momento de las cosas del que hoy nosotros somos
partícipes), y nuestro momento no es nada
particular, tal vez sea rarísimo, pero no es especial (único), porque los datos
así lo muestran, y algunos de los datos son: que a este universo no se le ve
Dios, ni ausencia de tontería (humana), y por el contrario sí se le ve mucha terribilidad, es
decir, mucho daño (y mucho es lo que es, pero
también mucho es, y ha sido, destruido, sin piedad), e indiferencia, soledad. Los procesos de las cosas son
dentro de lo posible, no son lo mejor, pero se acercan mucho, y si muchas cosas
son casi perfectas es porque dentro del ensayo y error de la naturaleza
sobrevive más lo mejor que lo peor, y en el ejemplo humano puede verse que los
procesos de las cosas son sólo lo que son, lo que se puede ser, en soledad, sin
guías, sin metas, sin propósitos, sino que es sólo lo que puede ser,
naturalmente.
7.1 3 tipos de cosas (cosas de tipo piedra, cosas de tipo perro, cosas de tipo
humano)
Este
modelo de cosas hubiera sido el ideal, pero las cosas no son ideales, las cosas
son sólo lo que son, son increíbles, pero son primarias, siguen caminitos muy
primitivos.
Este
modelo sería más fácil, pero los procesos de las cosas no lo permiten, este
modelo no se da, y al no darse, las cosas se complican (de más) para seres que son como nosotros.
7.1.1 Cosas de tipo piedra
Las
cosas de tipo piedra son todas esas cosas que no sienten, ni oyen, ni ven, ni
entienden, o sea, todas esas cosas que no tienen vida, desde las estrellas
hasta las piedras, o el agua.
7.1.2 Cosas de tipo perro
Las cosas de tipo perro son todas esas
cosas que o sienten y/u oyen y/o ven y/o entienden un poquito, o sea, todos los
seres vivos, con excepción de los seres vivos que son como los seres humanos. Y
he utilizado al perro como representativo de este tipo de cosas, porque los
perros son los animales más cercanos a nosotros (y porque los perros son una
creación nuestra, originalmente la naturaleza no produjo perros, los perros son
descendientes de los lobos y empezaron a ser apenas hace unos 50 000 años, los
perros son los descendientes de los lobos que se acercaban a los asentamientos
humanos a comer de nuestros desperdicios, y desde entonces están con nosotros,
y han sido modificados en cuerpo y en inteligencia por nosotros, y hoy tenemos
cientos de razas de perros, pero es que los perros son de los rarísimos
organismos vivos que tienen mucha plasticidad),
pero en este tipo de cosas también están las plantas y las bacterias y los
virus y los hongos (y entre los hongos están
los hongos de comer y los hongos del pie de atleta y los hongos que llamamos
moho).
7.1.3 Cosas de tipo humano
En
las cosas de tipo humano entran todos los seres que son como nosotros, los
seres humanos del planeta Tierra.
Pero
los seres humanos no son un tipo de cosas, sino que los seres humanos dan
origen a 2 tipos de cosas (y también dan origen a una confusión de términos, como por
ejemplo cuando tengo que utilizar las palabras nosotros, ustedes, yo): a un ustedes (o sea, ustedes,
ustedes todos, más de 7 000 millones de personas actualmente en el planeta
Tierra) y a un yo (o sea, yo, yo solito aquí en el planeta Tierra, en este
momento, y si no hubiera sido yo, hubiera tenido que ser algún otro, pero hoy
fui yo. Pero tanto unos como todos ustedes y uno como yo se darán siempre que
en las cosas haya seres que son como nosotros, es decir, seres que pueden entender
las cosas, aunque todos ustedes, solos, no puedan entenderlas por sí mismos,
sino que tenga que hacerse alguien como yo, alguien al que los procesos de las
cosas permitan llegar, sin proponérselo, hasta el entendimiento de las cosas. Y
en las cosas todo tiene explicaciones, momentos, y más o menos a esta altura de
la historia humana ya era el momento en que tal persona como yo podía llegar a
entender las cosas. Y yo no tengo ningún mérito en haber podido entender las
cosas, simplemente se conjugaron tiempos, lugares y genes, y una vez dadas las
condiciones, ya todo lo demás era cuestión de tiempo, de que yo creciera, de
que yo intentara arreglar los problemas humanos, de que yo me diera cuenta de que
los problemas humanos pertenecían a un universo, y luego, de que yo terminara
de acomodar todo eso que veía en el universo y en el humano. Y si en ese tiempo
yo me enfocaba más hacia un universo que hacia unas cosas es porque esta
explicación no nació de la noche a la mañana, porque durante mucho tiempo yo no
supe cómo nombrar todo eso que vislumbraba), y
si no puede hablarse de que hay un solo tipo humano, sino 2, es porque ustedes
no han podido entender las cosas (por más que
algunos de ustedes trataran de entenderlas, pero nunca pudieron ubicar todos
los elementos de las cosas, aunque la filosofía se dio cuenta de algunos de
esos elementos, pero hubiera sido increíble que el conocimiento de ustedes no
hubiera podido identificar algo), y yo sí, y
yo fui metido en caminos (procesos) que hicieron que me fuera inevitable llegar
a los fondos de las cosas.
7.2 4
tipos de cosas (cosas de tipo
piedra, cosas de tipo perro, cosas de tipo ustedes, cosas de tipo yo)
Éste es el modelo que se da en las
cosas, en las cosas hay 4 tipos de cosas, y son los mismos 3 tipos de cosas que
en el otro modelo, sólo que el tipo humano da origen a 2 tipos de cosas: al
tipo ustedes y al tipo yo.
Y esta explicación podría haberla
suavizado (para no meterme en tantos problemas, principalmente para no
quedar como protagonista) al presentar las
cosas desde el modelo de 3 tipos de cosas, pero entonces no sería fiel con los
datos que las cosas están mostrando (y
recuerden que no sólo se trata de nosotros, sino que lo que nosotros somos va
más allá de nosotros, nosotros no somos la creación especial de un Dios, sino
una cosa de las cosas, una cosa no muy común, pero sí una cosa posible de ser y
que cuando es, es como está siendo hoy aquí),
y las cosas están bien claras, en las cosas hay un mundo ustedes, o sea, como
lo que ustedes todos están siendo hoy, eso (esa
sociedad, esa humanidad) tan increíble que
están siendo, tan increíble por lo absurdo, por lo ignorante, por lo tonto, y
sus dioses reflejan sólo lo que ustedes son, la tontería inimputable, pero
tontería, que ustedes son (y en donde más puede
verse esa tontería es en las creencias de los mormones, en el Dios de los
mormones, pero ustedes creen que pueden con todo lo que se les diga, diciendo
que tal o cual Dios es el bueno y que los demás o son equivocaciones humanas o
son tretas del diablo), y lo otro de ustedes
que no se apoya en dioses (para explicar el
mundo), o sea, la ciencia y la filosofía
materialista, tiene implicaciones más profundas que los callejones sin salida
en que ustedes están metidos, porque las cosas sin Dios no tienen ningún
sentido y eso nos deja a los humanos sin nada (y
hoy ustedes tienen algo, un mundo, una vida, aunque sea de porquería, aunque
sea de tontería, pero si dejan de estar en esa tontería, entonces no tendrán
nada, tendrán que irse, o sea que hoy está protegiéndolos la tontería, pero a
qué precio, al precio de tanta infelicidad, al precio de una vida casi de
muerte para muchísimos de ustedes. El problema principal de ustedes no es la
ignorancia, son las víctimas, pero tanto ignorancia como víctimas son
inevitables, pero la ignorancia es inevitable hasta cierto momento, como ya
hoy, pero las víctimas no son completamente inevitables, pero hay víctimas que
sí dependen de la ignorancia, hay víctimas que hoy ya podrían ser detenidas), pero hoy ustedes viven ajenos a todo eso.
7.2.1 Cosas de tipo piedra
Son
todas las cosas que no tienen vida, y utilicé la palabra piedra para nombrar a
este tipo de cosas, porque cosas como las estrellas son muy grandototas y cosas
como el agua son muy escurridizas, y en este tipo de cosas entran también las
cosas que el ser humano fabrica (los zapatos, las mesas, las computadoras, los robots), y en este tipo de cosas entran también las cosas
imaginarias (los unicornios, los pegasos, los
centauros, los ángeles, los espíritus, los diablos, los dioses, Dios, eso que
ustedes llaman Dios).
7.2.2 Cosas de tipo perro
Son
todas las cosas que tienen vida (virus incluidos) con
excepción de los seres humanos.
7.2.3 Cosas de tipo ustedes: los dioseros y los
no dioseros
He inventado las palabras diosero y no
diosero para describirlos a ustedes, y no lo hago para burlarme de nada ni de
nadie, sino para enfatizar lo que quiero decir.
Para inventar estas palabras usé como
referencia la palabra Dios, y a los que creen en Dios los llamo dioseros y a
los que no consideran que haya Dios los llamo no dioseros.
Y escogí estas palabras porque Dios es
una gran palabra, el problema de Dios es que no lo hay, que no hay alguien que
esté velando por todas las cosas.
En las cosas de tipo
ustedes entran ustedes todos, Y ustedes se dividen en dioseros (es decir, los de ustedes
que creen en Dios o en cosas que son como Dios, y son la mayoría de ustedes)
y no dioseros (es
decir los de ustedes que no consideran que en las cosas haya Dios o alguna otra
cosa como ésa, y son muy pocos de ustedes), según
su actitud ante la vida, según lo que creen que es esta vida (y más allá de esta vida),
y actúan de acuerdo a eso, se abandonan a un Dios (o a cosas que son como ésa),
o hablan desde un mundo material en donde no hay cosas irreales (cosas irreales que no se les ve por ningún lado, por ningún
medio, cosas irreales que en el mejor de los casos son sólo buenas intenciones,
pero qué tienen que ver las buenas intenciones con la realidad, cosas irreales
que en el peor de los casos son sólo ignorancia de la peor, de esa ignorancia
que te lleva a creer que este mundo no es lo único, ni lo principal, y que te
lleva a esperanzarte en otro mundo, y mientras tanto no haces nada por arreglar
éste, por hacer mejor éste, de esa ignorancia que quiere que casi no ejerzas el
pensamiento, el entendimiento), y los no
dioseros ven el mundo desde filosofía materialista o desde ciencia.
7.2.3.1 Los dioseros: religiosos, brujos, adivinos,
miradores de ovnis, filósofos idealistas,
“superación personal”
He inventado la palabra diosero para
referirme a todos esos de ustedes que creen en Dios o en cosas como ésa.
Dioseros
son la gran mayoría de ustedes, en este grupo se está si no se es filósofo
materialista (o sea, filósofo de hecho, filósofo es todo aquél que trata
de entender las cosas, y desde las cosas reales, desde conocimiento, y desde el
mayor conocimiento posible, entre más conocimiento, más se puede filosofar)
o si no se es científico (y un científico maneja el método científico, y aunque hay
cosas como Dios que no pueden abordarse por el método científico, sí puede
verse que todo lo relacionado con Dios no tiene fundamentos).
Todo aquello que no sea filosófico o
científico, es diosero, y los dioseros serán siempre la mayoría de los seres
que son como los seres humanos, y habrá un tiempo en que todos esos seres
humanos serán dioseros (en la infancia de cada humanidad, como en nosotros, los
humanos del planeta Tierra, apenas hace como 3 000 años empezaron algunos
humanos a pensar algo diferente a Dios para explicarse a sí mismos y al mundo.
Y a nivel individual sólo como a los 12 ó 13 años de edad empiezan algunos de los
humanos a cuestionarse a Dios, al mundo de Dios, a un mundo que es por obra y
gracia de Dios, de eso que los humanos llaman Dios, ese Dios de miles de ideas
de Dios), pero conforme las humanidades
progresan, o los individuos crecen (lo
suficiente como para saber de Dios, o de su ausencia, de las buenas intenciones
que encierra la palabra Dios, pero de lo ilusorio que es eso), habrá menos dioseros, pero los dioseros siempre serán
mayoría.
Y
no todos los dioseros necesariamente tienen que creer en Dios (y aunque Dios en sí ya es
un revoltijo, muchos lo hacen aún más revoltijo al mezclar a Dios con
disparates aún peores), pero en lo que creen
los dioseros que no creen en Dios, se le parece mucho a Dios, creen en cosas
sin fundamento, creen en explicaciones sencillas, creen en explicaciones que
hacen notar muchísima falta de conocimiento, por más que hayan ido a la escuela
o que hayan leído (pero no sé qué habrán leído)
o que hayan vivido. Y tengo que ser muy claro,
ninguno de ustedes sabe las cosas, pero los que están más alejados de las cosas
están en el grupo de los dioseros, y son la mayoría de los ustedes.
7.2.3.1.1 Los religiosos (Dios, dioses, diablo, diablos, espíritus)
Y
hay una gran cantidad (cientos, tal vez miles) de
creencias basadas en Dios (en eso que llaman
Dios), o en dioses, o en fuerzas espirituales,
y hay monoteístas (o sea, ésos que creen en un
solo Dios, aunque entre los cristianos haya ese cuento semipoliteísta de la Trinidad,
eso de 3 dioses en 1, y aunque en la Biblia hayan quedado restos de politeísmo,
como en el libro de Génesis, capítulo 1, versículo 26, en donde dice hagamos, y
algunos protestantes dicen que ese plural se refiere a Dios y a los ángeles, y
los Testigos de Jehová dicen que se refiere a Dios y a Cristo, y los católicos
no toman la Biblia literalmente) como los
cristianos (católicos, protestantes, ortodoxos,
monofisistas, difisistas; y monofisistas son algunas iglesias coptas y la
iglesia etíope y la iglesia eritrea y la iglesia armenia y la iglesia siria; y
difisistas son los nestorianos, los nestorianos son los seguidores del tipo de
creencias de Nestorio, un hereje, según sus opositores, que vivió, más o menos,
del año 380 al año 451, creencias nestorianas condenadas por las creencias
“católicas”, es decir, mayoritarias, “universales”, católico quiere decir
general, universal; y eso del nestorianismo surgió allá por el año 420, pero ya
antes había surgido lo del arrianismo, y aún más “herejías”, como el montanismo
o el adopcionismo o el origenismo o el apolinarismo o el priscilianismo, y después
del nestorianismo surgieron “herejías” como el monofisismo o el monotelismo o
el protestantismo. Y cosas como el adopcionismo y el origenismo y el arrianismo
y el catolicismo y el paraprotestantismo tienen que ver con Jesús de Nazareth,
alias el Cristo, con eso de que si Jesús era Dios o no, y que, en caso de que
Jesús fuera Dios, qué tan Dios era, en cosas así se debaten ésos que creen en
dioses, ésos que, aun viendo, creen que los dioses son posibles, ésos que creen
en dioses aun viendo que en el mundo hay sólo humanos de carne y hueso, humanos
que tienen necesidades y pasiones, humanos que tienen que ir al baño, humanos
que huelen mal, humanos que no son lo mejor de lo que podrían ser. Pero en
tiempos de Cristo sucedían más hechos prodigiosos que en la actualidad, en
tiempos cercanos a los de Cristo andaba por ahí un tal Simón el Mago, que
levitaba o que volaba, pero claro, los poderes de Simón, eran obra del diablo,
y después de esos tiempos Dios empezó a actuar de otra manera, casi ya sin
hechos sobrenaturales, y también le prohibió al diablo ejercer todo su poderío,
Dios se fue más al pensamiento humano, y a las sugestiones del pensamiento
humano, y a las casualidades, y a las explicaciones de ésos que cuando ven algo
aparentemente extraordinario piensan que eso de los milagros sí es real,
posible, cierto, que si hay Dios, diablo, Cielo, infierno), o como los paracristianos (los
Testigos de Jehová, los mormones, los de la Luz del mundo, entre otros. Paracristianos
significa parecidos a los cristianos), o como
los musulmanes (tan divididos como los
cristianos), o como los judíos (también con divisiones), o
como los mazdeístas (también llamados
zoroastrianos, como los parsis, también con conflictos entre ellos), o como los baháis (los de
la fe bahái. Y no sé si entre los baháis haya conflictos, pero los baháis fue
un grupo que se desprendió de los babistas, una religión fundada por un tal El
Bab, o sea La Puerta, en su idioma original, allá por 1844. Pero a su vez el
babismo fue un grupo que se desprendió de la rama chiita del Islam); y hay politeístas (ésos
que creen en varios dioses, como los antiguos griegos); y hay panteístas (como
los sijs); y hay eso del hinduismo que no sé
en dónde meterlo; y hay budistas (y la mayor
parte de los budistas no cree en Dios o en dioses, pero todos los budistas
creen en un mundo que va más allá de éste), y
hay jainistas (y son muy compasivos con los
animales, y espero que también sean compasivos con los humanos), y sintoístas, y caodaístas, y tenrikyoístas, y los del
vudú, y más, muchísimos más. Y casi (porque hay
algunos ecuménicos, es decir, ésos que tratan de amalgamar todas las creencias
en una sola diciendo que Dios es sólo uno, y que en el fondo todas las
distintas creencias creen en el mismo Dios, pero algunos “ecuménicos” llegan al
extremo de decir la tontería de que Dios y universo son lo mismo, de que no
importa si crees en Dios o en el universo. Y traduciendo, lo que con eso
quieren decir, es que no importa si crees en Dios o que si piensas que somos en
un universo que no fue creado por ningún Dios) todas
estas creencias en Dios o en dioses o en fuerzas espirituales no se aceptan
entre sí porque cada una de ellas cree que lo suyo es lo correcto, y a lo largo
de la historia humana ha habido muchas guerras religiosas (y agresiones hacia algunas religiones, como hacia los
albigenses), y algunas religiones vencidas han
desaparecido (como la de los albigenses), y las guerras de conquista también han causado la
desaparición de algunas religiones (como casi
todas las antiguas religiones de los indígenas americanos).
Y
las sectas de Dios no se aman unas a otras. Y escribo sectas de Dios porque
cualquiera de ellas dice que su Dios es el verdadero y que el de los otros (otros que también creen en un Dios, en
Dios) es falso
o que es el diablo. Y escribo sectas de Dios para tratar el asunto de ese
famoso Dios, ese tal Dios que no lo hay, ese Dios que es sólo en quienes creen
en él, a su modo, a su particular modo sectario. Ese sagrado Dios que (los que creen en él) creen indestructible (mientras
no es destruido, y los dioses derrotados pasan al olvido, pero ustedes ni se
acuerdan de ellos, creo que muchos de ustedes ni saben que ya se han caído
muchos dioses) y verdadero (pero cada uno de los que creen en Dios lo cree verdadero,
porque ninguno de ellos creería en un Dios falso), y se les hace imposible que no sea reconocido como el Dios verdadero,
como el único Dios, como Dios. Y ahí están, cada uno de ellos creyendo en Dios,
en ese Dios, en ese Dios de todos ésos que dicen Dios. Así que no me vengan con
que todo esto en donde somos es creación de Dios, porque entonces les
preguntaría de qué Dios, de cuál Dios, si Dios es un montón de cuentos de Dios
(y el Dios de los católicos es una reelaboración del
Dios de los judíos, y el Dios de los protestantes es una reelaboración del Dios
de los católicos, y el Dios de los Testigos de Jehová es una reelaboración del
Dios de los protestantes, y el Dios de los mormones es un revoltijo judeocristiano
con más mitos del Cercano Oriente, y de Egipto, y de América, y con lo que se
le ocurría a Joseph Smith, y si no lo hubieran matado no sé hasta dónde hubiera
llevado ese revoltijo, si cualquier cosa que quería, o soñaba, o creía ver, la
consideraba revelación de Dios).
Y
de dónde salió el Dios de los judíos (y el Dios de los judíos es el origen del Dios
de los cristianos y del Dios de los musulmanes),
porque el Dios de los judíos tuvo que salir de alguna parte, no siempre
existió, hace 3 500 años no existía, tal vez el origen del Dios judío está en
(una línea monoteísta cuyo representante mejor
conocido es) Akenatón (Akenatón fue un faraón egipcio que vivió hace como 3 350
años. Akenatón empezó una reforma religiosa de tipo monoteísta, o que apuntaba
hacia un monoteísmo, pero después de su muerte esta reforma religiosa fue
derrotada en Egipto, pero tal vez sobrevivió en los judíos), porque los judíos no son muy originales que digamos
(y además son descuidados: en Génesis, Génesis es un
libro de la Biblia, se dice que Abraham era originario de Ur de los caldeos,
pero en los tiempos en que dicen que vivió el tal Abraham, Ur no era de los
caldeos, todavía faltaban más de 1 000 años para que hubiera caldeos en Ur, y
muchos creen, que quien escribió esa parte de la Biblia fue Moisés, pero
tampoco existía una Ur de los caldeos en tiempos de Moisés, Ur es una ciudad
muy vieja, y fue habitada por los sumerios, y luego fue habitada por los
babilonios, y después esa región perteneció a los caldeos, cuando en la Biblia
pusieron eso de Ur de los caldeos, Ur ya era de los caldeos, pero no siempre
fue así. Y cuando pusieron lo de Ur de los caldeos ha de haber sido en tiempos
en que los caldeos ya empezaban a ser importantes en la historia, allá por el
reinado de Nabopolasar, cuando empezó el imperio caldeo, también llamado
imperio neobabilónico, y eso fue más o menos por el año 620 antes de Cristo, y
coincidentemente por esas fechas reinó Josías en Judá, y Josías inició una
reforma religiosa, y durante su reinado se “descubrió” el libro de la Ley,
atribuido a Moisés. Y así como está este asunto de Ur de los caldeos está toda
la Biblia), los judíos tuvieron que haber
copiado sus cuentos de los cuentos de otras culturas, y casi todas las demás
fuentes religiosas anteriores al Dios judío eran politeístas (los sumerios, los babilonios, los egipcios). Pero aun de los politeístas, y de los mazdeístas, los
judíos se nutrieron, de los politeístas sacaron sus cuentos de la creación y
del diluvio, y de los mazdeístas sacaron su cuento del diablo.
Y
de dónde salió el primer Dios, salió de un cerebro humano que ya podía pensar
en ello, las primeras representaciones del tipo de Dios fueron de espíritus a
quienes había que adular, para que fueran benignos, para aplacarlos, y los
espíritus fueron refinándose hasta llegar al Dios uno, único, creador, y al que
el mal está subordinado.
Y
de dónde salió el infierno en que cree la mayoría (y el Papa Juan Pablo II ya
había redefinido el infierno sólo como el no gozar eternamente de la presencia
de Dios, ya le había quitado las llamas. Pero el Papa siguiente, Joseph
Ratzinger, el alemán que quiso ser Papa y que se puso Benedicto XVI y que
renunció después de menos de 8 años de ser Papa, le regresó las llamas al infierno
de los católicos) de los cristianos (y los protestantes todavía siguen amenazando con el fuego
del infierno. Y los Testigos de Jehová dicen que, cómo un Dios de amor va a
tener infierno, y por eso ellos no creen en el infierno, pero resulta que ese “Dios
de amor” ha permitido que la humanidad sufriera por casi 6 000 años, según sus
cuentas, según sus cuentos, sólo porque Adán y Eva le desobedecieron, se le
rebelaron, pero a ese Dios ya antes se le habían rebelado muchos ángeles, entre
ellos Luzbel, el diablo, a ese Dios cualquiera se le rebela, ese Dios de amor
que castiga los pecados de los padres en los hijos, y hasta la cuarta
generación, pero hay partes de la Biblia en donde dice que cada quien es
responsable sólo de sí mismo, y entonces se cae eso de que Jesucristo murió
para reparar lo del pecado original, y sin embargo los protestantes siguen con
eso de que acepta a Jesucristo como tu salvador personal, y los Testigos de
Jehová siguen hablando del rescate hecho por Jesucristo), porque los judíos no tenían ese infierno, el infierno de
los judíos era más parecido al infierno de los sumerios y babilonios (de Hammurabi hacia atrás. Y ese infierno era un lugar
sombrío, de sombras que se alimentaban de polvo. Y Hammurabi fue un gobernante
babilónico, de la primera Babilonia, hace como 3 800 años), pero no se puede decir que las creencias de los judíos
siempre hayan sido las mismas, porque en tiempos de Jesús había 2 sectas
principales (los fariseos y los saduceos) que tenían opiniones muy distintas en cuanto a creencias de
su Dios, y había más sectas (como la de los
esenios), y por eso la secta de los cristianos
pudo pegar, porque los judíos no eran una pared impenetrable.
Una
de las religiones que toma la Biblia como la única verdad (porque dicen que es la
palabra de Dios, palabra de Dios como ese cuento de Ur de los caldeos) es la de los Testigos de Jehová (otro grupo es el de los protestantes, o evangélicos, o
aleluyas, o “cristianos”, como últimamente algunos así los llaman. Pero los
católicos y los ortodoxos y los monofisistas y los difisistas también son
cristianos, y los Testigos de Jehová y los mormones también se dicen
cristianos), y los Testigos de Jehová dicen
que ellos sí interpretan bien la Biblia, sin los errores que dicen hay en las “sectas”
de la “religión babilónica” (los Testigos de
Jehová dicen que los otros cristianos y los musulmanes y demás religiosos,
pertenecen a “Babilonia la Grande”, o sea, a la religión falsa), y los Testigos de Jehová no creen en la Trinidad (es decir, que hay eso de Dios Padre, Dios Hijo y Dios
Espíritu Santo), ellos dicen que eso de la
Trinidad es un politeísmo, ellos dicen que el único Dios es Jehová (y los musulmanes dicen que el único Dios es Alá) y que Cristo es sólo el hijo de Dios, su primera creación,
su mano derecha, su junior (pero los arrianos,
allá por el siglo III, ya habían tomado a Cristo más o menos así, y los
arrianos se nutrieron de tradiciones que más o menos tomaban a Cristo como un
hombre común y corriente más, como un carpintero, hijo, o hijastro, de
carpintero, como un judío galileo hablante de arameo, como un hombre nacido de
mujer y hombre, pero los arrianos se quedaron en una especie de semidiós, se
quedaron con un Cristo no igual al Padre, subordinado al Padre, pero mucho
mayor que nosotros. Los arrianos eran los seguidores de Arrio, otro “hereje”), y el dogma de la Trinidad de católicos (y la mayor parte de los católicos reconocen al Papa, a lo
que ellos llaman El Papa, es decir, al obispo de Roma, pero hay católicos que
no lo reconocen, y hay católicos que sí reconocen al Papa, pero que hasta
parecen protestantes: son los católicos carismáticos) y protestantes (y los protestantes son un grupo no tan fácil de definir,
pero básicamente creen en la Trinidad, en sus templos no hay imágenes, y en sus
reuniones le claman mucho a Dios; y el nombre de protestantes se debe a que en
1529 un grupo de ellos hizo una protesta contra una decisión del emperador
Carlos V, y desde ahí se les quedó ese nombre; el protestantismo lo inició
Martín Lutero el 31 de octubre de 1517, y por intereses políticos prendió esa
reforma religiosa, porque antes de Lutero ya había habido otros, como Pedro de
Valdo, como John Wycliff, como Jan Hus, que intentaron reformar a la iglesia
católica, pero sus intentos fueron muy perseguidos, y fueron extirpados, o casi
extirpados; pero esa reforma no se quedó como Lutero la quería, sino que casi
desde el inicio empezó a ser los cientos de iglesias que hoy son consideradas
protestantes: anglicanos, luteranos, metodistas, pentecostales, bautistas y más;
pero también hay iglesias parecidas a las protestantes, pero que no puede
considerárseles protestantes, sino paraprotestantes, como los Testigos de
Jehová, los de la Luz del Mundo y otras más, y esas iglesias paraprotestantes
ya no creen en la Trinidad, como los Testigos de Jehová y otras más, y los de
la Luz del Mundo no sé si sean trinitarios o no, pero los pongo entre los
paraprotestantes porque tienen partes muy raras, como ésa de que el hijo de su
fundador es considerado casi un semidiós, o Dios mismo, otro como David Koresh,
el de allá de Waco, Texas; porque Moon el coreano es de otro tipo de locura,
Moon es el fundador de la “Iglesia de la Unificación”. Y si hablo de cosas como
las anteriores es sólo como apoyo, como evidencias, de por qué digo todo lo que
digo, de por qué cualquier cuento de Dios, el que sea, es sólo un cuento,
creído sólo por cierto segmento de la población, pero nada más, porque no hay
un Dios, no hay Dios, sino que lo que hay es ignorancia, en ustedes todos, pero
principalmente en los que creen cuentos de Dios, de cualquier Dios, aunque cada
quien diga que su Dios sí es verdadero. Y para poder explicar lo que son todas
las cosas tengo que aportar datos, elementos, porque si no lo hago así no van a
poder entender qué es lo que yo hablo, qué es lo que yo quiero hacer entender,
porque lo mío no puede ser resumido fácilmente, sino que tengo que aportar
razones de por qué digo todo lo que digo, y si quiero fundamentar todo lo que
digo tengo que restregarles en la cara todas las tonterías humanas, y todos los
crímenes humanos) y ortodoxos (y los ortodoxos también tienen un poco de
problema con eso de la Trinidad, por eso, y algunas cosas menores más, están
separados de los católicos desde, por lo menos, el año 1054, porque los
ortodoxos no aceptan eso de que el Espíritu Santo también procede del Hijo, es
decir, de Cristo) no tiene sostén (pero nada de lo religioso tiene sostén, y en la Biblia en
donde más puede verse eso es en los libros de Hechos, Génesis, Esdras y
Nehemías), pero las creencias de los Testigos
de Jehová tampoco tienen sostén, como en el asunto de la sangre (los Testigos de Jehová no permiten que les hagan
transfusiones de sangre, porque dicen que eso es comer sangre y que en la
Biblia se prohíbe comer sangre), y a algunos
Testigos de Jehová les he señalado que en Gálatas, en los capítulos 1 y 2
(Gálatas es uno de los “libros” de la Biblia, Gálatas
es una de las cartas de Pablo y se compone de sólo 5 páginas), se contradice a una pretendida resolución (Decreto de Jerusalén le llaman) que salió de un pretendido Concilio que dicen sucedió en
Jerusalén allá por el año 49 (y que es narrado
en el libro de Hechos) en donde se prohibía
(se mantenía la prohibición, ya establecida en la
Biblia judía, o sea, el Viejo Testamento de los cristianos, pero ese Viejo
Testamento no está igual en todos los grupos cristianos, algunos tienen el
mismo número de libros que la Biblia judía, pero otros tienen más. Y los
cuentos de los cristianos se derivaron de los cuentos de los judíos, Jesús era
un judío, pero los judíos no lo aceptaron como el Mesías, es decir, como el
Ungido de Dios, es decir, como el Cristo, porque los judíos esperaban a un
Mesías que los liberara de la dominación extranjera, a un Mesías que los
restableciera como nación. Pero los que sí aceptaron a Jesús de Nazareth como
el Mesías, como el Cristo, iniciaron una secta dentro del judaísmo, y a esa
secta hoy la conocemos como cristianismo, pero esa secta hoy está dividida en
sectas. Y las palabras cristo y mesías significan lo mismo: ungido, pero cristo
es una palabra que viene del idioma griego, y mesías es una palabra que viene
del idioma hebreo. Y el Dios de los judíos es YHWH, traducido como Yahvé o
Jehová, y los cristianos no sólo hicieron Cristo a Jesús de Nazareth, sino que
lo hicieron Dios, y también hicieron Dios a un tal Espíritu Santo, y en el
libro de Hechos, han quedado huellas de la novedad de esa invención, del
desconcierto que al principio causaba ese tal Espíritu Santo, los cuentos de
los cristianos salieron de los cuentos de los judíos, pero los cristianos
ampliaron esos cuentos, y luego los mormones ampliaron aún más esos cuentos) comer sangre, entre otros asuntos (como el asunto del alimento sacrificado a los ídolos), y a algunos de los Testigos de Jehová también les he
señalado que en otra carta de Pablo (en Primera
de Corintios, capítulo 10) se vuelve a tratar
el asunto del alimento sacrificado a los ídolos (o
sea, que el asunto del alimento sacrificado a los ídolos tampoco quedó zanjado
en ese pretendido concilio, Gálatas y Primera de Corintios son cartas
posteriores a ese pretendido concilio), o sea,
más argumentos en contra de ese pretendido concilio y de esa pretendida
resolución (el asunto de la sangre nunca quedó
establecido más que en los cuentos de los Testigos de Jehová, como ese otro
cuento de ellos de que Jerusalén cayó, ante los neobabilonios, en el año 607
antes de Cristo, y no en el año 587 antes de Cristo, y basados en una fecha
errónea los Testigos de Jehová dicen que en 1914 sucedieron acontecimientos en
el Cielo: que Cristo fue entronizado como rey, que el diablo fue arrojado a la
Tierra, y que por eso sucedió la Primera Guerra Mundial, y que por eso el fin
del actual sistema de cosas ya está próximo, de algún momento a otro, porque
algunos bebés nacidos antes de 1914 tienen que estar todavía vivos para ver
esos acontecimientos, porque en la Biblia dice que: no pasará esta generación.
Pero este cuento es sólo una reelaboración de su cuento de cuándo va a ser el
fin del mundo, porque otras fechas ya les han fallado), pero los Testigos de Jehová no hacen caso, ellos están
fanatizados, es decir, ignorantes (y sí que
están muy ignorantes, muchos de ellos creen en cosas como la “magnetoterapia”,
o sea, la cura de las enfermedades por medio de imanes, pero los Testigos de
Jehová son sólo unos ignorantes más, como todos ésos que al ser capaces de
creer en dioses, son capaces de creer en cualquier tontería). Y señalando cosas como éstas (metiéndome un poquito más a fondo con las creencias y
conocimientos particulares de cada uno de ustedes, ya sea que estén en Dios o
en tarot o en platillos voladores o en ciencia o en filosofía materialista. Y
tal vez muchos se sientan aludidos cuando les toque su ceguera particular y
digan que no es exacto lo que estoy señalando de esa ceguera en particular, ya
sean cegueras de Dios, o cegueras de ciencia, o cegueras de filosofía
materialista. Pero las creencias en dioses o en Dios o en cosas como el tarot,
son irreales, y el conocimiento basado en filosofía materialista y en ciencia
es un conocimiento muy miope. Todo lo de ustedes todos ya lo tengo muy bien
marcado, y al tener atrapado lo de ustedes, tengo ya atrapadas a las cosas,
porque las cosas son a través de nosotros) es
como podría hacerles ver a ustedes todos de por qué digo todo lo que digo.
Y hablo de los Testigos de Jehová, pero
es que los Testigos de Jehová creen que pueden ponerse de tú a tú con todos los
que no están de acuerdo con ellos, y han escrito muchos libros, y folletos, y revistas,
para respaldar sus afirmaciones, sus cuentos, los Testigos de Jehová creen que
tienen una teología muy bien elaborada, pero todos los cuentos de Dios no
tienen ningún sustento. Y leí un libro escrito por un protestante cuyo
subtítulo es: un periodista investiga evidencias científicas que apuntan hacia
Dios, pero ese libro está aún más burdo que los libros de los Testigos de
Jehová. Y leí otro libro, publicado por una editorial católica, y con ese libro
los católicos tratan de rebatir a todos los que no son católicos, y esos
rebates van, desde el rebate hacia los protestantes, hasta el rebate a los que
no aceptan ningún Dios, pero ese libro está hecho aun más descuidadamente.
Pero también hablo de los mormones (de los pobres mormones, de
otros pobres ilusos más), y ya dije que la
religión de los mormones (las creencias de los
mormones, las creencias en Dios de los mormones, las creencias en lo
sobrenatural de los mormones) es el ejemplo
ideal para mostrar que las creencias religiosas son más que ignorancia: son
francas tonterías. Y no pretendo ofender ni burlarme, pero a cualquiera pudo
haberle pasado, a cualquiera que dijera que Dios le transmitió un libro, un
libro como el Libro de Mormón, un libro que puede ser desmentido aquí y ahora,
no cuando estemos muertos, cuando seamos nada y nada podamos contra los que
afirman cosas como ésas. Pero es necesario mostrar la tontería (una tontería que no tiene culpa, porque todo lo nuestro es
de las cosas, aun nuestras peores tonterías, aun nuestras peores maldades, pero
una tontería que está afirmando a un mundo humano lleno de mal, de daño), es necesario remarcar la tontería, de algún lugar tengo
que agarrarme para poder con la pared de ignorancia natural que son ustedes
todos, en que están ustedes todos. Y una vez que demuestre la tontería de las
creencias en Dios (o aunque no crean en Dios,
como la mayoría de los budistas), ya sólo tendré que hacer ver hasta dónde llega el no
creer en Dios (o en cosas religiosas, o en
cosas como ésas: tarot, astrología). Porque lo
Dios (o religión, o cosas mágicas) y lo no Dios (el no creer
en Dios ni en ninguna cosa como ésa, el no creer en ningún mundo espiritual, en
ningún mundo mágico) son las 2 únicas
alternativas que tenemos los humanos para basar cualquier cosa que podamos
alegar, que podamos decir, cualquier opinión, de lo que sea.
Pero podría seguir hablando de los
mormones, de más de sus cuentos (y los mormones creen en cada cosa, creen que con sólo echar
una maldición pueden hacer que las personas se vuelvan mudas), como ese cuento de que Dios vive (que el trono de Dios está) cerca
de una estrella (o planeta, ni siquiera son muy
precisos, pero Joseph Smith, quien inventó la mayor parte de los cuentos
mormones, vivió sólo hasta el año 1844 y en aquellos años creo que todavía no
estaban muy precisos los conceptos de estrella y planeta, de qué era una
estrella y qué era un planeta, de qué se podía o no se podía en una estrella o
en un planeta, pero en caso de que eso ya se hubiera sabido Joseph Smith no
hacía mucho caso, como todavía hoy los mormones y los protestantes y muchas
religiones más no aceptan lo de la evolución de las especies, y la jerarquía
católica ha tratado de amalgamar religión y evolución de las especies, pero le
ha quedado un engendro), llamada (sólo en los cuentos de los mormones existe tal estrella) Kólob, o podría mencionar que la versión de Adán y Eva de los mormones es diferente de las demás
versiones judeocristianas, pero los mormones dicen que la Biblia fue alterada y
que ellos tienen las palabras auténticas (que a
ellos les fueron reveladas, y les siguen siendo reveladas, directamente por
Dios. Y la mayoría de lo que les ha revelado Dios está en El libro de Mormón,
en Doctrinas y convenios, y en La perla de gran precio). Y el Dios de los mormones es un Dios diferente, es una
Trinidad, como la de los católicos o la de los protestantes, pero no es la
misma Trinidad, porque la Trinidad de católicos y protestantes es: Yahvé
(o Jehová, unos lo conocen como Yahvé, otros como
Jehová), Jesucristo y Espíritu Santo; y la
Trinidad de los mormones es: Elohim, Jesucristo (al
que también le llaman Jehová) y Espíritu Santo.
Y podría hablar de los católicos y de
su Inquisición (que si todavía rigiera yo sería candidato para ser quemado
en la hoguera, pero el mundo se mueve, ya no estamos en tiempos en que la
iglesia católica dominaba, reinaba, torturaba, mataba, quemaba).
Y podría hablar de los protestantes (y de los peores protestantes,
como Bush, que cuando fue presidente de Estados Unidos hizo guerras, y muertos.
Y los “terroristas”, musulmanes eran antiguos aliados de los gringos, cuando
había que luchar contra el “comunismo ateo” de los soviéticos, y esos
terroristas, esos locos, siguen siendo financiados por sus socios comerciales
que les compran petróleo y que mantienen en los gobiernos de esos países a
castas controladoras de sus pueblos, de la ignorancia de sus pueblos, y entre
más ignorancia, más religión, y más fundamentalismo religioso, y más
terrorismo, más “guerra santa”, y el petróleo es sólo para que la gente que
puede hacerlo siga en su tren de vida, creyendo que así es el mundo,
consumiendo de más, y contaminando, de más).
Y de los musulmanes mejor ya no digo
más, están muy locos.
(Y además está
la cuasirreligión del marxismo, con su materialismo dialéctico, su materialismo
histórico y demás temas ideados por sus profetas. Pero el materialismo de los
marxistas está torcido, hacia determinismos, hacia sentido, que el universo
tiene sentido, que va hacia algo).
Y de las creencias en Dios (y demás cosas del asunto religioso) lo único que puedo aceptarles es su bien,
su amor, qué tanto bien hacen, qué tan buenos son, cuánto aman, pero el
problema es que su bien y su amor están en dependencia de sus creencias, o sea
que están distorsionados (y distorsionados hasta el punto de que su Dios les manda
matar a los que no son como ellos, como está en los musulmanes y su yihad, por
más que algunos musulmanes quieran componerle y digan que yihad significa más
cosas, no sólo guerra santa, no sólo la destrucción de todos los infieles, es
decir, de todos los que no creen en Alá).
Pero hay una creencia que es (o era, porque no sé si
todavía haya algunos que la sigan) un poquito
mejor que la mayoría de las demás creencias en Dios. La Teología de la
Liberación es parte del catolicismo, aunque el catolicismo oficial nunca la
aceptara y por eso casi acabó (o acabó) con ella (y fue Joseph
Ratzinger, el Papa que renunció, el encargado de perseguirla. Joseph Ratzinger
era el hombre fuerte del equipo de Juan Pablo II), y pudieron con ella (si hasta pudieron
con el “comunismo ateo” de la URSS, y de algunos de sus países satélites, que
en parte era fundamento de ese tipo de catolicismo que quería felicidad para tanto
infeliz, ese catolicismo un poco más cristiano que quería darle un poco de
felicidad a tanto infeliz y no dejar la felicidad sólo para los ricos, y para
los muertos, allá, en los cielos ilusorios del catolicismo, allá, donde según
dicen, está la recompensa para los explotados por los ricos, y por un clero que
opta por los ricos, por eso la Teología de la Liberación hablaba de una “opción
por los pobres”, y algunos tibios trataban de suavizar esta expresión
cambiándola un poquito a “opción preferencial por los pobres”. Y eso que
algunos llaman “comunismo ateo” fue sólo una de las mejores intenciones de los
pobres humanos, porque estuvo plagado de problemas, de males, pero es que, para
empezar, fue obra de humanos, y para aplicarse sobre humanos, unos humanos que
son muy complicados, y tal vez el principal problema fue que ese experimento
tenía como base el marxismo, y luego ese marxismo fue torcido hacia lo peor del
marxismo, y en esa comedia de justicias a medias, de entendimientos a medias,
de buenas intenciones a medias, de egoísmos a medias, de humanos a medias, hubo
heroísmo, heroísmo que casi de nada sirvió; y ese sistema “comunista ateo” no
pudo hacer mejor al humano, meterlo en un camino de mejoría, de cada vez más
mejoría, un humano que siguió en el vodka, en la superstición, en rebeldías
juveniles, en corrupciones, principalmente de la clase dirigente, en
irresponsabilidad, en humanidad, un humano que siguió siendo, ejerciendo, sólo,
su humanidad, su ser, su ser sólo un poquito superior al del perro, sólo un
poquito más contenido que el del perro, sólo un poquito más posible de domar,
de educar, que el del perro).
Y
no todos los cristianos toman la Biblia como palabra de Dios, no todos los
cristianos dicen que todo lo que está en la Biblia es verdadero, o peor aún,
que es la única verdad, porque los católicos casi nunca la han tomado así, pero
entonces, en qué se basaron para condenar a Copérnico (y el ignorante de Lutero se
atrevió a burlarse de Copérnico, Lutero creía lo que dice la Biblia, que en una
ocasión el Sol se detuvo, sólo para que los israelitas tuvieran el tiempo
suficiente para ganar una batalla. Pero en la Biblia hay otra barbaridad más
referente al Sol, según la Biblia hubo una ocasión en que el Sol no sólo se
detuvo, sino que retrocedió, y ese cuento está en el libro segundo de Reyes,
capítulo 20). (Y el humano siempre será como
hemos sido nosotros, pero los personajes religiosos que hemos tenido los
humanos terrícolas nos pertenecen sólo a nosotros, pero siempre habrá sus equivalentes
en cada humanidad, con Copérnicos y Darwins incluidos).
Y
si en esta explicación me meto con algo de los cuentos de Dios es porque la
sociedad humana actual (y su daño de más, su daño ya de más. Porque hay daño de más, pero no
siempre puede hacerse algo contra él, pero ya tiene mucho tiempo que los
humanos ya hubiéramos podido con algo del daño natural que tienen las cosas) está sostenida principalmente por esos
cuentos de Dios (y tengo que poder con la sociedad humana actual, y para eso
tengo que poner en evidencia sus cuentos de Dios. Y también tengo que demostrar
que el poco conocimiento que tiene esa sociedad está desviado o corto), unos cuentos de Dios con los que no puede el poco
conocimiento (pero nunca pierdan de vista que
cualquier cosa que nosotros seamos no es de nosotros, es de las cosas, de los
modos de las cosas) que tiene esa sociedad
(ese poco conocimiento que tienen muy pocos en esa
sociedad).
7.2.3.1.2 Los brujos
Hay personas que creen en las brujerías (y cómo definir a eso que
llaman brujerías, a eso que viene a la mente cuando oímos o leemos la palabra
brujería, porque las palabras dependen de nosotros, para la mayoría de los
humanos brujería es una cosa cierta o más o menos cierta, y para unos pocos
humanos brujería no es más que simple tontería, simple ignorancia), o creen que pueden hacerles brujerías, y van con los
“brujos” (con ésos que se dicen brujos, con
esos embaucadores, o embaucados, con ésos que dicen que hacen, o que creen que
hacen, brujerías, actos prodigiosos, milagrosos, actos fuera de lo normal), para hacer daño (creen
que se puede hacer daño con eso que llaman brujería, pero eso de la brujería es
como todo lo demás de la mayoría de ustedes, en eso que llaman brujería
intervienen las coincidencias o las sugestiones o las ganas de creer, y si
crees, pues miras, lo que quieres mirar, y si miras actos milagrosos es porque
tu nivel de entendimiento está como para eso) o
para ser “curados” de las brujerías que creen que alguien (que contrató a un brujo) les
ha mandado a hacer.
Pero para las brujerías se requieren
más que palabras (les llaman conjuros) o
muñequitos con alfileres o gallinas degolladas o tierra de cementerio o huevos
podridos (o huevos a los que previamente les
han metido cosas, y a los huevos pueden metérseles cosas porque los huevos son
muy porosos, sólo hay que ablandarlos en vinagre para poder abrirlos sin tener
que romperlos. Huevos con los que después “limpian” a la gente, y les muestran
las “brujerías” que traían en sus cuerpos), se
requieren cosas como el estramonio (el
estramonio es una planta de la familia de las solanáceas, y en esa familia hay
plantas que provocan alteraciones mentales, pero también a esa familia de
plantas pertenece el tomate y la papa) o algún
hongo (como el cornezuelo del centeno con el
que antes “volaban” las “brujas”, pero más bien, los que ya andaban volando
eran los que las veían volar), pero entonces,
eso ya no es brujería, ésas ya son sustancias que son capaces de causarle
alteración a nuestros (mortales, naturales, tan
frágiles, tan fáciles de matar, o de enfermar, o de sugestionar) cuerpos humanos.
7.2.3.1.3 Los adivinos (adivinaciones, videntes, astrología, tarot)
Hay
gente que cree que puede ver con la mente el futuro (o el pasado, o el presente),
o que cree que puede “leer” el tarot , o que cree que puede “leer” el café (o el cigarro, o los caracoles, o la mano, o el pie, o
tantas otras cosas más, como ésos que creen que con los ojos cerrados pueden
“leer” los pensamientos ajenos), o que cree
que puede transmitir pensamientos con la mente, o mover objetos con la mente, o
que cree que puede hacer eso que llama levitación (o que cree que puede hacer eso que llama “proyección
astral”). Pero lo peor es la gente que les
cree, la gente que cree que eso es posible (y
volvemos a lo mismo, para creer en cosas como ésas hay que tener muy poco
conocimiento, pero una vez más lo voy a decir: la mayoría de la humanidad está
en muy poco conocimiento, y eso los hace creer en cosas que van desde Dios,
hasta eso de “leer” la mano, por eso a todas esas personas las he agrupado en
un solo lugar, por eso he establecido sólo 2 grupos dentro del total de ustedes
todos: dioseros y no dioseros. Y muchos dioseros puede ser que sólo crean en
Dios, pero la mayoría de los dioseros está en mezcolanzas de Dios con
brujerías, con adivinaciones, con “superación personal”, la absurdidad está
llena de absurdidad, la absurdidad admite absurdidad).
Y
está también la astrología, tan absurda, y tan normal, y ahí anda la gente
llamándose acuario o sagitario además de su nombre de pila, y algunos
noticieros todavía tienen su sección de astrología, las noticias de los
asesinados por la estupidez humana mezcladas con “lo que dicen los astros”, y
esos noticieros tienen también sus “dosis de ciencia”, y en esos noticieros
está retratado el mundo humano tan normal en que viven ustedes todos: tanta
muerte absurda mezclada con astrología y con una ciencia (ciencia es una palabra del
latín que significa conocimiento) que no es
capaz de ponerle un alto a tanta muerte y creencia absurda.
Y muchos de ustedes creen que
astronomía y astrología son lo mismo, sólo porque en las 2 se hace mención de
los astros, pero son 2 cosas muy diferentes, porque mientras que para ser
astrónomo es necesario estudiar muchos años, para ser astrólogo sólo se
requiere ignorancia y desfachatez para poder andarse con tanto cuento. Y la
astrología actual era parte de la astronomía antigua, pero ahí se quedó,
congelada en un tiempo cuando se creía que los “astros”, es decir, las
estrellas, los planetas, la Luna, el Sol, los cometas, influían en nuestro
destino, cuando no se sabía qué eran los astros, cuando se creía que el cielo
era como la tapadera de la Tierra. Y el ser humano viene desde muy atrás, desde
cosas como las que puede saber el perro, y poco a poco va adentrándose en el
conocimiento de las cosas, poco a poco va conociendo, entendiendo, y avanza, y
avanza hasta donde estoy yo hoy, pero se estanca en donde están ustedes todos
hoy, pero como ustedes todos son en un momento dado los únicos (mientras alguien no venga a
decirles las cosas), creen que lo de ustedes
todos es el mundo normal, creen que sus caminos son los correctos, los únicos,
los normales, lo normal, aunque tengan tanta anormalidad.
7.2.3.1.4 Los miradores de ovnis
Hay
gente que cree en los ovnis (cree verlos o cree que otros los han visto), y la palabra
ovni significa objeto volador no identificado, pero los que creen en los ovnis
han ido más lejos, asocian esos objetos con naves espaciales tripuladas por
seres parecidos a nosotros y que vienen de más allá de la Tierra (pero
algunos de los que creen en los ovnis hablan hasta de ovnis que vienen de otras
dimensiones o de ovnis que vienen de debajo de la tierra, porque según ellos
bajo la tierra hay ciudades donde viven millones de extraterrestres. Y ojalá
ustedes supieran todas las tonterías en las que cree la gente, hay religiones
ovni, hay “contactados”, hay gente como ésa que decía que detrás del cometa
Hale-Bopp venía una nave espacial, y que venía por ellos, pero que para poder
abordarla tenían que estar muertos, y se suicidaron, hace algunos años, en
California, creo que fue en 1995).
Y sí, tiene que haber otros seres que sean (o ya hayan sido,
o vayan a ser) como nosotros, puesto que nosotros somos, y puesto
que no se ve que seamos especiales, una creación especial, la obra de algún
Dios, de un Dios que no se ve por ningún lado, sino que lo único que se ve es
que nosotros los humanos somos producto de unas cosas naturales, unas cosas
solas, unas cosas indiferentes.
Y
puede ser que actualmente haya muchos seres como nosotros por ahí (en
el universo actual, o en otros universos que actualmente pudiera haber). En el universo actual hay, más o menos, 10 mil trillones de
estrellas (eso es un 1 con 22 ceros), y lo más seguro es que la mayoría de las estrellas no
tenga planetas (y parece ser que una de cada
100 estrellas de la Vía Láctea son como el Sol, y eso querría decir que en la
Vía Láctea hay 1 000 millones de estrellas son como el Sol), pero con que el 0.0001% de ellas sí los tuviera (es decir, la millonésima parte de las estrellas del
universo actual), eso todavía significaría 10
000 billones (y billones de los normales, no
billones gringos, un billón es un millón de millones) de estrellas que podrían tenerlos.
Y puede
ser que actualmente nosotros seamos la única humanidad (y
los seres que son como nosotros se van a dar a sí mismos un nombre, así como
nosotros nos hemos dado el nombre de seres humanos o de humanidad, así ellos se
bautizarán a sí mismos, los perros no pueden hablar de perridad, porque ellos
no se saben hasta tal grado), porque las cosas
no son sencillas, para que pueda darse el fenómeno de la vida se requieren muchas
cosas, entre ellas ciertos elementos químicos (el
elemento químico que más abunda en el universo actual es el hidrógeno, es el
elemento químico más sencillo, sólo tiene un protón y un electrón), y para que haya esos elementos químicos se requiere tiempo
(esos elementos químicos se producen en la
evolución de las estrellas), nosotros (y todo lo demás del Sistema Solar) estamos hechos de restos de estrellas que fueron antes de
que fuera nuestro Sol.
Y podría
ser que nosotros fuéramos la única humanidad que se produjera en el universo
actual, porque podría ser que los humanos no fueran fáciles de producirse,
porque podría ser que la vida no fuera fácil de producirse, y podría ser que en
el caso de que la vida se produjera no fuera fácil que llegara hasta seres como
nosotros. Y podría ser que universos como el actual fueran poco frecuentes,
pero lo que nosotros somos se ha dado innumerables veces en las cosas, porque
aunque lo que nosotros somos fuera muy poco frecuente, ya ha tenido que darse
innumerables veces, y va a seguir dándose innumerables veces más.
Pero los que dicen que ven ovnis o son vivales
o son ingenuos (y hay testimonios de personas que dicen haber
visto seres extraterrestres, pero no tienen pruebas, y hay fotografías de ovnis,
o sea, de objetos, no sé si voladores o no, y tal vez no identificados, pero
los miradores de ovnis a partir de la fotografía de un objeto dan el salto
hasta seres extraterrestres, pero ya les dije que los seres extraterrestres serán
como los de aquí del planeta Tierra, y los humanos extraterrestres también
tendrán sus respectivos miradores de ovnis, ya les dije que todas las
humanidades son como nosotros, con nuestros problemas, con nuestras
ignorancias, pero encuadrados en un ser del que no se puede escapar, es decir,
tarde o temprano la explicación de las cosas los alcanzará y ni siquiera les
dará tiempo para andar visitando otros planetas, y visitando con misterio, con
secreto, y manifestándose a personas ignorantes, o dementes, o cínicas, y sin
dejarles pruebas contundentes, que puedan callar a los que no les creemos, así
como tampoco les creemos a los dioses de los creyentes, porque los vemos tan
llenos de pequeñez humana, de ignorancia humana, de tontería humana). Pero en caso de ser vivales los miradores de platillos
voladores, tampoco tienen mucho conocimiento, pero eso sí, tienen un poquito
más de conocimiento que los que les creen sus cuentos.
Pero veamos un poquito más eso de los viajes
interestelares, porque uno de los problemas de los platillos voladores es el
tiempo que se necesita para realizar dichos viajes, la velocidad máxima que han
alcanzado los artefactos (sondas, no naves
espaciales) creados hasta hoy por los humanos,
ha sido de menos de 100 000 kilómetros por hora (y
hay una sonda que alcanzó la velocidad de 252 900 kilómetros por hora, pero alcanzó
esa velocidad en su perihelio, porque entró en órbita con el Sol), y a esa velocidad la estrella más cercana a nosotros está
a más de 46 000 años de “viaje”, y aun en el caso de que se pudiera algún día
viajar a la velocidad de la luz (porque los
famosos “hoyos de gusano” son un cuento, como también son un cuento los viajes
entre dimensiones; no hay atajos, y eso de que puedan alcanzarse velocidades
cercanas a las de la luz está por verse), esa
estrella está a más de 4 años de viaje, pero para el caso de que pudiera ser
posible alcanzar velocidades cercanas a las de la luz serían necesarios
muchísimos años más de desarrollo tecnológico, pero saben qué, a ustedes ya los
alcanzó la explicación de las cosas, y así les pasará a todos los otros como
ustedes que sean en este ser.
7.2.3.1.5 Los filósofos idealistas
Filosofía significa amor a la
sabiduría, o amor al conocimiento, o amor por el conocimiento, o afán por el
conocimiento. Pero amor o afán por el conocimiento para qué, por qué, pues para
entender, y para entender qué, pues todo, todas las cosas, las cosas (y para qué querían entender, ¿para ser
mejores?, ¿para ser conforme al ser?).
Pero la filosofía idealista está
negando al conocimiento. La filosofía idealista dice básicamente que la
realidad de las cosas es espiritual, la filosofía idealista dice que el Ser es
espiritual. Y en caso de que la filosofía idealista (algunas corrientes de la
filosofía idealista) admita la materia, dice
que la materia es producto de la Idea (algunos
filósofos idealistas no utilizan la palabra Idea sino la palabra Espíritu. Y
antes yo me confundía mucho con las palabras que manejan ustedes, me
sorprendían, me enredaban, como eso de que el budismo es una religión atea, pero
afortunadamente ahora ya puedo con las cosas de ustedes, y con todas las cosas).
Y algunos filósofos idealistas le
llaman a lo suyo filosofía dualista (porque hablan de cuerpo y espíritu, de
materia y conciencia, pero la conciencia la entienden espiritual).
Y
los seres que son como nosotros siempre tendrán cosas desagradables, como
nuestros excrementos, y si este mundo fuera espiritual, las cosas no serían tan
básicas, como lo son, la vida no tendría necesidad de alimentarse, y (y por tanto) de defecar (la vida más
compleja, digo, porque las plantas no defecan, pero sí se alimentan).
7.2.3.1.6 La
“superación personal”
Y ahora entramos a eso que llaman superación
personal, también llamada desarrollo humano, o excelencia personal, o
autoayuda, y generalmente los que se dedican a esto son casi merolicos (eso
sí, las palabras no les faltan, pero son palabras tan huecas, tan facilonas,
pero tan llenas de ignorancia, y la ignorancia se les ve más cuando se meten en
terrenos que no manejan, cuando se atreven a hablar tan descuidadamente de
otras cosas, así como hablan tan descuidadamente de sus cuentos) y casi todos ellos mezclan a Dios o a misticismo con dinero
(y tal vez hasta tengan algún “chakra” de la
prosperidad), con éxito personal. Y también
hay ésos (merolicos, charlatanes) que hablan de (algo que
ellos llaman) “programación neurolingüística”
o ésos que hablan de (eso que ellos llaman) un “cuarto camino” (y al
hablar de un cuarto camino dan por sentado 3 caminos previos), pero es que en este grupo (como
en todos los dioseros) las mezcolanzas
abundan, incluso algunos de ellos hablan de una mecánica cuántica (la mecánica cuántica es un concepto científico) que dicen ya ha demostrado la existencia del alma, y al
mezclar tantas cosas, y además utilizar algunas palabras tomadas del lenguaje
científico, creen que también son científicos (están
como los Testigos de Jehová que dicen que la Biblia es científica, además de
histórica, y por histórica pretenden que creamos que lo del Diluvio Universal
fue cierto, y que sucedió en el año 2370 antes de Cristo. Y esos fanáticos le
llaman sabiduría divina a todos sus cuentos absurdos y llaman sabiduría humana
a todo lo que no venga en la Biblia, o en las distintas versiones de la Biblia,
porque hay varias Biblias; y esos fanáticos dicen que ellos confían sólo en la
palabra de Dios y no en la palabra del hombre, y no les pasa por la cabeza ni
por un momento que eso en lo que creen es también sabiduría de hombre, la
sabiduría que el hombre tenía en tiempos de los caldeos o en tiempos de los
romanos, el problema de esos fanáticos, de esos ignorantes, es que no sólo
siguen sabiduría de hombre, sino que siguen sabiduría de hombre más primitiva
que la actual; pero ellos viven en su mundo de ignorancias, de ignorancias
hasta el fanatismo, y desde ese mundo hablan de divino y de humano, y desde ese
mundo juzgan al mundo, a las cosas, a los asuntos humanos, a los problemas
humanos, a la suerte humana, a los problemas de la vida, a los problemas de
ser, a los problemas de las cosas, al ser de los humanos y de las demás cosas.
Y lo que yo les digo a todos ustedes es que la mayor parte de la sabiduría de
ustedes está equivocada y que la parte de la sabiduría de ustedes que no está
equivocada, está muy corta o desviada, muy lejos de la realidad de las cosas). Y muchos que están en eso de la superación personal
llevan a la idea de Dios hasta el extremo de hacerla equivalente con el universo,
y dicen que todos creemos en lo mismo, porque todo equivale.
7.2.3.2 Los no dioseros: científicos, filósofos
materialistas, revolucionarios materialistas
He inventado la palabra no diosero para
referirme a todos esos de ustedes que no consideran que haya Dios o cualquier
otra cosa como ésa.
Todo lo que es como eso que llamamos
Dios implica (además de muchísima ignorancia) sobrenaturalidad, es decir, un mundo espiritual (y la creencia popular de que cuando uno estornuda es porque
alguien se acordó de uno es un buen ejemplo de ese mundo espiritual). Y lo contrario a espíritu es lo no espíritu, lo no
espiritual, lo material.
En filosofía la palabra materialista no
significa amor por las cosas materiales, sino que se refiere a que las cosas
son materiales (naturales, solas, es decir, que no tienen un Creador), la palabra materialista se refiere a que las cosas no son
producto de ninguna Idea, o de ningún Espíritu, o sea, de ninguna cosa parecida
a Dios, a un Dios, a un Creador, a una Superinteligencia, a una Supervoluntad.
En filosofía se habla de Materia y de
Idea, se dice que las cosas, o son ideales (es decir, creadas por una
Idea universal, algo parecido a un Espíritu universal, algo parecido a un Dios,
algo parecido a Dios), o son materiales
(lo contrario a ideales, o sea, sin Creador, sin Dios,
naturales, solas).
Y la filosofía sólo puede ser material,
porque la filosofía está basada en conocimiento, y el conocimiento niega a lo
espiritual, a menos que sea un conocimiento muy escaso, y el conocimiento no es
exclusivo del humano, porque muchos animales más también conocen, entienden,
pero no tanto como nosotros los humanos.
7.2.3.2.1 Los científicos
Científico
es todo aquel que maneja el método científico, y desde ahí mira el universo. Y
ahí está el problema, que miran (los científicos que miran más, porque la mayoría de los
científicos vive ensimismada en sus particulares campos de estudio) hacia un universo, no hacia un ser, no hacia una realidad,
no hacia un mundo, no hacia unas cosas, no hacia los problemas de las cosas, o
sea, hacia los problemas humanos.
7.2.3.2.2 Los filósofos materialistas
Y los filósofos materialistas que más
entendían esa bruma llamada filosofía materialista (en donde no hay Dios, en
donde lo único que queda es un humano al que hay que hacerle justicia) se hacían revolucionarios y casi siempre caían en las
luchas que entablaban.
Y también en la filosofía
materialista hay mucha tontería, y el mejor ejemplo de esa tontería es el
marxismo, la filosofía materialista marxista.
7.2.3.2.3 Los revolucionarios materialistas
Y los niveles de conocimiento de
ustedes son muy bajos, y si quisiera demostrarles que ustedes no tienen mucho
conocimiento (ni aun en su nivel de conocimiento más alto, o sea, el de
los filósofos materialistas que optan por la revolución, porque los demás
filósofos materialistas no aterrizan su pensamiento. Y si los filósofos materialistas que optan por la revolución
tienen el más alto nivel de conocimiento entre ustedes es porque el querer
arreglar lo humano lo demuestra, se van a lo principal que puede haber para el
humano: mejores condiciones de vida: liberar a la humanidad de sus gobiernos,
de sus dioses, de su injusticia, de su desigualdad, de su dinero, de sus
fronteras, de sus vicios, de sus armas, de sus ejércitos, de sus policías. Los
filósofos materialistas que optan por la revolución más o menos ubican lo único
que los humanos podríamos ser aquí en unas cosas materiales sin sentido: ser
felices, pero todos, y para eso hay que hacer justicia, e igualdad. Pero esos
pobres filósofos materialistas que optan por la revolución también son humanos,
como ustedes todos, como nosotros todos, y pueden llegar a extremos como los de
los jémeres rojos, allá en Camboya, Camboya está al sur de China, los jémeres
rojos asesinaron a muchísimos de sus compatriotas camboyanos, y a los que les
perdonaron la vida los vejaron, los separaron por sexos, pero lo peor de los
jémeres rojos fue que, tal vez, fueron unos humanos también de lo peor, tal vez
fueron sólo unos aprovechados más, que dejaron para ellos lo que a los demás
prohibían: buena comida, mujeres, lujos; tal vez a los jémeres rojos ni
siquiera se les pueda llamar revolucionarios materialistas, sino sólo unos
locos más. Pero los humanos somos sólo humanos, aun los de mejores intenciones,
porque la vida nos llama, los apetitos nos llaman, las mujeres nos llaman) les pondría por ejemplo a sus peores niveles de
conocimiento (me gustaría que la totalidad de
la vida de todos nosotros estuviera grabada, para que pudiéramos ver las
películas reales), cuando oigo hablar a alguno
de sus más bajos niveles de conocimiento (y son
la mayoría de ustedes, no tengo que buscar mucho, a diario los tengo al
alcance, en mi familia, en la calle, en la radio, en la televisión), más convencido quedo de todo lo que estoy diciéndoles,
porque los más bajos niveles de conocimiento de ustedes son el indicador de lo
que son ustedes, y ustedes nunca pudieron mejorarse unos a otros, porque están
lastrados (dominados) por sus mayorías, y los gobiernos de ustedes salían de esas
mayorías (y los que gobernaban eran los más
vivillos de esas mayorías casi incultas).
Y gran parte de los filósofos
materialistas que optaron por la revolución fueron marxistas, y el marxismo
está tan equivocado en su análisis de la realidad que no sé cómo es posible que
todavía siga habiendo marxistas. Pero las revoluciones de justicia más
profundas que ha tenido la humanidad han sido obra de marxistas o de marxistas “herejes”.
Y también marxistas han sido los peores carniceros que han tenido los
revolucionarios materialistas, y carniceros contra los revolucionarios mismos,
contra marxistas herejes (contra marxistas que se apartaban un poco de lo que dijo
Carlos Marx, o Lenin, o Stalin), o contra los
anarquistas, o contra todo aquel revolucionario que no estuviera de acuerdo con
ellos. Y también entre los marxistas ha habido muchos seudomarxistas, pero esos
seudomarxistas no llegan ni siquiera a la categoría de revolucionarios, lo
revolucionario está también plagado de adulteración, de corrupción, de pequeñez
humana, de la inevitable pequeñez humana.
Y los marxistas creían (creen) que sabían las cosas (y
cómo es posible que tanto heroísmo haya salido de algo tan miope como el
marxismo), pero a mí el marxismo siempre me
pareció como una religión (y sin embargo tenía
que aguantar esa religión porque ahí estaban los poquitos de mis amigos que
intentaban cambiar al mundo), nunca pude
aguantar los pesados libros del marxismo (hasta
me revolvían el estómago), eran casi como otra
Biblia, una biblia sin hechos sobrenaturales, pero una biblia en donde también
se creía que estaba la verdad, y muchos lucharon (y murieron) por ese sueño.
Además de los marxistas, el otro grupo
principal de los revolucionarios materialistas fue el de los anarquistas (pero anarquistas no de cualquier
anarquismo, sino anarquistas de ésos de “sin Dios, ni amo”, sin Dios y sin
patrón), pero entre los anarquistas había
menos preparación, pero también entre los anarquistas estuvieron algunos de los
mejores revolucionarios (los más desprendidos,
los más humanos), y los anarquistas no tenían
un cuerpo de creencias como el de los marxistas, sus creencias eran (más) primitivas, (más)
utópicas, más sin idea de construcción de una mejor humanidad.
Y
hubieron otros revolucionarios materialistas que no fueron ni marxistas ni
anarquistas, revolucionarios que estaban de acuerdo en algunas cosas con el
marxismo (como la
construcción de un Estado fuerte, pero justo, pero muy fuerte, para que la
revolución no fuera desviada, y desviada no del evangelio marxista, sino de la
justicia, de la igualdad, de la libertad; un Estado que tuviera más justicia
que libertad, un Estado más justo y más libre que el marxista, pero tampoco con
mucha libertad, porque había que cuidar la revolución, y había que educar al
humano, hacerlo mejor, ir haciéndolo mejor, había que proteger al humano del
mismo humano, había que proteger el futuro de la humanidad, y para eso había
que sacrificar un poco a la humanidad del presente. Pero si había coincidencias
con el marxismo, es porque las ideas de cordura no son exclusivas de nadie,
sino que la cordura es cordura) y en otras con el anarquismo (con la libertad que querían los anarquistas,
pero una libertad más realista que la anarquista, había que sacrificar un poco
la libertad, para proteger la justicia, pero no olvidarse de la libertad). Y puedo hablar de esos posibles revolucionarios, porque a
algo así llegué yo desde hace mucho, pero no me quedé ahí (no pude quedarme ahí), sino
que continué (pude continuar) y continué (lo que nos hace
ser lo que somos, siguió y siguió, y uno es sólo lo que es, lo que puede ser), hasta donde estoy hoy.
7.2.4 Cosas de tipo yo
Y ahora llegamos a mí, a lo que soy yo,
a este tipo de cosas que puede llegar a las cosas, solito, a través de un largo
camino, pero inevitablemente, sin mérito, simplemente que es inevitable el no
poder adaptarse a la vida que ustedes (todos) viven,
no poder adaptarse (conformarse) a sus
miserias, a sus pequeñeces, a sus problemas gratuitos, y no todos los problemas
humanos pueden ser arreglados (qué más quisiera
que los problemas humanos pudieran tener arreglo, y hoy, lo único que puedo
hacer, es sacarlos de tanto problema, pararles su vida dañina, y ponerlos de
cara a la realidad, ponerlos ante su ser, enfrentarlos a su ser, a su triste
ser, a su triste final, a su triste realidad, a la triste realidad), si se pudiera estaríamos en otro orden de cosas, pero no
hay otro orden de cosas fuera de los 2 únicos posibles: o las cosas serían de
alguien (un Creador, Dios, u otros espíritus,
aunque fueran malignos, o dementes), o serían
solas (y las cosas solas no pueden ser
perfectas, no pueden ser sostenibles en inteligencia total, en inteligencia de
alcance de perro sí, en inteligencia de alcance de creyente de Dios o de Diablo
sí, en inteligencia de alcance de científico sí, en inteligencia de alcance de
filósofo materialista sí), y son solas.
Y
espero que con todo lo que estoy mostrándoles pueda hacer que algunos de
ustedes empiecen a mirar hacia las cosas, empiecen a mirar detenidamente las
cosas, empiecen a mirar hacia lo que estoy señalando, al menos ahora ya sabrán
qué mirar, hacia dónde mirar, ya la realidad no está en una masa caótica en
donde es tan fácil perderse, y lo sé porque yo vengo de ahí, yo también tuve 4
años de edad, y 16 años de edad, y el mundo que vivía era normal (normal de qué, no sé, pero
era normal, con creencias absurdas de dioses, con mentiras impunes, con muertos
que no tendrían por qué haber muerto, con un mal que podía ganarle al bien, con
un tener que seguir a pesar de todo, con que seguía lo que seguía, lo que podía
seguir, fuera justo o no, todo era normal), y
puede ser, que sabiendo hacia dónde mirar, pues vean, o empiecen a ver,
empiecen a entrar en la cuenta de las cosas, en las realidades de las cosas.
Y de una vez les aviso que si yo he
podido llegar tan lejos es por la inteligencia con que nací (la inteligencia que me
heredaron mis padres, que me fue heredada a través de mis padres), las cosas tienen explicaciones, no son mágicas, y la
inteligencia con que nací me ha permitido (sin
proponérmelo, simplemente se fue dando) llegar
a todo lo que estoy diciéndoles, y sé que soy inteligente porque en mis
escuelas siempre fui el número 1 (y sin tener
que andar matándome para conseguirlo), entre
mis iguales (o casi iguales, porque mis
compañeros de clases eran mayores que yo, porque por saber mucho me adelantaron
un año), y también sé que en cada escuela hay
muchos que son los números 1 de sus respectivos grupos, pero no sé, tal vez hay
de inteligencias a inteligencias, tal vez en la inteligencia se da eso de que
en tierras de ciegos los tuertos son reyes, y tal vez no todos los tuertos son
iguales, porque no me explico por qué todos esos inteligentes que actualmente
son (porque es la inteligencia lo que me ha
hecho a mí, porque no fueron los libros, a los 17 años de edad, que fue cuando
empecé a vislumbrar todo lo que estoy diciendo, aún no había leído muchos
libros, y hay y ha habido personas que han leído mucho más que yo. Y no fue
porque me metí a estudiar filosofía, durante medio año, cuando ya tenía 33 años
de edad, y nada más pude aguantar medio año de oír necedades. Y no fue mi
memoria, porque mi memoria es grande, pero no es tanta como la de ésos que casi
parecen grabadoras. Y no fue por mi mente algo matemática, porque cualquier
autista es más rápido que yo en las cuentas) no
se meten en el entendimiento (en una espiral de
entendimiento) que lleva hasta el
entendimiento de las cosas (sin proponérselo,
sino que simplemente llega un momento en que el mundo los saca de quicio, como
a mí, con la poca o mucha información que tenía a los 17 años de edad, pero que
ya era la suficiente), porque uno puede
compararse sólo con sus iguales, con los de su nivel, con los de su tiempo
(con una igualdad o casi igualdad de circunstancias), porque entre más nos vayamos hacia atrás en el tiempo,
menos mundo desquiciador había, y por tanto, los más inteligentes tenían un
mundo menos acabado que el de hoy, un mundo menos desquiciador (y si digo esto es por tratar de encontrar una razón, porque
tiene mucho tiempo, cientos o algunos miles de años, que ya ha habido un mundo
suficiente como para desquiciar a casi cualquiera, porque fue la tontería
humana y la terribilidad de las cosas lo que no me ha dejado en paz desde hace
muchos años).
8 Mundos que hay en las cosas
En las cosas hay mundos. Y si yo he
dividido las cosas en 4 tipos de cosas es porque hay esos mundos, mundos que
puedo ver en ustedes y en mí y en los perros y en las gallinas y en los
caballos y en las hormigas y en las arañas y en algunas plantas, como ésas que
se contraen si las tocamos. Y a toda cosa viva con excepción de nosotros, la he
colocado en un solo mundo, aunque entre ellas haya miles de submundos (el mundo del perro no es el
mismo que el de la hormiga). Y a las cosas que
son como nosotros las he colocado en 2 tipos de mundo: el mundo ustedes (el mundo en que son ustedes todos, pero no todos ustedes
son en los mismos mundos, sino que ustedes son en 2 principales submundos:
submundo diosero y submundo no diosero, y cada submundo tiene aún más
divisiones, principalmente el submundo de los dioseros, porque no todos los
dioseros creen en las mismas cosas, si ni siquiera los que creen en un solo
Dios creen en el mismo Dios. Hay un dicho de ustedes que dice que cada cabeza
es un mundo, pues en ese dicho hay algo de razón, porque es precisamente lo que
hay en cada uno de nosotros lo que nos hace ser tan diferentes, tan en grados
de conocimiento e ignorancia, tan en grados de bondad y maldad, tan en grados
de amor y odio) y el mundo yo (el mundo en que son los que son como yo, aquí en la Tierra
y en dondequiera que haya seres como nosotros, y ese mundo yo es un mundo muy
desesperado, sin paz, porque los que son como yo no pueden nunca adaptarse al
mundo de tontería en que son ustedes todos, porque ésos que son como yo piensan
que la tontería no tiene por qué ser, porque se dan cuenta de en dónde está la
tontería, y eso los lleva a jamás dejar todo lo que vislumbran de las cosas, y
todo eso que ellos ven en las cosas llega hasta todo esto que estoy
mostrándoles).
8.1 Mundo en que son las cosas de tipo piedra
El mundo (realidad, estado, situación, condición) en que son las cosas de
tipo piedra es el mundo más fundamental de las cosas, la vida es (surge, se da) de procesos
posteriores de las cosas (y el humano es de
procesos aún más posteriores).
El mundo en que son las cosas de tipo
piedra es el verdadero mundo de las cosas, los otros mundos son en el fondo
sólo desarrollos de ese mundo, pero esos otros mundos son mundos efímeros, y el
mundo fundamental es un mundo permanente (aunque en algún momento
dado no haya piedras, ni estrellas, ni universo como el actual).
El mundo verdadero de las cosas es el
mundo en que son las cosas de tipo piedra (cosas sin vida, cosas sin pensamiento), y de esas cosas de tipo piedra puede
surgir la vida, y ya habiendo vida podría haber humanos, pero no siempre hay
vida, y sin embargo siempre hay cosas, las cosas no necesitan a la vida para
ser, la vida la necesitan sólo algunas cosas de las cosas, sólo cuando hay vida
hay algunas cosas que no siempre hay.
8.2 Mundo en que son las cosas de tipo perro
Éste
es un sapo, que vive en algún desierto del planeta Tierra, y la mayor parte de
su existencia la pasa enterrado, como en hibernación, como en vida suspendida,
como vegetando, pero un día llega la lluvia a ese desierto, y se hace una
charca, y ese sapo despierta, y croa, y come, y tiene sexo, mientras dura la
charca, los pocos días que dura la charca, y ya no me acuerdo si ese sapo
vuelve a la inactividad una vez que se seca la charca, o si muere y deja
sapitos (o embriones de sapito), enterrados,
que despertarán en la lluvia del año siguiente, pero de alguna manera esos
sapos siguen, y croan, cuando pueden, cuando la vida los deja croar, cuando la
vida los hace croar. Pero fue la vida tan breve de este sapo (los pequeños momentos de ser feliz de este sapo) lo que me puso a pensar en la vida, tan pequeña, y aun si
ese sapo viviera 10 años, viviría realmente sólo las 10 temporadas de charca en
que despertara, estaría en la vida 10 años, pero en realidad sólo viviría unos
cuantos meses en total, y ese sapo aceptaba (y
aceptar es una palabra inapropiada en el caso de este sapo, pero ustedes son
casi como este sapo) la vida así (pero él qué sabe de la vida),
eso era la vida, eso es vivir, sólo ser, lo que se es, lo que es. Pero no para
nosotros, los que pensamos más la vida, los que podemos ser más vida, más
conciencia de vida, más conscientes de lo pequeña que es la vida, más
conscientes de lo pequeñas que son las cosas, de lo pequeños que somos, más
conscientes de que lo único que es (el ser) es pequeño, apto sólo para sapos,
para sapos que cuando los despierta la vida se ponen a croar, o a llorar, como
nosotros, cuando somos bebés, cuando llorar es tan natural, cuando nuestro ser
es casi sólo llorar.
Hace
años supe de este sapo, y me hizo pensar, como cuando vi libros de tiempos de
Hitler empastados con piel humana, piel humana judía, y cosas así (un montón de cosas así,
cosas que uno empieza a ver, o a medio ver, desde que es muy pequeño) hicieron eclosión, y una tarde, algo (no me acuerdo qué) fue la
gota que derramó el vaso, y empecé a meterme en qué era todo esto (en cómo era todo esto) en
que somos.
Y
ya después veía y veía, y vi a los perros, sintiendo necesidad de ladrar, a
otros perros, a las personas, a los carros, a los gatos. Y veo a los caballos,
tan estoicos, tan casi inmóviles, dejando que esa única oportunidad que tienen
para ser se les vaya tan monótonamente. Y veo a las ardillas con los cachetes
llenos de bellotas (bellotas que almacenarán),
y veo a las gallinas raspar con sus patas el suelo e inclinándose rápidamente a
ver qué es lo que salió que se pueda comer, y veo a las hormigas en su
incansable caminar, veo tanto afán, tanta necesidad de afán, y cómo no ver
mundos en todo eso que para ellos es la vida, y luego los veo a ustedes (todos) también metidos en
sus vidas, en sus creencias, en sus preocupaciones, y en sus despreocupaciones.
Y
los perros son los seres vivos que están más cerca de nosotros, de nuestras
vidas, y los veo incluso un poco modificados por nuestro estilo de vivir, son
perros ya con un poquito de humanos, ya hasta imitando algo de sus dueños, pero
siguen en sus mundos de perro, en andar oliendo, al amigo, al extraño, al
enemigo, a los anos, en sus mundos de oler, de olor, en sus mundo de
territorialidad, y en su hambre, y en su sed, y en su corretear, y en su ser
vida mientras se es vida, y un día ya no están, ya de ellos sólo quedan
recuerdos, y puede ser que entre ellos ni siquiera se recuerden, cuando ya no
están, cuando dejan de verse, de olerse, y cuando nosotros los humanos somos
niños pequeños tenemos aún menos memoria que los perros, pero nosotros llevamos
en nosotros nuestra potencialidad, así como los perritos llevan dentro de sí
sus potencialidades, y sus límites, el perro puede ser sólo perro, y el humano
puede ser sólo humano. Y el humano no se desarrolla completamente (y no me refiero a la figura exterior, sino
al cerebro, en donde está verdaderamente el humano, lo humano) si su cerebro está dañado, y entonces
vivirá su ser en mundos casi como de perro, pero los mundos normales de humano
son diferentes de los de perro, los mundos de perro sólo pueden ser comparados
con los mundos de perro, o con los de perrito, o con los de caballo, o con los
de planta, son mundos que no son ni humanos ni son en la inconsciencia total de
las piedras o de las estrellas.
8.3 Mundo en que son las cosas de tipo ustedes
Y
pudo haber habido sólo 3 tipos de mundo, pero hay 4, porque los datos que hay
hoy así lo muestran (lo que hoy vemos nosotros son las cosas en su despliegue
máximo, de complejidad, de problema. Porque seres que son como nosotros son los
únicos que ven las cosas desde conceptos, o desde ilusiones), pudo haber habido sólo 3 mundos: mundo en que son las
piedras, mundo en que son los perros y mundo en que son los humanos, pero no
hay tal mundo humano, sino que hay un mundo ustedes y un mundo yo, y el mundo
ustedes es inmensamente mayoritario, pero no como para equivaler a mundo
humano, porque hay uno de los humanos que no está perdido en el mundo ustedes,
en ese mundo en que hay Dios (siendo que no hay
Dios), en ese mundo en que hay una ciencia y
una filosofía materialista que no entienden (ni
están en caminos de entender) las cosas y que
por eso pueden convivir con la ignorancia, y con el mal (la pobreza, la vileza, el vicio, la violencia, la estafa,
la irresponsabilidad, la injusticia, la desigualdad, la infelicidad).
Y
ustedes (ustedes como un bloque, aunque ese bloque fuera sólo de
algunos de ustedes, ya sea que fueran los científicos o los filósofos
materialistas) no pueden entender las cosas
por sí solos, sólo uno de ustedes puede empezar a meterse en el camino que
lleva a entender las cosas (porque yo tuve que
salir de algún lado, porque durante mis primeros años de vida yo estuve en el
mismo mundo en que están ustedes, veía el mismo mundo que ven ustedes, estaba
encerrado en ese mundo, pero un día me di cuenta que ustedes todos estaban mal,
que algo raro pasaba con ustedes), alguien que
empiece a sentirse único (porque ése es el motor
principal que mueve a ése que es como yo, porque al que es como yo lo mueven
muchísimas cosas, como eso que conté de los sapos y de los libros de pasta de
piel judía, pero si ése que es como yo no se sintiera único, no seguiría el
difícil camino que es el tener que entender cómo son las cosas, a
contracorriente de todos los demás. Si ése que es como yo no se sintiera único
no aguantaría tanto, ése que es como yo siente que, o él termina de entender
completamente las cosas, o no las podrá entender nadie más. Ése que es como yo
está obligado a seguir, porque siente que el arreglo de la humanidad depende de
todo eso que él ve tan confusamente. Y hoy sé que si por alguna circunstancia
yo no hubiera podido terminar, alguien más hubiera tenido que hacer esto, tal
vez dentro de 10 años, tal vez dentro de 100 años), y ese alguien a ustedes todos los llamará ustedes, el
(mundo) ustedes del
(mundo) humano, el
(mundo) ustedes de
las cosas.
Para
entender al mundo, ustedes tienen que entender al ser humano, ver su como
tontería (ese estado increíble en que están ustedes todos). Para empezar a entender las cosas, ustedes tienen que
darse cuenta de la tanta tontería humana (principalmente
de la injusticia humana, y de lo absurdo de la religión, y de las diferencias
de opinión, y de los millones de mundos que hay en los humanos, pero tienen que
darse cuenta de que todos esos mundos están en relación con conocimiento, con
el poco o mucho conocimiento que hay en cada humano), y de la terribilidad de las cosas (incluida la tontería humana).
Pero casi ninguno de ustedes llega a tanto (puede
llegar a tanto, las cosas no los dejan llegar a tanto, porque nada es mérito ni
culpa nuestros, eso es algo que tiene que quedar bien claro, las cosas tienen
modos de ser y los modos de ser tienen circunstancias, condiciones, las cosas
no son mágicas), pero las cosas ahí están
(aun dentro de uno),
pero pueden verse (entenderse) sólo desde conocimiento, o desde justicia, pero es que el
conocimiento y la justicia están tan relacionados (y hay que darse cuenta de las propias injusticias de uno,
para no ser así, para ni siquiera mentir), y
el conocimiento tiene que ser un conocimiento auténtico, de ése que no deja en
paz, de ése que lo primero que tiene que ver es que a la humanidad le hace
falta justicia, y cordura, darse cuenta de que la humanidad necesita arreglo, y
no quedarse en las torres de marfil del conocimiento miope, y arreglar a la
humanidad significa quitarle las condiciones de problema, por eso a los
revolucionarios materialistas los he puesto por encima de los demás filósofos
materialistas y de los científicos, en cuanto a entendimiento, entendimiento
que es lo que nosotros los humanos somos realmente.
Y
ustedes todos viven en un solo mundo, y aunque algunos (muy pocos, siempre fueron
pocos, por eso siempre fueron abrumados por la mayoría de creyentes en dioses y
demás absurdidades) de ustedes (los científicos
y los filósofos materialistas. Y las mezcolanzas no valen, hay muchos de
ustedes que manejan algo de filosofía y/o algo de ciencia y/o algo de política
de bien demagógico, pero también creen en dioses o en un mundo semimágico, y a
ésos se les considera “intelectuales”, sólo porque medio manejan conceptos y
conceptos, y esos intelectuales son los líderes de opinión de la sociedad de
ignorancia y tontería en que están ustedes todos) sean capaces de ver la absurdidad de las creencias en
dioses, tampoco alcanzan a ver mucho, no alcanzan a ver completamente las
cosas, lo que dicen las cosas, ustedes viven en mundos aprendidos, en mundos
enmarcados, ni aun el mejor revolucionario materialista que ha habido entre
ustedes ha podido ver los asuntos de las cosas, ha vivido desesperado, tal vez
hasta ha vivido sin vicios, tal vez ha sido muy puro, casi como un místico,
pero un místico que quería justicia, igualdad, felicidad, bien, amor, para
todos, pero que no creía en ningún Dios ni en ningún nirvana espiritual.
A
ustedes el mundo no los apremia, no los urge, no los tiene en guerra constante,
ni aun al mejor revolucionario, al revolucionario más apremiado, más urgido,
más desesperado. Ustedes pueden aguantar la vida como es, y pueden aguantar a
la sociedad humana casi como es, no le piden mucho a la vida, no le piden que
sea más, mejor, buena, para todos, ustedes no reclaman por qué la vida no es
más, por qué Dios (un buen Dios, un Dios racional, un Dios no como en el que
creen los que creen en Dios, porque ese Dios hasta parece Diablo, porque admite
ignorancia, porque admite mal, porque admite daño, porque admite sufrimiento,
porque admite pecado. Pero ustedes no saben que los dioses surgieron del miedo,
del temor, del tener que adorarlos para aplacarlos, para que no causaran daño,
para que calmaran su furia, a la naturaleza dura ustedes la creyeron Dios, a
una naturaleza que está más o menos, pero que a veces tiene ciclos no tan más o
menos, y luego algunos de los antepasados de ustedes, creyeron en un Dios de
amor, pero la naturaleza siguió siendo naturaleza, y por eso ustedes crearon al
diablo, para tener a quien culpar, pero muchos de ustedes todavía creen en un
Dios duro, que hace lo que quiere, que salva a quien quiere, que jode a quien
quiere) no pudo ser, haber, ustedes no piensan
que esto (el mundo, la naturaleza, la realidad,
las cosas) tuvo que haber tenido Dios, ustedes
no piensan por qué las cosas son tan absurdas, tan absurdas que ni siquiera en
el bien se puede permanecer, pero mucho menos en el mal, el mal es la peor
tontería de la vida, de las cosas, pero las cosas no son ni buenas ni malas,
somos nosotros (los seres que son como
nosotros, no los perros o las gallinas, no las piedras o las estrellas) los que hablamos de bien y mal, de qué debería ser y de qué
no debería ser, somos nosotros, que nos hacemos ilusiones con el ser, pero el
ser (lo único que hay) es muy pequeño.
Ustedes
todos viven en el mundo ustedes (el mundo ustedes es sólo una etapa de los seres que son
como nosotros), y vamos a ver qué van a decir
ustedes cuando lean lo de en qué terminamos los seres que son como nosotros,
vamos a ver si escudándose en la religión o en la ciencia o en la filosofía
materialista crean que pueden decir que lo que estoy diciendo está mal, pero lo
bueno es que estoy mostrándoles las cosas, lo bueno es que estoy haciendo que
vean hacia las cosas (pero lo malo es que la
mayor parte de ustedes está muy ignorante). Y
yo no estoy condenando sólo al Dios en que creen muchos, la mayoría de ustedes,
sino que también estoy condenando a la ciencia (a
ese tipo de conocimiento tan especializado, pero tan desviado, a ese
conocimiento preciso, pero miope) y también
estoy condenando a la filosofía materialista, estoy condenando a todo lo de
ustedes, a todo lo que se es en ese nivel de los seres que son como nosotros en
que están ustedes (qué acaso no pueden entender
que nosotros somos sólo cosas, y que las cosas tienen modos, procesos,
explicaciones, y ninguna culpa, y ningún mérito, pero sí daño, pero sí
innecesariedad. Y los que manejan materialidad tienen que entender muchísimo
más que los que manejan espiritualidad, ésos que creen que somos espíritus, y
no materia con ojos, cosas con ojos, cosas con pensamiento, cosas con
imaginación, cosas con ganas de creer), y todo
lo de ustedes estoy condenándolo desde las cosas, estoy mostrando las cosas,
estoy mostrando hasta dónde llega ese no Dios (ese
no creer que las cosas fueron creadas por un Dios) que algunos de ustedes sí pueden entender, aceptar, no los
de Dios o los de tarot, ésos están más sumidos en las cosas, ésos están más de
espaldas a las cosas.
Y
ustedes todos están en un mismo mundo, en una misma inercia de las cosas, en la
inercia de la vida, así como los perros están en su inercia, pero no los culpo,
ustedes son sólo lo que son (y si condeno sus alcances de entendimiento, es sólo para que empiecen a
ver hacia lo que señalo, yo tengo que hacerles ver las cosas, cómo son las
cosas, lo que son las cosas como nosotros, y lo que son ustedes, cómo son las
cosas en ustedes, en la etapa ustedes, en ese increíble mundo que ustedes todos
viven y que parece casi de perro, como el que vive el perro), ustedes son sólo lo que pueden ser,
ustedes son como juguetes (y también yo, y también los perros) de las cosas, juguetes de los procesos de las cosas,
nosotros los humanos somos sólo cosas, jugamos en los juegos absurdos (pero las cosas no son absurdas, las cosas son sólo lo que
son, en seres como nosotros es donde están los juicios) de las cosas, tenemos que jugar los juegos de las cosas, de
lo que es, de lo único que es, de lo único que puede ser. El ser es sólo lo que
es, pero el pensamiento de nosotros es el que esperaba más, el pensamiento de
nosotros es el que ve las cosas desde pensamiento, y las imagina de
pensamiento, de sentido, con sentido, cosas que son como nosotros son las que
se hacen ilusiones con el ser, son las que piensan que el ser tendría que ser
lógico, son las que piensan que el ser tendría que ser Ser, y no el como
absurdo que es, y pensar que lo único es pequeño, casi como nosotros, casi como
ustedes, casi como el peor de ustedes, casi como el perro, casi como la piedra,
casi como la nada.
Y
ustedes todos viven en el mismo mundo, pero no todos ustedes saben lo mismo,
algunos de ustedes saben que una piedrotota que cayó del cielo acabó con los
dinosaurios. Y hasta hace menos de 30 años algún otro meteorito grande pudo
haber acabado con nosotros (ahora ya podríamos defendernos, los gringos ya podrían
defendernos. Un meteorito es sólo un asteroide o un cometa que chocan contra
otro cuerpo espacial, y en el Sistema Solar hay miles de asteroides y millones
de cometas),y al acabar a los humanos hubiera
acabado también a los dioses de los humanos (y
a la ciencia y a la filosofía de los humanos).
Pero los creyentes en dioses no saben cosas como las anteriores, los creyentes
en dioses ni siquiera pueden explicar por qué Noé no salvó también a los
dinosaurios. Pero cuando yo tenía 5 años de edad tampoco sabía de los
dinosaurios, yo sabía de mi pequeño mundo, sabía de Fernanda la Muerta, leía lo
de Fernanda la Muerta, porque eso era algo de lo que leía mi familia, en mi
mundo de 5 años de edad existía algo como Fernanda la Muerta, todavía no me
llevaban a las casas de Dios, todavía no sabía de Dios (todavía no llegaba a la etapa en que siempre que iba a
sentarme me acordaba de mi Ángel de la Guarda y procuraba no sentarme encima de
él, o de cuando en los Viernes Santos a las 3 de la tarde yo esperaba que el
universo se conmoviera y mostrara pesar por la muerte de Jesucristo, yo qué sé,
con oscurecimiento, con terremotos, desde esos mundos vengo yo, desde esos
mundos salí yo, desde ahí puede verse que siempre tomé las cosas muy a pecho,
muy de a de veras, por eso fue que me decepcioné tan profundamente de Dios, de
un Dios que en su mejor caso es sólo buenas intenciones, y que en su peor caso
es sólo ignorancia de la peor. Y como a los 14 años de edad yo empecé a
liberarme de Dios, pero de los espíritus no, porque todavía a los 15 años de
edad me asaltaban las dudas, los miedos), y en
caso de que yo dijera Dios (o le agradeciera a
Dios, o me encomendara a Dios, o le rezara a Dios, al Dios católico de mi
familia, un Dios mezclado con muchísimas otras creencias, un Dios tan fácil de
poner en evidencia, un Dios tan fácil de tirar, por eso ha podido ser tirado
por los cientos de iglesias del protestantismo, o por el paraprotestantismo,
pero es que es tan fácil creer, lo único que se requiere es ser muy ignorante, como
la mayoría de los humanos, o como yo a los 4 ó 6 ó 12 años de edad), era sólo como un lorito que repite lo que le dicen que repita,
un lorito que puede hacer eso, repetir, y así repitiendo, Dios va siendo, Dios
se va haciendo, Dios se va quedando, Dios sigue sobreviviendo, y en la mayoría
de la gente Dios siempre es, mueren con él en la boca, esperan irse a su Cielo (o a sus equivalentes), y
no a su Infierno, esperan que al final les perdone tantos pecados, tanta
maldad, y eso, sólo lo que ellos consideran pecado, maldad, y en esas faltas no
incluyen a la indiferencia, a la dureza de corazón, a no amar al prójimo sólo
un poquito menos que a Dios, no se preocupan por el prójimo, por eso yo valoro
tanto a los revolucionarios, porque trataron de hacerle un mundo mejor al
prójimo, trataron de hacer para el prójimo un Cielo aquí en la Tierra, pero
ningún Cielo humano es posible, los humanos no tenemos ninguna esperanza,
porque las cosas no son de eso, pero los revolucionarios también son piezas
dentro de las cosas, son el mejor extremo del humano en ignorancia, son lo
mejor del humano en ignorancia, son lo mejor que podían haber sido ustedes,
pero no lo fueron, permitieron que los poquísimos revolucionarios fueran
asesinados, por los poderosos, y por la indiferencia embrutecida de las
mayorías que esos revolucionarios pretendían ayudar, redimir, sacar de la
tontería humana más dolorosa: la pobreza, la explotación, la enajenación, el
vicio, el embrutecimiento. Pero cada vez habrá menos revolucionarios, porque la
pobreza extrema ya no es tanta, porque el progreso humano ha traído más riqueza,
y con eso más migajas (pero hubiera seguido
habiendo revolucionarios, porque la tontería humana sigue ahí, sólo que con otros
rostros, rostros que provocarían que algunos de ustedes se convirtieran en
revolucionarios, y murieran por eso, y rostros que hubieran permitido que otro
como yo llegara hasta el fondo de las cosas).
8.4 Mundo en que son las cosas de tipo yo
Y cuando somos niños vivimos, aunque no
sepamos ni para qué, simplemente vivimos, como cualquier perro, porque
despiertas, y tienes hambre, o tienes ganas de jugar, o tienes ganas de ir al
baño (o ya ni siquiera tienes ganas de ir al baño, porque ya
fuiste al baño), y te levantas, y vuelves a
ser, lo que tienes que ser, lo que se es, como el sapo, cuando lo levanta la
vida, cuando vuelve a los apremios de la vida, a lo que tiene que ser, a lo que
se tiene que ser.
Pero tiene muchos años que la vida se
me convirtió sólo en terminar esto que estoy diciéndoles. Y tenía que seguir la
aridez en que se me había convertido la vida, cuando me di cuenta que ya no
podía intentar jugar los múltiples juegos de ustedes, que ya no podía engañarme
con trabajar, y comprarme cosas bonitas, cuando ya ni siquiera podía ser
médico, porque lo que ustedes necesitaban era más que un médico, más que el
arreglo de su salud, o de su pobreza, ustedes necesitaban ser sacados de la
tontería, tenía que poder sacarlos de su tontería, moverlos de su tontería,
desatascarlos de su tontería; me di cuenta de que no podía complicarme aún más
la vida, me di cuenta de que casi no tenía libertad, y entonces empecé a vivir
sólo para poder con ustedes, e hice de mi vida sólo lo estrictamente necesario
para sostener ese deber, y a esos extremos de obligación llegan muy pocos, sólo
uno que otro revolucionario, a un vivir con deber, no por deber, sino con
deber, no poder emplear la vida para uno, pero en qué se emplea la vida para
uno, en darse gustos efímeros, gustos en que se consumirá nuestra vida, pero al
menos esos cadáveres habrán sido felices, esos sapos habrán tenido buena vida,
pero asistir al espectáculo humano de tontería, de asesinados, de estafados, de
mi país mediocre, creador sólo de mediocres, y de pobreza, y de jerarquías, y
de egoísmos, y de ignorantes, de sus locutores de radio o de televisión, oírlos
decir cada barbaridad, oírlos repetir barbaridades, las barbaridades promedio
de ustedes todos, las barbaridades en que están metidos, atrapados, perdidos,
ustedes todos, ver como ustedes todos están metidos en vidas de tontería, y
tener que soportar hasta lo peor de esa tontería.
Estoy mostrando las cosas porque tengo
que hacer que ustedes (porque nosotros los humanos estamos en el mismo barco,
somos el mismo barco, un barco que hasta hoy ha estado a la deriva de las
cosas, como los perros) entiendan las cosas, y
por tanto, que entiendan lo que son ustedes, lo que somos nosotros, por qué
somos nosotros, por qué nosotros somos nosotros, y no perros, por qué nosotros
no somos unos animales más del montón (por qué
nosotros que somos animales nos diferenciamos tanto de esos animales, tanto que
hasta llegamos a creer que no éramos animales, sino casi ángeles, seres
especiales, creación especial de un Dios, de Dios), por qué los perros son perros, por qué las cosas que son
como nosotros son las únicas que pueden enredarse con las cosas, y sólo
haciéndoles ver las cosas (completamente), podrán ustedes verse a sí mismos.
Pero hoy ustedes (todos) no saben lo que son, hoy ustedes (todos, y si recalco la palabra todos es sólo para que
ninguno de ustedes crea que por no creer en dioses infantiles, o en signos de
zodiaco, no está tan ignorante) son su ser
sólo a la mitad, hoy ustedes están entre el perro y lo que verdaderamente son, hoy
ustedes son en ese nicho de las cosas en que es el ustedes, y es un nicho de
las cosas, por eso ustedes son, pueden ser, así como son, en tontería, ustedes
pueden ser en ignorancia (ustedes que pueden
conocer más que el perro), ustedes pueden ser
en absurdidad (ustedes que no andan ladrándole
a los carros o a los palos con los que los golpean, o hasta huyendo de esos
palos con que una vez fueron golpeados), ustedes
que pueden utilizar su razonamiento, ustedes que no son sólo sapos disfrutando
una charca efímera, ustedes que pueden ver más allá de una charca. Pero hoy su
ser está a la mitad, y por eso hoy viven en el mundo ustedes, compartiendo su
charca con el Dios de la charca, y tratando de investigar científicamente la
charca. Y llegarán a saber que la charca se produce porque cae agua de arriba
(del cielo), llegarán
a saber el movimiento de la charca, los ritmos de la charca, y llegarán a saber
que no se puede escapar de esa charca, que están atados a esa charca, que la
charca es en lo único que pueden ser, que la charca es lo único que tienen para
ser, su ser, su pequeño ser.
Y dónde empieza el mundo, cuándo
empieza el mundo. Porque nosotros nacimos ya en un mundo, y por eso el mundo se
nos hace normal, y por eso el mundo hoy todavía sigue siendo normal para
ustedes todos. Pero sólo hay mundo (mundo humano, mundo desde pensamiento humano)
cuando hay seres que son como nosotros, cada
vez que en las cosas se producen seres que son como nosotros, y ese mundo va
produciéndose muy lentamente en las cosas (en
el mundo real), y viene desde mundos como el
de los perros, o como el de los “monos” (como
esos australopitecos que hace 4 millones de años eran eso que terminó en lo que
somos hoy. Nosotros empezamos a “hacernos” hace unos 5 ó 10 millones de años.
Pero lo humano no es una isla, lo humano son sólo las capacidades de la vida en
su máximo desarrollo, lo humano ya está prefigurado en los animales de más
abajo que él), y por eso el mundo humano va
habituándose, y por eso hoy ustedes todos están tan atrapados en su mundo
humano, y algunos lo creen de Dios (o de algún
otro espíritu, de alguna otra fuerza mágica),
y otros (los científicos y los filósofos
materialistas) no lo creen de Dios, pero lo
creen de progreso, creen que va hacia alguna parte, creen que tiene sentidos,
sentido.
Y ya tiene muchos años (10 000 años, tal vez 5
millones de años) que el proceso de mundo
humano empieza cada vez que nace un humano, porque la sociedad humana le enseña
a ser en el mundo humano, la sociedad humana le enseña que hay un mundo, que
hay mundo, y así va reproduciéndose ese mundo humano que es sólo desde el
pensamiento de tipo humano, pero ese mundo humano es sólo en las cosas de tipo
ustedes, porque los perros viven otras cosas, porque yo ya vivo otras cosas, yo
ya vivo sólo mirándolos a ustedes y a los perros metidos en sus mundos,
perdidos en sus mundos, yo ya vivo sólo tratando de hacer que ustedes entiendan
a los mundos: al mundo real y al mundo ustedes (al
mundo de ustedes, al mundo que viven ustedes todos), al mundo real y al mundo de tontería de ustedes, ese mundo
de ignorancia (y maldad) en que viven ustedes y que por eso no se dan cuenta de las
cosas reales, en ese punto (de no saber las
cosas) ustedes (todos)
están casi igual que los perros (pero a los perros no puede acusárseles de tontos, a ustedes
sí, aunque ustedes no tengan la culpa), pero
ustedes se dañan muchísimo más que los perros (los
perros no están enviciados, pervertidos, en países, en democracia, en
desigualdades económicas, los perros no andan matándose unos a otros, pero sí,
también entre los perros hay asesinatos, pero no son como los de ustedes. Pero
la violencia de ustedes viene desde esos mundos de perro desde los que salimos).
9 Las cosas podrían ser sólo de 2 cosas: de
(lo) Dios, o de
(lo) no Dios
Y si las cosas fueran de Dios
conducirían a un escenario, y si las cosas son de no Dios conducen a otro
escenario.
9.1 Lo Dios (lo espiritual)
Lo
Dios es todo lo que se parece a Dios, todo lo que es como Dios, todo lo que es
como dicen que es Dios, es decir, sólo creencias sin fundamento, sólo creencias
que no pueden sostenerse si se les somete a análisis. Y la no existencia de
Dios (y todo lo que es como Dios, o sea, toda creencia de
ignorancia, como los espíritus, o el tarot) puede
ser demostrada, pero para eso se requiere conocimiento, tanto del que va a
demostrar, como del que va a oír (o leer) la demostración, porque si no, no funciona mucho, para entender
tienes que entender, pero si entendieras, entonces no creerías en Dios, es un
círculo vicioso, pero de alguna forma hay que empezar a romper ese círculo
vicioso.
En
la palabra Dios va incluido todo lo espiritual, es decir, todo lo que huela a
espíritu, a espíritus, a seres que son sin necesidad de comer, a seres que se
mueven sin necesidad de piernas, o de manos, o de alas.
Y
en la palabra Dios va incluido Dios, y el diablo, y los demás dioses, y los
demás diablos, y los aparecidos, y la astrología, y la programación neurolingüística,
y la Dianética, y las brujerías, y los milagros, y la filosofía idealista, y el
vudú, y las creencias de que los ovnis son naves tripuladas por seres
extraterrestres, y todas las demás cosas como ésas que para creer en ellas lo
único que se requiere es ser ignorante (pero sorpresa, la mayoría de la humanidad
cree en cosas como ésas), por más que hayas
leído (o que creas que has leído), o por más que hayas ido a “universidades” (para que vean cómo se degradan las palabras, los conceptos,
por qué creen que está todo tan confuso) en
donde se “estudia” astrología.
En lo Dios va incluido el diablo, porque Dios
y el diablo son del mismo cuento, el diablo es el “coco” del cuento de Dios. Los
que creen en Dios creen que lo opuesto de Dios es el diablo (el Mal), pero no, lo opuesto de Dios es lo real, lo que no es cuento,
lo que no es imaginación, lo que no es ignorancia.
Lo
opuesto a Dios (y a
todo lo Dios, a todo lo que es como Dios) es lo no Dios, eso que
algunos de ustedes conocen como materialidad (y
el término materialidad proviene de la palabra materia, pero no se refiere
exactamente a la materia, ni siquiera a la Materia, sino a la condición de
material, a la condición de no espiritual), es
decir, que las cosas no son espirituales, es decir, que las cosas no son de
creación espiritual, que las cosas no son de creación de los espíritus o de un
Espíritu, sino que las cosas no fueron creadas por nadie, y entre esas cosas
sin Dios, sin creador, están los humanos, los seres humanos, unos humanos que
son como los perros o como las piedras (unos
humanos que vienen de lo mismo que hace posible que haya perros o piedras), sólo que diferentes, unos humanos que son sólo cosas,
sólo unas cosas más, unos humanos en donde hay la idea de Dios, unos humanos
que crean a Dios, unos humanos que imaginan a Dios, unos humanos que pueden
pensar que Dios es (pero afortunadamente no
todos, porque si todos los humanos pensaran que Dios es, que hay Dios, entonces
sí que yo estaría en problemas, porque, o estaría loco, o tendría por delante
un trabajo peor del que tengo: hacer entender las cosas, hacer entender unas
cosas que no tienen Dios, pero también tengo que hacer entender unas cosas que
tampoco son como las piensa ninguno de los pocos de ustedes que alcanzan a
pensar un poco: los de ciencia y los de filosofía materialista. Dios es sólo
ignorancia, de ignorancia, pero la ciencia y la filosofía materialista también
son de ignorancia, no son sólo ignorancia, pero también son de ignorancia).
Porque
lo que dicen las cosas (los datos que hay en las cosas, los datos que muestran las
cosas) es, que los humanos somos sólo cosas,
que el ser en humano es una manera de ser de las cosas. Y las cosas dicen
también que ustedes todos están en tontería, porque no han podido entender las
cosas, y porque tienen una sociedad de tontería (es
lo mismo). Y las cosas dicen también que si ustedes
todos están en tontería es porque así son las cosas, no hay culpas, no hay
méritos, sólo procesos. Y las cosas dicen también que en las cosas hay un
ustedes (que ustedes son un punto de las cosas). Y las cosas dicen también que en las cosas hay 4 tipos de
cosas (cosas de tipo piedra, cosas de tipo
perro, cosas de tipo ustedes y cosas de tipo yo).
Y las cosas dicen también que las cosas se conectan a través del humano (que se conectan en pensamiento, en ideas, en ojos que
pueden ver las cosas y preguntarse acerca de las cosas y engañarse con las
cosas. Las cosas dicen que cuando hay humanos es cuando hay mundo, mundo de
tipo humano). Y las cosas dicen también que
las cosas no son como las ve la religión, la ciencia o la filosofía
materialista. Y las cosas dicen también que los humanos terminan yéndose
(porque unas cosas solas no tienen ningún sentido,
porque nadie las creó, porque no hay nadie detrás de las cosas).
9.2 Lo no Dios (lo no espiritual)
Lo no Dios es todo eso que no es como Dios, todo eso que no es espíritu,
espiritual, fantasmas, aparecidos, astrología, tarot.
Lo
no Dios es tomar las cosas desde lo contrario de lo que Dios significa, lo no
Dios es tomar las cosas desde lo contrario a espíritu, y el espíritu puede
verse a través de la realidad, de que no se ven espíritus por ningún lado, que
los espíritus se ven sólo en los cuentos humanos de siempre, y cómo poder con
los cuentos, sólo con la dura realidad, y con darse cuenta de todo lo demás que
ustedes dicen, o creen, todas las barbaridades de ustedes, todas las
inconsistencias de las afirmaciones de ustedes. Los espíritus pueden verse a
través de la realidad, de que no los hay, simple y sencillamente como eso, que
no se ven, que nadie tiene pruebas, aparte de los cuentos humanos. A Dios lo
derrota la realidad, y la ignorancia de ésos que creen en él, sólo así puede
probarse Dios, en la realidad, y en la ignorancia de los que creen en él,
porque si no fuera suficiente la realidad, ahí está la ignorancia de los que
creen en él. Y entonces queda un Dios que se puede creer sólo por fe, pero fe
que no tiene nada que hacer frente a la realidad, fe que es derrotada por la
realidad de unas cosas que no tienen nada que ver con la fe, unas cosas que no
son así, unas cosas que no se manejan por los caminos humanos, ni siquiera por
las mejores intenciones humanas, no sólo por buenas intenciones humanas, como
Dios, sino las mejores intenciones humanas: justicia, igualdad, felicidad.
Lo no Dios es todo eso que no es como
Dios, y entre lo no Dios están las leyes (físicas, naturales) y teorías (cuerpos de conocimientos,
como la “teoría” de la evolución) de las que se
ha dado cuenta la ciencia, porque la ciencia se rige bajo el método científico,
en donde se admite sólo lo que puede probarse, medirse, someterse a pruebas y
más pruebas, y tiene que pasarlas todas, porque si no, no es científico, y eso
está bien, pero la ciencia se queda muy corta ante la realidad, porque las
cosas muestran más de lo que la ciencia trata, las cosas muestran ignorancia
humana, injusticia humana, y las cosas muestran también mucho daño, y las cosas
muestran también que no tienen sentidos, objetivos, las cosas muestran que no
son para nada, las cosas muestran que en las cosas el único que piensa en
sentidos, en metas, en propósitos, es el humano, pero que el humano es sólo una
cosa más, un humano que intentó ponerle un Dios a las cosas, y un humano que
intenta vivir las cosas desde ciencia o desde filosofía materialista; una
ciencia y una filosofía materialista no tan absurdas como Dios, pero que
tampoco son para aquí, para la realidad, una realidad que no es de lo que puede
idear (pensar) el
humano, el pensamiento humano es sólo una cosa más de unas cosas que no son
como es el pensamiento.
Y lo no Dios llega hasta la muerte
colectiva de la humanidad, todas las humanidades terminan renunciando a lo que
son, porque las cosas no tienen sentido (sólo algo como Dios le
daría sentido a las cosas), las humanidades
terminan yéndose porque aquí no hay lugar para ellas, para cómo son ellas, para
cómo se es desde pensamiento como el del humano (pero
pensamiento no como está hoy en ustedes todos, porque hasta ahora el tipo de
pensamiento en que están ustedes los ha dejado vivir, les ha permitido convivir
hasta con la peor tontería humana, y con la terribilidad que hay en las cosas), cuando ese pensamiento ya no está en tontería (el pensamiento del perro no tiene conflictos con las cosas,
igual que ustedes todos hasta hoy).
Lo no Dios en el nivel en que lo tienen
ustedes (algunos de ustedes, sólo algunos de ustedes, muy pocos de
ustedes. Porque la mayor parte de ustedes está en lo Dios, cree en Dios, o en
el diablo, o en otros espíritus, o en el tarot, o en las brujerías) también está en tontería, porque lo no Dios (el no considerar que en las cosas hay Dios, el no
considerar que las cosas fueron creadas por alguien, para algo) llega hasta la muerte de las humanidades, hasta la muerte
de toda humanidad (nosotros, los humanos del
planeta Tierra, somos sólo una humanidad más) que
se da aquí (en las cosas). O por lo menos llega hasta justicia, hasta la mejor
sociedad humana de igualdad y felicidad que pudiera crearse, una sociedad humana
en donde no hubiera más tontería que la de intentar permanecer en un lugar como
éste (en las cosas), ya no habría creencias en Dios, ni vicios, ni vilezas, ni
demás tonterías (ya no habría seres humanos
ricos y pobres, bellos y feos, fuertes y débiles, sanos y enfermos, jóvenes y
viejos, inteligentes y tarados, felices e infelices. Porque ya habríamos
quitado todas las diferencias, todos los hombres serían iguales, todas las mujeres
serían iguales).
Lo no Dios es sólo las cosas (o sea, todo. Y si tengo que
ser tan repetitivo es porque cuando uno lee se le escapan muchas cosas, e
intento que de tanto remarcar y remarcar las cosas a ustedes les quede muy
claro todo lo que tienen que entender, todo lo que hoy no saben de las cosas) agarradas desde no Dios, de que no hay Dios, de que no
existe tal cosa. El tomar las cosas desde no Dios es sólo porque a las cosas no
se les ve Dios. El tomar las cosas desde no Dios es sólo porque se ve que Dios
está sólo en la ignorancia de los que creen en Dios. Un Dios que está en lo
peor en que podría estar: en la ignorancia y no en la realidad, un Dios que
está al revés de cómo debía estar.
9.3 Pero lo Dios es sólo ignorancia
Pero el problema es que los humanos
caen no sólo en ideas de un Dios inexistente, sino que los humanos también caen
en conocimiento errado, y por eso es que el Dios humano puede sostenerse, como
hoy. El humano tiene problemas aún más grandes que Dios, y por eso no puede con
Dios, con la ignorancia profunda que significa Dios, y por eso ustedes no han
podido entender las cosas, y por eso ustedes están en los problemas en que
están, en problemas de cordura, de entendimiento.
Los problemas de ustedes están en el
entendimiento de ustedes, y entendimiento es lo que son ustedes, entendimiento
es lo que somos nosotros los humanos, nosotros los humanos somos entendimiento
hasta el nivel humano (los perros o las moscas o los chimpancés son entendimiento
de nivel perro, hasta como el nivel perro), pero
en ustedes todos ese entendimiento humano está a medio camino, y por eso es que
ustedes hoy son lo que son, están como están, en ignorancia y maldad (y la maldad podrán atribuírsela al diablo, o al humano,
pero a quién van a atribuirle la ignorancia, una ignorancia no tan difícil de
evidenciar, de demostrar, de tirar).
Y
yo digo que no creen en Dios los que de entre ustedes no están tan ignorantes,
y ésos que de entre ustedes no creen en Dios tampoco creen en ninguna cosa
parecida a Dios (como
la brujería o la astrología o los fantasmas), y yo digo que los que no creen en Dios
están en materialidad (sólo pueden estar ahí, porque hay sólo 2 opciones en las
cosas: materialidad o espiritualidad, que el ser sea material, o que el ser sea
espiritual) entendiendo el mundo desde
materialidad, no desde espiritualidad (y
espiritualidad es simplemente creer que hay algo así, creer que hay espíritu, o
Espíritu, o sea, Dios, o sea, astrología, es decir, astros movidos no por
fuerzas naturales, sino por una espiritualidad que llena el universo, que
gobierna el universo). Y ésos de ustedes que
no ven el mundo desde Dios, son los que están en ciencia o en filosofía
materialista (y en la necesidad de una
revolución que pueda solucionar los problemas de estos seres humanos
materiales. Y los revolucionarios materialistas marxistas creen en un
determinismo casi como el de Dios, creen que en las cosas hay sentidos,
objetivos, creen que en el humano y en el universo hay sólo progreso y más
progreso. Y eso parece muy ciego, pero la ciencia está aún más ciega que eso,
la ciencia ni siquiera se ocupa de la justicia, y la ciencia también cree en el
progreso, pero la ciencia sabe que no hay progreso indefinido, porque el
universo algún día va a terminarse, y con él el ser humano terrícola y su
investigación científica).
Y
los asuntos humanos no se agotan en un Dios, sino que los asuntos humanos se
agotan en unas cosas que son sin Dios, porque lo no Dios de las cosas condena a
la muerte a los humanos, y por eso las humanidades no son por mucho tiempo, por
eso no han venido seres extraterrestres a visitarnos, porque seres como los humanos
pueden llegar a navegantes, a exploradores, a conquistadores, a turistas, pero
no a astronautas durante mucho tiempo, sino sólo mientras su destino no los
alcanza. Y hasta hoy no han venido extraterrestres a visitarnos, seres
extraterrestres, humanos extraterrestres, porque los perros o chimpancés,
terrícolas o extraterrestres, no pueden mucho. Y pudiera ser que si no han
venido a visitarnos humanos extraterrestres es porque somos la primera humanidad
de este universo actual, o porque somos de las primeras humanidades de este
universo actual, y las otras humanidades todavía no han podido alcanzar nuestro
planeta. O puede ser porque las humanidades son como estoy diciéndoles y
entonces las humanidades renuncian a andar de astronautas, porque se dan cuenta
de qué es lo que son las cosas, y se van. Porque hasta hoy no hay pruebas de
seres extraterrestres (ya sean humanos, o dioses),
por más que los creyentes de los ovnis digan que en los dogon (una etnia de África, allá por Malí, Malí está al sur de
Argelia, Argelia está al sur de España) o que en
los mayas (una etnia de América Central)
hay pruebas (unas
pinturas, unos relieves, unas pinturas de gente con una especie de casco, un
relieve con un maya en una posición como de piloto, como de piloto de algo
parecido al panel de control de un avión. Y asuntos como el de Dios, o como el
del tipo de extraterrestres en que creen los creyentes de los ovnis, nos llevan
a un tipo de mundo espiritual de puros enredos espirituales, en donde las
afirmaciones de Dios niegan a ovnis y viceversa, o en donde se acomodan, pero
en detrimento de alguno de los 2, o en donde sale un nuevo Dios mezclado con
ovnis) de actividad extraterrestre, hasta hoy
los creyentes en los ovnis están como los creyentes en Dios: sin pruebas
(eso de los ovnis es como lo de Dios: creencias, sólo
creencias, sólo absurdos, si a los creyentes en Dios queremos entenderlos,
tenemos que entender también a los creyentes en los ovnis, porque si no, no
podemos con tantas creencias de los humanos, aunque sean de buenas intenciones,
como algunas de las creencias en Dios, o de total ignorancia como todas las
creencias en Dios y como todas las creencias en los ovnis). Las humanidades son en tanto no saben las cosas, el
conocimiento pierde a los humanos, porque los condena (los condena a la muerte, porque se dan cuenta de que en las
cosas no puede sostenerse ese ser humano en su forma completa, o sea, en
entendimiento total), por eso hasta hoy el
conocimiento no los había condenado a ustedes.
Y
si Dios nos hizo a su “imagen y semejanza”, entonces por qué nos dotó de
aparato digestivo (de boca, de esófago, de estómago, de intestinos, de ano, y
además está el apéndice, ese apéndice que hoy ya no tiene ninguna utilidad,
pero que ahí se quedó, como una prueba más de la evolución de la que
provenimos), qué acaso él tiene aparato
digestivo, qué acaso el come, y defeca, en cosas así se ve al ser humano que
está detrás de Dios. El Dios del humano tiene mamas (como el humano, como el perro, el humano inventó a un Dios
del tipo de los animales mamíferos), pero no
tiene ombligo. El humano terrícola creó (inventó)
a un Dios a imagen y semejanza del humano
terrícola, y a imagen y semejanza del humano terrícola que fue posible, del
humano terrícola que hoy es, porque si un meteorito no hubiera extinguido a los
dinosaurios pudo haber habido un humano terrícola del tipo de los dinosaurios,
y el nuestro ya jamás hubiera sido, un humano dinosaurio que hubiera creado a
Dios a su imagen y semejanza: sin mamas, sin pelos, sin menstruación, con cola (pero lo más probable es que no tendría cola, porque la
hubiera perdido en la larga historia de la evolución, y nosotros no tenemos
cola, en algún momento la perdimos, pero ese momento fue hace mucho porque ese
rasgo también les quedó a los bonobos y a los chimpancés y a los gorilas y a
los orangutanes, ese rasgo fue antes de que nuestras líneas se separaran de bonobos,
chimpancés, gorilas y orangutanes, y si ese dinosaurio hubiera conservado la
cola, hubiera sido interesante ver a su Dios también con cola), con la imagen espejo que son un humano y su Dios (y Dios debe ser terrícola, porque la imagen y semejanza de
nosotros está modelada de acuerdo a la fuerza de gravedad y a otras condiciones
que hay en el planeta Tierra). Y los
diferentes humanos que se den en la eternidad de las cosas más o menos se
parecerán en el aspecto externo, pero serán exactamente iguales en las
capacidades de pensamiento.
Y Dios también tiene boca (pero
a él la boca no le sirve para comer, sino para hablar, y tal vez hasta para
besar), y por eso nos dio boca a nosotros
(pero también le dio boca al perro, al perro que no
habla, pero que ladra, pero que no besa, pero que come, que tiene que comer,
porque así se sustenta la vida en ese nivel de la vida), y la boca no sólo nos sirve para comer, sino también para
hablar, pero la boca no fue hecha para hablar, la boca fue hecha, se hizo, se
produjo, para que una parte de la vida (principalmente
la mayoría de los animales) pudiera
alimentarse por ahí, y después la boca también sirvió para que una parte de la
vida pudiera emitir sonidos, o gruñidos (como
los del humano antes de que pudiera hablar), o
ladridos, o chasquidos, o cantos (como los de
las aves), y palabras, la boca también sirvió
para hablar, y la boca sirve también para escupir, como escupimos nosotros, y
las llamas, y las vicuñas, y los camellos (y
las llamas y las vicuñas y los camellos pertenecen a la familia de los
camélidos), y luego la boca sirvió también
para que una parte de la vida pudiera besar, nosotros besamos, y creo que los
bonobos también besan. Y los bonobos pertenecen a la familia de los homínidos,
y a esa familia también pertenecen los chimpancés, y los gorilas, y los
orangutanes, y nosotros. Y nosotros también pertenecemos al orden de los
primates (como los mandriles, como los lemures).
Y nosotros también pertenecemos a la clase de los
mamíferos (como los camellos, como los ratones).
Y nosotros también pertenecemos al subfilo de los vertebrados
(como los peces, como las víboras). Y nosotros también pertenecemos al filo de los cordados (como las pikaias, ya extintas). Y nosotros también pertenecemos al reino animal (como todos los demás animales). Y nosotros también pertenecemos al dominio eucariota
(como las plantas, como los hongos). Nosotros los humanos terrícolas estamos atados a la cadena
de la vida terrícola, nosotros los humanos nos explicamos dentro de la cadena
de la vida, nosotros los humanos no nos explicamos dentro de la creación
especial de un Dios, nosotros los humanos somos sólo unos animales más, y los
animales son la parte de la vida que más lejos puede ir, los animales son la
parte de la vida que puede llegar a producir cosas como nosotros: los seres
(o cosas) que crean a
Dios, que inventan a Dios, que se complican con Dios, y con todo lo demás que
se parece a Dios, como el diablo, como la astrología, como la brujería, pero
aún más, a esos seres también se les complica el entendimiento, no sólo hasta
el punto de que crean que existe Dios y la brujería, sino que el entendimiento
se les complica hasta el punto de caer en un conocimiento científico y en un
conocimiento filosófico que no son capaces de poder con Dios o con la brujería
o con la injusticia (y mucho menos de entender
la realidad, pero es lo mismo, la ignorancia es toda la ignorancia, y va desde
no poder con un Dios o con una brujería, hasta no poder con casi nada, mucho
menos con la realidad), el único lugar de
ustedes desde donde se intenta enfrentarse a Dios y a la injusticia (y a la violencia, y a los vicios, y a la maldad, y a la
desigualdad) es por el lado de la revolución
materialista.
El asunto es muy sencillo: si hay Dios,
entonces las cosas son de Dios, y si no hay Dios, entonces las cosas no tienen ningún
sentido. Y lo que yo digo (y muestro) es que no hay
Dios, lo que yo digo es que Dios no es, lo que yo digo es que Dios está sólo en
la peor ignorancia de ustedes todos, pero también yo digo (y muestro) que el
entendimiento de ustedes (el entendimiento que
alcanzan los que de entre ustedes entienden más) está muy corto, porque no ven qué es lo que pasa si no hay Dios, porque
no ven cuáles son las conclusiones de unas cosas (naturaleza, realidad, mundo, ser, universo, vida) vistas desde sin Dios (pero
si ni siquiera ven lo que está detrás de Dios y de la injusticia, pero es parte
del mismo problema, la ignorancia en que están ustedes todos no les permite ver
los problemas más evidentes de los humanos, mucho menos los asuntos más
profundos de las cosas).
9.4 Pero lo no Dios llega hasta la muerte
colectiva y planeada de todas las humanidades
Unas cosas que no son de Dios son unas
cosas solas, sin sentido, porque sólo algo como Dios le daría sentido a las
cosas, le daría objetivos, propósito, dirección, las cosas serían para algo. El
que las cosas no sean de Dios no permite que seres que son como nosotros
podamos hacer una vida aquí, porque, por qué viviríamos, para qué viviríamos
Lo no Dios lleva a los seres humanos
hasta un final porque unas cosas sin ninguna de las características de Dios (unas cosas que no tienen ni
siquiera ninguna de las características del humano, del humano que está detrás
de Dios, del humano que crea a Dios y que lo hace como es el humano, sólo que
muchísimo más grande, infinitamente más grande, Dios es humano, Dios es del
humano, pero las cosas no son del humano, las cosas no son humanas, el humano
es el que es de las cosas, pero hasta hoy ustedes todos han tomado las cosas al
revés: irreales: o Creación de un Dios, o universo que puede ser investigado,
explorado, explotado. Pero en el universo se puede ser, se sea feliz o infeliz,
despierto o dormido, vivo o muerto, inconsciente o medio consciente, pero no sí
se es consciente, completamente) nos dejan sin
nada, porque no podemos engañarnos con el bien, con el amor, con la justicia,
con la igualdad, con la felicidad (con la
satisfacción de las pasiones humanas, una satisfacción de pasiones que al tener
que ser para todos tendría que ser regulada), porque
las cosas no son así, las cosas no son de nada, las cosas de no Dios son casi
nada, nosotros somos sólo unos perros más, sólo unas piedras más, pero los
perros y las piedras no pueden saber lo que son, ellos son otro mundo, otra
realidad, otras cosas, ellos son en las cosas como son las cosas, ser sólo lo
que se es, ser sólo lo que es, sin preguntas, y por eso sin problemas, sin los
problemas que puede ver el pensamiento completo, un pensamiento completo en el
que no son los perros, pero tampoco ustedes, ustedes todos.
Unas cosas que no son de Dios, son unas
cosas que son a través de seres que son como nosotros (los seres que son como
nosotros son en los que son unas cosas que son), en seres como nosotros las cosas son a través del pensamiento (un pensamiento diferente al pensamiento del perro, al
pensamiento tipo perro), desde pensamiento,
desde las ilusiones del pensamiento, desde los errores del pensamiento, desde
los errores en que puede caer el pensamiento, desde los problemas del
pensamiento, en seres como nosotros las cosas son alteradas por el pensamiento,
por un pensamiento que puede pensar muchísimo más que el pensamiento del perro.
Y tendríamos que irnos porque aquí, en
las cosas, en lo único, no hay lugar para nosotros. Y podríamos intentar ser,
pero no deberíamos, porque además de ser tonto, sin sentido, innecesario, nos
meteríamos en complicaciones, continuaríamos algo que no tiene por qué ser
continuado, hambres (necesidades, deseos) que
no tenemos por qué provocarlas, causarlas, crearlas, hacerlas, producirlas,
seguirlas produciendo, que se sigan produciendo. Y no seríamos justos, con los
que sólo han venido a joderse, y han sido muchísimos, y somos muchos aún hoy, y
todavía habría muchos, porque no podríamos lograr la situación de no problema
(de no problema dentro de los problemas de las cosas,
dentro de la terribilidad de las cosas, dentro de la falta de sentido de las
cosas) de la noche a la mañana, sería tonto (sería un mundo artificial, absurdo), porque el sacrificio sería inútil, innecesario, que sólo
se justifica el sacrificio cuando es para algo, cuando tiene sentido. Dejemos
que la inconsciencia sea, dejemos que lo que no es capaz de redención sea,
porque también los perros sienten, pero es diferente, no sienten tanto (no les importa nada), aunque
nosotros al final no sentiremos nada, pero sabemos, hoy sabemos, de nosotros, y
de la película del nosotros.
CONCLUSIÓN
Unas cosas de no Dios nos condenan (a todo lo que sea como
nosotros) a la muerte. Pero no nos obligan, no
pueden obligarnos, quien nos dice de esta condena es nuestro entendimiento. Y
nosotros no somos libres, pero aquí podríamos ser, si lo quisiéramos, si lo
decidiéramos, porque nadie está corriéndonos. Yo sólo estoy explicándoles las
cosas, hasta dónde llega todo lo que veo.
No quiero asustarlos, pero esta
explicación no puede estar completa si no muestro todo.
Pero por el momento tenemos tareas más
urgentes, más inmediatas: detener la tontería, tanta tontería, tanto mal, tanto
daño. Ya después (después, en 30, o en 100 años) se verá lo demás, pero sólo piensen que, de acuerdo a lo
que yo digo en esta explicación, nosotros no somos la única humanidad, y atrás
de nosotros (en la eternidad que ya ha pasado
antes de nosotros) ya ha tenido que haber
millones de millones (billones de billones,
trillones de trillones, cuatrillones de cuatrillones, la eternidad no tiene un límite)
de humanidades, nosotros no somos los únicos que
llegan a los dilemas de las cosas.
Y en caso de que (después) se optara por la muerte (de
todos, y al mismo tiempo), ésta tendría que
planearse muy bien.
Pero en caso de que decidieran quedarse
van a tener que vivir en una completa justicia e igualdad, y la igualdad llega
hasta la igualdad de los cuerpos (ya les dije que tendrían que ser puros clones, de hombre y
mujer), y no va a haber dinero, ni negocios,
ni lujos, ni propiedad privada más allá de las pertenencias muy personales, ni
fronteras, ni gobiernos como los que tienen, ni educación como la tienen, ni
abogados, ni barrenderos, ni cárceles (y tal
vez nos metamos en problemas, pero habrá que abrir las cárceles, porque hoy tanto
dentro como fuera de las cárceles hay humanos buenos y malos), ni armas, ni ejércitos, ni policía, ni vigilantes, ni
mascotas, ni vicios, ni artistas, ni deportes tontos, ni diversiones tontas, ni
desperdicio de recursos naturales, ni trabajo innecesario, van a tener que
organizar la sociedad para que no haya necesidades, y con el mínimo tiempo de
trabajo, van a tener que estudiar más al cuerpo humano para luchar contra la
enfermedad, contra el envejecimiento… en pocas palabras: van a tener que ser lo
mejor que puedan ser, y no va a tener que haber nada que no deba ser. Y qué difícil
va a ser hacer todo esto: evitar lo más que se pueda todo problema, ya ustedes
se irán dando cuenta de todo lo que significa eso.
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